El modelo tradicional decae en Europa

El censo tradicional, un proceso largo y caro, deja paso a otros sistemas de recuento en varios pa¨ªses europeos, como Alemania (con un sistema similar al que implanta Espa?a) o Francia, que modific¨® en 2004 su manera de hacer el recuento de la poblaci¨®n. Dej¨® de hacer una consulta exhaustiva casa por casa cada diez a?os y comenz¨® a llevar a cabo una encuesta anual a un porcentaje determinado de la poblaci¨®n. As¨ª, desde esa fecha, en vez de ir hogar por hogar, los encuestadores franceses recogen datos de todos los habitantes de poblaciones menores de 10.000 habitantes y del 8% de los habitantes de las poblaciones que exceden esa cifra. En total, se pregunta a cerca de nueve millones de habitantes (de los 65 con que cuenta Francia).

"El cambio se hizo para ahorrar, ciertamente, pero tambi¨¦n por otras razones", explica Fran?ois Clanch¨¦, jefe del departamento de Demograf¨ªa del Instituto Nacional de Estad¨ªstica y Estudios Econ¨®micos (INSEE, en sus siglas en franc¨¦s), que est¨¢ muy satisfecho de la modificaci¨®n y asegura que funciona bien. "Una de estas razones es la calidad de los datos recogidos. Se mejora el proceso. En el censo casa por casa que hac¨ªamos cada diez a?os hab¨ªa problemas: era dif¨ªcil controlar las respuestas, formar a los encuestadores, verificar el posible fraude...".

Seg¨²n Clanch¨¦, reduciendo el n¨²mero de encuestados se afina en la respuesta. "Sobre todo porque se pueden refrescar los datos mucho m¨¢s. Nosotros hac¨ªamos un censo cada diez a?os. Ahora, se lleva a cabo una consulta anual. En cada resultado, eso s¨ª, se tienen en cuenta tambi¨¦n los datos de los cuatro a?os anteriores".