M¨¢s de 10.000 kil¨®metros perdidos en tres a?os y medio

Si un coslade?o trabaja en Vallecas (Madrid) y todos los d¨ªas coge la M-45 para llegar a la oficina ha perdido desde octubre de 2007 m¨¢s de 10.000 kil¨®metros, cientos de horas en tiempo y otros tantos euros en gasolina. Con el corte de los accesos del municipio a la autov¨ªa para ampliar la rotonda de entrada y dar servicio a los supuestos 500.000 vecinos que iban a vivir en la promoci¨®n del Ca?averal -a¨²n sin construir-, el trabajador coslade?o solo ha ganado tiempo al volante. En resumen, un rodeo diario de siete kil¨®metros.

Las obras iban a durar unos meses, pero el viaje de ida y vuelta que hay que hacer para salir de Coslada y que obliga a retroceder hasta la salida de San Fernando a¨²n no tiene fecha de caducidad. Hay que remontarse hasta mediados del a?o 2007 para encontrar el origen de las numerosas quejas de los vecinos de Coslada, que el pasado domingo salieron por primera vez a la calle para exigir la reapertura de la v¨ªa.

El corte en los accesos los llev¨® a cabo, con la aprobaci¨®n de la Comunidad de Madrid, la junta de compensaci¨®n de El Ca?averal, encargada del gran desarrollo urban¨ªstico, enclavado en el t¨¦rmino municipal de Madrid. Las peque?as rotondas de acceso a la autov¨ªa que daban servicio a los 90.000 coslade?os no eran suficientes para soportar la presi¨®n de tr¨¢fico que podr¨ªa generar la nueva masa urban¨ªstica. Bajo la promesa de que solo ser¨ªan unos meses, apenas se oyeron quejas y retroceder hasta la salida de San Fernando era, en principio, un paseo.

Han pasado ya casi tres a?os y medio y, aunque todav¨ªa no se ha levantado ni un solo edificio en El Ca?averal, la junta de compensaci¨®n mantiene cerrada la rotonda. El paseo se ha tornado ya interminable. La Coordinadora de Asociaciones de Vecinos de Coslada, promotora de la manifestaci¨®n que el pasado domingo reuni¨® a unas 500 personas, se vio sorprendida por el ¨¦xito de la movilizaci¨®n y ya ha anunciado nuevas convocatorias. "Ahora no pensamos parar, solo hay que hacer unos metros de vial", sostiene el vicepresidente de la asociaci¨®n, Tom¨¢s Arcos.

En los ¨²ltimos a?os, el Ayuntamiento de Coslada, la Direcci¨®n General de Carreteras de la Comunidad de Madrid y los gestores de las obras se cruzaron numerosas cartas sobre el tema. En una de las ¨²ltimas, la junta de compensaci¨®n plantea una exigencia: solo abrir¨¢ los accesos a la M-45 si el Ayuntamiento de Coslada acepta que una nueva v¨ªa -que ellos mismos han construido- una en l¨ªnea recta la futura promoci¨®n de viviendas con el municipio. As¨ª, los supuestos 500.000 pr¨®ximos habitantes podr¨ªan evitar la autov¨ªa entrando por Coslada.

Mientras la gestora del Ca?averal mantiene su pulso por una carretera para su ciudad fantasma, el Ayuntamiento mantiene que en "ning¨²n caso" se va a permitir la nueva v¨ªa y exige que se reabra la rotonda. Ajeno a todo esto, el Gobierno regional se lava las manos: "Nosotros solo actuamos de mediadores. Tienen que arreglarlo entre ellos". Hasta entonces, la pr¨®xima semana, m¨¢s viajes de ida y vuelta.