La celebraci¨®n del bicentenario en Sevilla

En 2011 entramos en la recta final de preparaci¨®n del bicentenario de la primera carta magna liberal de Europa, que cumplir¨¢ 200 a?os el 19 de marzo de 2012. Conmemoramos nada menos que el nacimiento de las libertades y los derechos civiles en nuestro pa¨ªs, del concepto de ciudadano y de la Espa?a moderna. Pero no solo de Espa?a: la Constituci¨®n de 1812 se convirti¨® en la norma base que sirvi¨® de modelo a otros pa¨ªses europeos para la redacci¨®n de las suyas propias, y su influencia est¨¢ presente en los fundamentos constitucionales de la mayor¨ªa de los estados americanos tras su independencia. Celebramos el bicentenario de la primera constituci¨®n europea que estableci¨® la soberan¨ªa popular, la divisi¨®n de poderes, la libertad de expresi¨®n y la libertad de imprenta, es decir, celebramos que hace 200 a?os fuimos pioneros al implantar de forma real los primeros valores democr¨¢ticos.

La iglesia de San Hermenegildo de Sevilla es la m¨¢s ligada a la historia del parlamentarismo

Andaluc¨ªa se prepara en estos meses para recordar estos acontecimientos tan transcendentales, cuyo proceso embrionario tuvo lugar en la ciudad de Sevilla, un hecho poco conocido por los ciudadanos, en sus dos vertientes, el constitucionalismo y el parlamentarismo. Y es mucho, en efecto, lo que tiene que decir Sevilla sobre este noble viaje que se gest¨® en nuestra ciudad, que se reforz¨® durante los tiempos turbulentos de la invasi¨®n de los pa¨ªses europeos absolutistas liderados por Francia, y que dio origen a toda la trayectoria democr¨¢tica de la Espa?a contempor¨¢nea.

Son dos los edificios de nuestra ciudad ligados a estos acontecimientos: el Real Alc¨¢zar, al constitucionalismo, y la iglesia de San Hermenegildo al parlamentarismo.

Fue en el Real Alc¨¢zar de Sevilla y en los caf¨¦s e imprentas aleda?as donde grandes pol¨ªticos e intelectuales y j¨®venes liberales como Jovellanos, Saavedra o Blanco White, se reunieron para disertar y difundir las nuevas ideas que abogaban por una m¨¢s amplia libertad de imprenta, la convocatoria de las Cortes y la elaboraci¨®n por parte de ellas de una Constituci¨®n. Durante 1809, a?o en que el Alc¨¢zar fue sede de la Junta Central, se cre¨® una comisi¨®n constitucional que trabaj¨® exclusivamente centrada en estos asuntos, consiguiendo en octubre de ese a?o el decreto de convocatoria de las primeras cortes, y en enero del a?o siguiente la publicaci¨®n de las instrucciones para la elecci¨®n de diputados, d¨ªas antes de que la Junta Central se trasladara a C¨¢diz.

La Constituci¨®n de 1812 tuvo, como sabemos, un primer periodo de vigencia muy breve, de apenas un par de a?os, reviviendo despu¨¦s durante el tambi¨¦n breve trienio liberal, a partir de 1820. En esta ocasi¨®n ser¨¢ la iglesia de San Hermenegildo el lugar elegido cuando de nuevo las Cortes Generales se establezcan en Sevilla durante dos meses huyendo de las tropas francesas. Rele¨ªa recientemente las cr¨®nicas de estos hechos, a trav¨¦s de las cuales vemos c¨®mo, en las idas y venidas de la joven historia parlamentaria de Espa?a, el restablecimiento de un r¨¦gimen liberal a partir de 1820 no fue acogido con agrado por las potencias conservadoras de Europa, consider¨¢ndolo peligroso para la estabilidad del continente. Estas potencias, agrupadas en la Santa Alianza, deciden intervenir en Espa?a y conf¨ªan la ejecuci¨®n del acuerdo a Francia.

El env¨ªo de las tropas francesas, conocidas como los Cien Mil Hijos de San Luis, favorec¨ªa los intereses de Fernando VII, obligado por las circunstancias, y contra su voluntad, a cumplir los preceptos de la constituci¨®n gaditana. Ante el avance de las tropas francesas, la familia real, las Cortes y el Gobierno se ven forzados a trasladarse hacia el sur, a la ciudad de Sevilla. Las Cortes hab¨ªan decidido continuar su labor en nuestra ciudad y escogieron para celebrar sus sesiones la antigua iglesia del colegio jesuita de San Hermenegildo.

El profesor S¨¢nchez Mantero se?ala que debi¨® ser la propia estructura del templo lo que lo llev¨® a convertirse en sede de las Cortes, por su similitud con el Oratorio de San Felipe Neri que en 1812 hab¨ªa acogido las reuniones de las primeras Cortes de C¨¢diz. A partir de abril de 1823, y hasta junio de ese mismo a?o, la ciudad y San Hermenegildo se convertir¨ªan as¨ª en la sede de las m¨¢s altas instancias de la naci¨®n.

El conjunto del colegio jesuita de San Hermenegildo, del que hoy s¨®lo se conserva su iglesia, se construy¨® entre 1616 y 1620. El edificio fue proyectado por el arquitecto Juan Bautista de Villalpando y revisado por el jesuita Pedro S¨¢nchez. Inspirada en la Sala Capitular de la Catedral de Sevilla es la ¨²nica iglesia de planta el¨ªptica de la ciudad y una de las primeras realizadas en Espa?a con esta forma geom¨¦trica. Para la historia del arte este edificio es adem¨¢s especialmente significativo por las yeser¨ªas del interior, de Francisco Herrera el Viejo, y por el dise?o de la portada, del c¨¦lebre arquitecto Alonso de Vandelvira.

Tras la expulsi¨®n de Espa?a de los jesuitas, en 1767, el edificio tuvo diferentes usos. Primero alberg¨® a la instituci¨®n de los Ni?os Toribios, una especie de correccional para menores conflictivos. En 1802 pas¨® a ser cuartel de Artiller¨ªa. Durante la ocupaci¨®n napole¨®nica de Sevilla (1810-1812) el edificio fue objeto de repetidos saqueos en los que el patrimonio de la iglesia fue expoliado.

El edificio tuvo que ser acondicionado para poder acoger all¨ª a las Cortes, que estuvieron reunidas desde el 23 de abril hasta el 11 de junio de 1823. En recuerdo, el Ayuntamiento rotul¨® en 1879 con el nombre de "calle de las Cortes" la que va desde Jes¨²s del Gran Poder a las plazas de la Concordia y de la Gavidia.

Mientras tanto, los Cien Mil Hijos de San Luis continuaban su avance hacia el sur y las Cortes decidieron, en un segundo paso, su traslado a C¨¢diz. Los diputados partieron precipitadamente de Sevilla el d¨ªa 12, y con ellos los ¨²ltimos destacamentos de milicianos y soldados. Tras su marcha se produjeron en la ciudad actos vand¨¢licos y des¨®rdenes propiciados por los absolutistas, y el lugar que sirvi¨® de sede a estas Cortes se vio afectado por saqueos e incendios.

El Parlamento de Andaluc¨ªa recuper¨® este espacio para la vida parlamentaria tras la promulgaci¨®n de nuestra actual Constituci¨®n, celebr¨¢ndose la primera sesi¨®n en la sala de San Hermenegildo el d¨ªa 3 de diciembre de 1985. All¨ª concluy¨® la primera legislatura de nuestra comunidad aut¨®noma, y se desarrollaron por completo la segunda y parte de la tercera hasta su sesi¨®n plenaria n¨²mero 38, celebrada el d¨ªa 27 de febrero de 1992.

Gracias a esta elecci¨®n, esta venerable sala, que hab¨ªa sido mudo testigo de la agon¨ªa del Trienio Liberal, acogi¨® de nuevo intensos debates parlamentarios, como los relativos a la Ley del Consejo Asesor de RTVE-A, la modificaci¨®n de la Ley de la Funci¨®n P¨²blica, la creaci¨®n de la C¨¢mara de Cuentas, la gratuidad de la ense?anza, la creaci¨®n de la RTVA, el inventario de espacios naturales protegidos o el debate sobre la Ley de Patrimonio Hist¨®rico.

De todas las sedes andaluzas, la antigua iglesia de San Hermenegildo de Sevilla es la m¨¢s ligada a la historia del parlamentarismo: larga historia, mucho que contar y mucho que celebrar en la ciudad de Sevilla en este bicentenario. Una celebraci¨®n que no debe restringirse al ¨¢mbito pol¨ªtico, acad¨¦mico o intelectual, sino que a mi entender pertenece, como festividad, a todos los ciudadanos.

Alfredo S¨¢nchez Monteseir¨ªn es alcalde de Sevilla.