A Malikian siempre le quedar¨¢ Madrid
Uno se hace a la idea de la hospitalidad y la espiritualidad que rodean la vida de Ara Malikian (1968. www.aramalikian.com) solo con pisar el descansillo de la escalera de su ¨¢tico, en el castizo barrio de Malasa?a, en Madrid. Un gato sonriente dibujado en el felpudo saluda con un "Hi baby", y un ojo turco vela junto al timbre por el m¨²sico liban¨¦s-armenio y sus visitas. Su casa es el lugar de reuni¨®n de muchos, y ¨¦l, encantado: "Mientras haya espacio, todo el mundo es bienvenido". No sabr¨ªa localizar su rinc¨®n de trabajo. "Toco por toda la casa para no aburrirme, y a la vez puedo leer el peri¨®dico". En cualquier esquina de una vivienda en dos alturas, soleada y con mezcla de estilos en su decoraci¨®n: budas de toda clase ("no soy budista", precisa), ideogramas chinos, esculturas africanas o naranjos en su terraza. Un ambiente ecl¨¦ctico como es su m¨²sica, fusi¨®n de lo cl¨¢sico con todo lo imaginable: tango, flamenco, jazz... Malikian, formado en Londres y Hannover, tiene cerrados pr¨®ximos conciertos en Siria y Budapest y una gira por Estados Unidos, Italia, China
..., pero siempre con vuelta a Madrid, la ciudad en la que se instal¨® hace una d¨¦cada. "Es como un pueblo, me encanta su luz, la vida en las calles. No pens¨¦ quedarme mucho tiempo, ni ahora me imagino mud¨¢ndome".
Los pr¨®ximos dos meses est¨¢ retenido en Madrid. Entre semana y los s¨¢bados act¨²a en el teatro Calder¨®n con Paganini: cuatro m¨²sicos fusionan repertorio cl¨¢sico con otros estilos en un montaje c¨®mico de Illana. "En los conservatorios te ense?an a controlar tu cuerpo. Tenemos miedo de mover el pie y acabamos tiesos. Trabajando con actores he aprendido que siempre ha de haber actuaci¨®n en el escenario", sostiene Malikian, que dedica los domingos a dos espect¨¢culos infantiles en el Lara. "No puedo prescindir de tocar para ni?os. A la salida algunos simulan tocar el viol¨ªn y eso nos emociona". Le gustar¨ªa que se dejase de ver la m¨²sica cl¨¢sica "como algo hecho para expertos". "La culpa la tenemos los int¨¦rpretes que creemos que tocar m¨²sica cl¨¢sica es diferente. Se puede tocar en un sal¨®n, en un caf¨¦, en un auditorio..., y es lo mismo". De remate, el pr¨®ximo martes presenta en el Coliseum su ¨¢lbum Con los cerrados en t¨¢ndem con el guitarrista argentino Fernando Egozcue. "Hace cuatro a?os montamos un quinteto y grabamos un disco, Lejos. Este segundo -junto a Mois¨¦s S¨¢nchez, Miguel Rodrig¨¢?ez y Mart¨ªn Bruhn- es m¨¢s tierno y so?ador, menos ca?ero. Desprende tranquilidad". La calma en la que vive desaparece en cuanto sube a un escenario y mueve el pie.
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