Las mariscadoras volver¨¢n a trabajar despu¨¦s de los 65

Las mariscadoras retiradas que no hayan cotizado un m¨ªnimo de 15 a?os tendr¨¢n que volver a la playa si quieren cobrar una pensi¨®n contributiva. En el Parlamento, donde la diputada socialista Marisol Soneira le pregunt¨® sobre la supresi¨®n de las ayudas complementarias a las mariscadoras de m¨¢s de 65 a?os, la conselleira Rosa Quintana no mencion¨® esta alternativa que estudia su departamento, aunque dej¨® claro que no habr¨¢ marcha atr¨¢s en el recorte de los 557 euros anunciados el pasado enero. "No podemos seguir pagando un suplemento extraordinario", sentenci¨®. Pero a la salida del hemiciclo, un grupo de mariscadoras llegadas al H¨®rreo para asistir al pleno abord¨® a Quintana y esta les confirm¨® que revisar¨ªa caso por caso los expedientes de las solicitantes.

"Es una aberraci¨®n que no vamos a aceptar", asegura Xabier Aboi, de CIG

La idea rescata una excepci¨®n a la norma que imped¨ªa a las mariscadoras prorrogar su permiso para trabajar una vez cumplidos los 65 a?os. La Conseller¨ªa do Mar alude a la disposici¨®n transitoria quinta del Decreto 425/1993 , por la que se permite revalidar la autorizaci¨®n para mariscar m¨¢s all¨¢ de esa edad si la interesada no ha cotizado lo suficiente como para cobrar una pensi¨®n. Es el caso de las 180 mujeres retiradas que, seg¨²n c¨¢lculos de la propia Quintana, contaban con percibir unas ayudas instauradas en 2007 por el bipartito para resarcir a estas trabajadoras, que no estuvieron obligadas a pagar la Seguridad Social hasta el a?o 2000. Esta soluci¨®n, defendida por algunas cofrad¨ªas de pescadores como la de Pontevedra, que, tras conocerse el recorte de las ayudas, pidi¨® por carta a la conselleira la pr¨®rroga del permiso despu¨¦s de los 65, la rechaza, sin embargo, el portavoz de CIG-Mar, Xabier Aboi, que la semana pasada se reun¨ªa con Quintana para pedir una rectificaci¨®n. "Es una aberraci¨®n que no vamos a aceptar", advierte.

Hasta ayer, los representantes del sector consideraban "positiva" la actitud de la conselleira durante las reuniones que ven¨ªan celebrando desde que se public¨® en enero la nueva orden de ayudas, que suprime la prestaci¨®n complementaria y conserva una cantidad tope de 350 euros destinada ¨ªntegramente al paso del recibo de la Seguridad Social. La presidenta de la Asociaci¨®n de Mariscadores e Mariscadoras, Natalia La¨ª?o, lamentaba poco despu¨¦s de la intervenci¨®n de Quintana en el Parlamento la "vuelta al punto de inicio" en la negociaci¨®n con Mar, al mismo tiempo que anunciaba la intenci¨®n de Agamar de seguir manifest¨¢ndose contra el recorte. "Se contradice todo el tiempo", argumenta, "porque es falso que Agamar estuviera en su d¨ªa en contra de la profesionalizaci¨®n". La¨ª?o se refiere a las acusaciones de Quintana en sede parlamentaria acerca del asesoramiento que recibieron las trabajadoras cuando todav¨ªa no era obligatorio pagar a la Seguridad Social. "Algunas asociaciones y sindicatos animaban a las mariscadoras a no cobrar. Se hizo necesario pagar con dinero p¨²blico el mal asesoramiento de aquella ¨¦poca", argument¨®. Solo a partir de 1992 las mariscadoras tuvieron opci¨®n de cotizar y la obligatoriedad se retras¨® hasta 2000, aunque muchas cofrad¨ªas exig¨ªan por cuenta propia desde unos a?os antes la afiliaci¨®n a la Seguridad Social para trabajar.

A las explicaciones de Quintana contest¨® la oposici¨®n recordando la "discriminaci¨®n" sufrida por las mariscadoras, especialmente las de m¨¢s edad, que empezaron a trabajar de ni?as en una actividad que entonces no ten¨ªa reconocimiento profesional alguno. De "obsceno, perverso e intolerable", calific¨® el nacionalista Bieito Lobeira el recorte en las ayudas, con el que la conseller¨ªa se ahorra este a?o 837.000 euros con respecto al ejercicio anterior. "Ahora parece que las mariscadoras a pie son unas privilegiadas por poseer unas ayudas econ¨®micas cuando no tienen otro ingreso", razon¨® Lobeira. "Es un agravio comparativo con otros trabajadores", contest¨® Quintana, para quien el recorte supuso, en sus palabras, "una decisi¨®n dolorosa". "Es mejor invertir este dinero en el fomento del empleo y en mejorar las zonas de producci¨®n", se?al¨®.