Clinton: "Ha llegado la hora de que Gadafi se vaya"

La comunidad internacional meti¨® ayer toda la presi¨®n no militar posible sobre Muamar el Gadafi al exigirle que deje el poder sin verter m¨¢s sangre, advertirle de que responder¨¢ de sus acciones y congelarle bienes y activos. El objetivo era doble: estrechar al m¨¢ximo el cerco y hacer ver a sus leales que ser¨¢n tendidos por c¨®mplices para que as¨ª den un golpe de mano. El frente de presiones present¨® dos l¨ªneas de ataque: en Ginebra, en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, y en Bruselas. Las sugerencias de algunos pa¨ªses occidentales de prohibir el sobrevuelo del espacio a¨¦reo libio, con el consiguiente despliegue militar, estaba pendiente de la iniciativa que pudiera adoptar Washington. Rusia, cuyo concurso es necesario para una resoluci¨®n del Consejo de Seguridad, apunt¨® en Ginebra que nadie le hab¨ªa planteado la cuesti¨®n.

Seg¨²n Italia, pese al cerco internacional Gadafi podr¨ªa resistir semanas

La reuni¨®n de ministros de Exteriores llegados de todo el mundo para asistir a la sesi¨®n del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra se convirti¨® en un intenso vaiv¨¦n de reuniones, declaraciones y discursos entre los que Hillary Clinton marc¨® el tono: "Ha llegado la hora de que Gadafi se vaya, ahora, sin m¨¢s violencia o dilaci¨®n".

"Hemos visto a las fuerzas de seguridad del coronel abrir fuego sobre pac¨ªficos manifestantes. Han empleado armamento pesado contra civiles. Se ha lanzado a mercenarios y matones contra los manifestantes", enumer¨® la secretaria de Estado en su discurso, antes de proseguir con la ejecuci¨®n de soldados por no disparar contra la poblaci¨®n, los asesinatos indiscriminados y las detenciones y torturas masivas. "Gadafi y quienes le apoyan deber¨¢n responder de estos actos", sentenci¨®

La comunidad internacional quiere acelerar la ca¨ªda del r¨¦gimen y para ello ha presentado un frente unido con pocos precedentes para aprobar medidas de acoso y derribo, aunque el ministro italiano de Exteriores, Franco Frattini, aventura que aun as¨ª Gadafi podr¨ªa resistir semanas.

El paquete de sanciones adoptado el s¨¢bado por el Consejo de Seguridad (embargo de armas, prohibici¨®n de salir del pa¨ªs a Gadafi y su entorno y congelaci¨®n de activos a la familia, adem¨¢s de pedir al Tribunal Penal Internacional que tome cartas en el asunto por cr¨ªmenes contra la humanidad) fue asumido ayer por la Uni¨®n Europea con aportaciones propias: a las armas se suma el material antidisturbios; las 16 personas a las que se negar¨¢ visado en todo el mundo ser¨¢n 26 en lo relativo a la Uni¨®n, y la congelaci¨®n de activos correspondientes a Gadafi y cinco de sus familiares se aplicar¨¢ a ellos y otros 20 m¨¢s en Europa.

El deseo de ejercer m¨¢s presi¨®n ante un hombre que ha perdido la noci¨®n de su verdadera situaci¨®n -seg¨²n el ex primer ministro brit¨¢nico Tony Blair, que habl¨® con ¨¦l durante el fin de semana- llev¨® a los europeos a plantearse nuevas medidas. Una de ellas, propuesta por Alemania a Estados Unidos y secundada por otros Gobiernos de la Uni¨®n, es suspender todos los pagos a Libia durante 60 d¨ªas.

Se barajaba tambi¨¦n ayer en Ginebra la pertinencia de que la comunidad internacional cierre el espacio a¨¦reo libio, del que, seg¨²n algunas informaciones no contrastadas, se est¨¢n beneficiando pilotos mercenarios ucranios para operaciones de bombardeo sobre objetivos civiles.

"Es algo que estamos discutiendo. No hay decisi¨®n todav¨ªa", revel¨® Catherine Ashton, la coordinadora de la pol¨ªtica exterior de la Uni¨®n, tras entrevistarse con Clinton. "Es un asunto bastante complicado". A William Hague, jefe de la diplomacia brit¨¢nica, la idea le parece buena, si bien establece condiciones: "Hemos de tener claros los objetivos, tener la certeza de que se van a salvar vidas, contar con los medios necesarios para llevarla a la pr¨¢ctica y contar con el mayor apoyo internacional posible". Italia y Australia respaldan la iniciativa.

El clima de entendimiento internacional ante la crisis libia deber¨ªa suponer una nueva resoluci¨®n del Consejo de Seguridad, donde Rusia y China, con poder de veto, repudian injerencias de ese tipo. Interrogado Sergu¨¦i Lavrov, el ministro de Exteriores ruso, sobre si hab¨ªa tratado el asunto con Clinton, respondi¨®: "En absoluto. Nadie lo ha planteado".

Para Mosc¨² y Pek¨ªn, la vertiente militar abre la v¨ªa a soluciones indeseables. Vlad¨ªmir Putin, el primer ministro ruso, se manifest¨® la semana pasada en Bruselas contrario a salidas de ese tenor y reclam¨® el m¨¢ximo tacto a la comunidad internacional.