El triunfo del bloque
El Madrid clasificado para cuartos de la 'Champions' destaca por el trabajo defensivo que Mourinho inculca a los jugadores - El ideario del t¨¦cnico se fundamenta en evitar riesgos
"Bloque", es una de las palabras m¨¢s repetidas por Jos¨¦ Mourinho cuando se dirige a sus futbolistas. Los "bloques" ocupan la mente del entrenador casi tanto como los ¨¢rbitros, los comit¨¦s, los capitalistas que ostentan la propiedad de los derechos audiovisuales, los organismos reguladores del f¨²tbol y las estructuras institucionales. A diferencia de las dem¨¢s ideas que pueblan su mente, los bloques son una abstracci¨®n asociada al juego que no le sirve en su cruzada por inducir pol¨¦micas artificiales. Son una f¨®rmula que Mourinho ha introducido en este Madrid en un intento por automatizarlo. Frente al Lyon, el equipo logr¨® clasificarse para los cuartos de final de la Liga de Campeones por primera vez en seis a?os. Lo hizo presionando a su adversario en bloque, seg¨²n manda el t¨¦cnico. Y, por primera vez en meses, sin que Mourinho denunciase una conspiraci¨®n.
"Cuanto m¨¢s circule el bal¨®n en el centro del campo, m¨¢s opciones de rob¨¢rnoslo"
C¨¦sar Delgado, el atacante del Lyon, lo dijo al salir del Bernab¨¦u: "Lo ¨²nico que ha cambiado en el Madrid es que ahora sabe presionar". Mourinho comenz¨® a impartir sus lecciones de presi¨®n en Estados Unidos, en la pretemporada, y desde entonces repite conceptos peri¨®dicamente como en cursillos acelerados en los que emplea un lenguaje propio de un auditor de Pricewaterhouse. Seg¨²n cuentan fuentes del vestuario, el t¨¦cnico centra su trabajo en este aspecto y machaca su cat¨¢logo en las concentraciones, en las que organiza hasta cinco charlas t¨¢cticas colectivas. Para Mourinho, un bloque es la unidad de presi¨®n. Est¨¢ compuesta por los diez jugadores de campo. Su objetivo es defender coordinadamente. Seg¨²n se sit¨²en en el propio campo, en el medio del campo o en campo contrario, los bloques son bajos, medios o altos. De la posici¨®n deriva todo. Incluso el ataque. Pero un futbolista aclara: "El bloque alto es lo que hace el Barcelona el 90% de los partidos, pero nosotros solo lo empleamos cuando estamos con la soga al cuello y necesitamos marcar un gol".
"Contra el Lyon hicimos el bloque medio de entrada y despu¨¦s hicimos un bloque bajo, como casi siempre", observa un jugador. La acumulaci¨®n de hombres por detr¨¢s de la l¨ªnea del bal¨®n acab¨® por desmantelar cada uno de los intentos del Lyon por contragolpear. Casillas solo tuvo que desviar tres pelotas que iban dentro. Defensivamente, el Madrid respondi¨® exactamente como esperaba Mourinho: sin conceder situaciones de uno contra uno, sin sufrir una sorpresa. Seg¨²n testigos que le observan desde el banquillo, el t¨¦cnico portugu¨¦s somatiza los ataques del rival hasta el extremo de reflejar en su rostro gestos propios de alguien aterrorizado. Dicen que un tiro a bocajarro sobre su propia porter¨ªa le puede destrozar los nervios. No por una convicci¨®n ideol¨®gica sino por un rasgo de su car¨¢cter. Su modo de trabajo deriva de esta predisposici¨®n an¨ªmica. La palabra que mejor expresa su preocupaci¨®n por la seguridad es "bloque". Tambi¨¦n insiste a los jugadores en cuidar "las espaldas". As¨ª, el Madrid ha terminado por convertirse en un equipo cuyo rasgo distintivo es el empe?o con el que se defiende. Cuando tiene el bal¨®n, cada jugador hace lo que mejor le parece. Con una condici¨®n: acabar la jugada lo antes posible.
Seg¨²n un jugador, Mourinho quiere batir el r¨¦cord de tiros a puerta en esta Liga. No le interesan las posesiones largas. Quiere acabar las jugadas cuanto antes. Para que los futbolistas no tengan dudas, les repite: "Cuanto m¨¢s circule el bal¨®n en el centro del campo, m¨¢s posibilidades tiene el rival de rob¨¢rnoslo".
A Mourinho le preocupan tanto los ataques enemigos que les ense?a a sus jugadores a estar pendientes de lo que har¨¢n cuando no tengan la pelota. Desde el verano re¨²ne a los centrocampistas y los adoctrina en la cautela. "Nos dice que si vamos a subir al ataque, antes tenemos que estar convencidos de tener suficiente energ¨ªa para regresar r¨¢pido. Independientemente del producto que vamos a conseguir", aseguran los pupilos. Mourinho acompa?a sus admoniciones con advertencias que pronuncia de memoria, como si las hubiera dicho mil veces: "Yo voy a comprobar en el campo si cada vez que han subido han tenido en cuenta la energ¨ªa que les queda". El que sube y no baja sabe que se expone. Desde su posici¨®n en la banda suele agitarse indefectiblemente cuando un futbolista se olvida, o se cansa, y no recupera su puesto en el bloque.
Un entrenador de Primera explic¨® ayer, sin querer dar su nombre para evitar pol¨¦micas, que el discurso de Mourinho no es nuevo: "La terminolog¨ªa relativa a los bloques procede del profesor V¨ªctor Frade, un experto en Ciencias del Deporte de la Universidad de Oporto".
Frente al Lyon, el Madrid se distingui¨® por la calidad de sus jugadores y por la laboriosidad con que se defendieron. Este ¨²ltimo rasgo, representado por los bloques, es el sello m¨¢s reconocible del modelo de Mourinho.
Un sorteo puro
- El sorteo de los cuartos de final de la Liga de Campeones se celebrar¨¢ hoy, a partir de las 12.00, en Nyon (Suiza).
- Equipos: En el bombo estar¨¢n dos conjuntos espa?oles, Real Madrid y Barcelona, uno italiano, el Inter, uno alem¨¢n, el Schalke 04, tres ingleses, Chelsea, Manchester United y Tottenham, y uno ucranio, el Shakhtar Donetsk.
- Funcionamiento: Ser¨¢ un sorteo puro, sin cabezas de serie ni l¨ªmites por la nacionalidad de los equipos, de tal forma que Barcelona y Madrid podr¨ªan enfrentarse en cuartos. El resultado del sorteo marcar¨¢ el camino de los conjuntos hacia la final, puesto que tambi¨¦n se decidir¨¢ el cuadro de semifinales. El orden de los partidos de ida y vuelta tambi¨¦n ser¨¢ aleatorio.
- Fechas: Los encuentros de ida se disputar¨¢n los d¨ªas 5 y 6 de abril y los de vuelta el 12 y 13 del mismo mes. La final ser¨¢ en el estadio de Wembley, en Londres, el 28 de mayo.
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