"La m¨²sica brinda cohesi¨®n social"

Ismael Fern¨¢ndez de la Cuesta tiene la mirada de un joven entusiasta. Tal parece como si le recorriera por dentro una energ¨ªa especial y no es dif¨ªcil averiguar que ese fluir vivificante es la m¨²sica. A ella ha dedicado la mayor parte de su vida, surgida en 1939 en un pueblo de Burgos, Neila, donde naci¨® en el seno de una familia ganadera. ?nico var¨®n entre cuatro hermanas, su estro musical le llev¨® a la composici¨®n, la interpretaci¨®n y la direcci¨®n, se?aladamente la del coro del monasterio benedictino de Santo Domingo de Silos. Desde all¨ª, a partir de 1964, promovi¨® la grabaci¨®n discogr¨¢fica del canto gregoriano, ese g¨¦nero religioso que llena de lirismo las abad¨ªas y catedrales de la vieja Europa.

"La m¨²sica iguala a seres de muy diferentes culturas y procedencias"

"Una estrella del rock entrar¨¢ en la Academia cuando su obra sea arte"

"El n¨²mero de conservatorios de Madrid es muy reducido"

Como acad¨¦mico, vela por la segunda mejor colecci¨®n de pinturas de Goya

Fue en 1994 cuando, de manera inesperada, un disco compacto de sus monjes comenz¨® a batir todos los registros de ventas. El ¨¦xito fue tanto que lleg¨® a ser uno de los discos m¨¢s vendidos de todos los tiempos. Ismael Fern¨¢ndez de la Cuesta es noticia por haber sido elegido recientemente vicedirector y tesorero de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, la instituci¨®n acad¨¦mica m¨¢s veterana de Espa?a, con sede en el palacio madrile?o de Goyeneche, enclavado en la calle de Alcal¨¢, apenas a un suspiro de la Puerta del Sol.

Sus funciones consisten en sustituir al director de la Academia en su ausencia y guardar los tesoros que la instituci¨®n mixta alberga, que son tantos como para convertirlo en uno de los museos m¨¢s importantes de Espa?a tras el del Prado. Una cincuentena de acad¨¦micos en activo velan por el estado de salud de las bellas artes en toda Espa?a. ?Cu¨¢l es la hegem¨®nica en la Academia?: "Ninguna; en su origen, fue quiz¨¢s la escultura, por la impronta de Olivieri, pero hoy tenemos un abanico de extraordinarios representantes de la Arquitectura, como Rafael Moneo, Antonio Fern¨¢ndez Alba o Santiago Calatrava; del Cine, como el llorado Berlanga, o Jos¨¦ Luis Borau; pintores como Rafael Canogar, Manuel Alcorlo... ?Y qu¨¦ hay de la m¨²sica? "Acad¨¦micos son figuras de estatura mundial como Luis de Pablo, Crist¨®bal Halffter, Ant¨®n Garc¨ªa Abril o Tom¨¢s Marco". ?Para cu¨¢ndo una estrella del rock en la Academia? "En cualquier momento, siempre y cuando el rock sea arte. Hay dimensiones en el rock que no son art¨ªsticas".

La Academia posee la m¨¢s extensa y mejor colecci¨®n de pinturas de Goya que hay en Espa?a tras la que atesora el Prado; adem¨¢s, cuenta con un gabinete de Calcograf¨ªa que figura entre los mejores de Europa; tramita informes que le son solicitados por numerosas instituciones nacionales y extranjeras y conversa con otras academias internacionales. Sin embargo, en a?os pasados, la presencia de la Real Academia de San Fernando ha reducido su proyecci¨®n como representante de la sociedad civil y parece desbordada ante los desmanes que, invocando el urbanismo o el transporte por carretera, se han cometido contra el patrimonio en numerosas ciudades, Madrid incluida.

?Por qu¨¦ raz¨®n la beligerancia de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en las lides patrimoniales ha remitido tanto? "Es cierto que se observ¨® una pasividad creciente pero la explicaci¨®n se encuentra en que el surgimiento de instituciones como el Ministerio de Cultura rest¨® en su d¨ªa competencias y protagonismo a la Academia; muchas funciones que le estuvieron asignadas han sido asumidas por los Gobiernos regionales y, en el mundo de la cultura, por su propia naturaleza, proliferan los reinos de taifas". Fern¨¢ndez de la Cuesta resalta que, por otra parte, crecen las demandas de dict¨¢menes. "Decenas de instituciones acuden a la Academia in extremis, cuando ya han agotado los procedimientos legales para impedir un desastre. Al mismo tiempo, subraya: "Los recursos con los que la Academia cuenta -algo menos de un mill¨®n y medio de euros anuales- han ido menguando y es muy cara esa supervisi¨®n que la sociedad nos demanda".

"Hay una asignatura pendiente en Madrid", dice con convicci¨®n. "La m¨²sica brinda un factor de cohesi¨®n social de una fuerza extraordinaria. Am¨¦rica Latina lo ha demostrado. "Valga un ejemplo", a?ade: "En Ecuador, en la localidad de Loja, del tama?o de Soria, existen hasta cinco orquestas sinf¨®nicas. Pero en Madrid, cada instituci¨®n va por libre. El Gobierno regional no ha comprendido a¨²n la necesidad estrat¨¦gica de integrar la m¨²sica en la docencia y situarla al nivel, al menos, que alcanza el deporte escolar. Ser¨ªa excelente que lo hiciera. La m¨²sica es un lenguaje de integraci¨®n, que equipara a seres de muy diferentes procedencias y culturas". El n¨²mero de conservatorios es reducido a¨²n y en las escuelas, la M¨²sica es apenas una asignatura de las llamadas mar¨ªas. Estamos perdiendo una maravillosa oportunidad de vinculaci¨®n social entre lugare?os e inmigrantes".