Est¨¦ril intercambio de golpe

En su retorno a Mallorca, Gregorio Manzano no se dej¨® ver por el banquillo hasta el pitido inicial. El t¨¦cnico andaluz, que por la v¨ªa judicial reclama dos millones de euros a la anterior directiva del club balear, recibi¨® algunos silbidos y tambi¨¦n pudo leer alguna pancarta de apoyo en la grada. En cualquier caso, Michael Laudrup ha logrado sustituirle en el imaginario de la afici¨®n local como art¨ªfice del milagro de cada a?o.

Ayer, la baja de Web¨® permiti¨® el debut como titular del japon¨¦s Aki Ienaga. Un jugador en la estela de los otros nipones que se han aventurado a probar suerte en Europa: r¨¢pido y escurridizo. Y tambi¨¦n bajito, lo que no le impidi¨® estrenarse como goleador con un contundente remate de cabeza. Se lo puso f¨¢cil la defensa sevillista, que mostr¨® sus carencias desde muy temprano. Tras una veloz conducci¨®n del uruguayo Castro, los zagueros se agolparon en el ¨¢rea peque?a, dejando libre al japon¨¦s en el segundo palo.

No daba m¨¢s que se?ales de alarma el Sevilla, desaparecido de medio campo en adelante, reducidos sus pivotes por la veteran¨ªa de Mart¨ª y el mordiente de De Guzm¨¢n. En medio de la p¨¢jara, C¨¢ceres traz¨® una asistencia en diagonal para la carrera de Negredo, que fue derribado por Ramis en el ¨¢rea. El propio delantero tom¨® la pelota y bati¨® a Aouate.

Pese al empate, el partido segu¨ªa pintando mal para el Sevilla, y Manzano se?al¨® como culpable a Romaric. El marfile?o, muy espeso en el centro del campo, se fue del campo rabiando, en el minuto 36. Con la entrada de Rodri, Manzano trat¨® de conectar a una delantera ausente que, salvo el penalti, no dispar¨® a puerta en toda la primera mitad. No hubo reacci¨®n y, mientras tanto, el juego vertical de los de Laudrup sigui¨® poniendo en evidencia a la defensa andaluza. Antes del descanso, un disparo lejano de De Guzm¨¢n volvi¨® a dejar al Sevilla a remolque.

El cambio t¨¢ctico de Manzano no cuaj¨® hasta la segunda mitad, cuando Rakitic comenz¨® a carburar como enlace. Avisaron Capel y Negredo y el Mallorca dio un paso atr¨¢s. El gol que equilibraba el marcador lleg¨® tras una falta de entendimiento entre Nunes y Aouate, que aprovech¨® Rakitic. Se ech¨® a temblar el equipo de Laudrup, aparentemente falto de fuelle f¨ªsico. Pero no dio para m¨¢s el Sevilla, al que le cost¨® un mundo entrar en el partido. Tras la derrota del Athletic, el equipo de Nervi¨®n desperdici¨® la oportunidad de poner m¨¢s tierra de por medio en la carrera por Europa.