Villepin avanza propuestas para las elecciones de 2012

El ex primer ministro y exministro de Asuntos Exteriores, Dominique de Villepin, enemigo ¨ªntimo de Nicolas Sarkozy (con el que comparti¨® puesto en el Gobierno de Jacques Chirac), ha dado un paso m¨¢s hacia las elecciones de 2012, en las que, en principio, le disputar¨¢ los electores a su viejo rival de la derecha francesa. Villepin, que en junio del a?o pasado form¨® un nuevo partido pol¨ªtico en torno a s¨ª mismo, Rep¨²blica Solidaria, present¨® ayer una suerte de programa de Gobierno con un ramillete de propuestas novedosas que despertaron cierta expectaci¨®n en Francia. Entre ellas se cuenta la de la creaci¨®n de una especie de renta universal de 850 euros para todo franc¨¦s mayor de 18 a?os sin recursos. Villepin, que se mueve en la ¨®rbita del neogaullismo social, ha bautizado esta renta como el "ingreso de ciudadan¨ªa", y la inscribe en un programa m¨¢s amplio denominado Revoluci¨®n de la dignidad.

Asegura que a¨²n no es el momento de anunciar si se presentar¨¢ o no

A cambio, todo ciudadano franc¨¦s debe inscribirse y votar, "aunque sea votar en blanco", y prestar a la comunidad un servicio social del que no se ha especificado la duraci¨®n mientras se es joven (entre los 18 y los 25 a?os). Villepin tambi¨¦n propone una reforma del mapa de las regiones francesas y una transformaci¨®n de la estructura del Gobierno, con 10 ministros con peso. En el plano internacional (Villepin fue ministro de Asuntos Exteriores con Jacques Chirac), prev¨¦ sacar a Francia del mando integrado de la OTAN y retirar los 4.000 soldados franceses que actualmente luchan en Afganist¨¢n.

Con todo, y aunque la presentaci¨®n de este programa as¨ª lo deja intuir, Villepin no quiso adelantar todav¨ªa si se presentar¨¢ o no como candidato a las elecciones. "Todav¨ªa no es el tiempo", explic¨® el ex primer ministro, "ahora es el momento de presentar las ideas, y adem¨¢s hacen falta unos meses para que se despeje el atasco en las carreteras". El embotellamiento al que se refiere el dirigente neogaullista es del espacio de centro franc¨¦s, actualmente superpoblado y confuso, repleto de l¨ªderes deseosos de ocupar la plaza mir¨¢ndose de reojo, comprobando c¨®mo cada d¨ªa que pasa son m¨¢s disput¨¢ndose lo mismo.

Por un lado, se encuentra Fran?ois Bayrou, presidente del MoDem, el hist¨®rico dirigente centrista que ha pasado toda la legislatura sin acercarse a Sarkozy, critic¨¢ndole desde fuera. Desde hace una semana, adem¨¢s, hay que contar con Jean-Louis Borloo, del Partido Radical, hasta el viernes pasado aliado de Sarkozy y ahora decidido a volar en solitario. A estos dos se suma un Villepin renovado. Tanto Villepin como Bayrou acusan a Borloo de abandonar el barco de Sarkozy cuando hace agua, de no constituir una verdadera alternativa, y le niegan la credibilidad de ser un aut¨¦ntico opositor al poder. Pero, con cr¨ªticas o sin cr¨ªticas, la densidad de l¨ªderes centristas es excesiva y deber¨¢ diluirse, a base de alianzas o renuncias, en los pr¨®ximos meses.

Otra de las causas que pueden explicar la prudencia de Villepin a la hora de anunciar su candidatura es su agenda judicial: el 2 de mayo se resuelve el recurso por el proceso Clearstream (un turbio episodio de denuncias falsas contra Sarkozy, cuando ¨¦ste era ministro del Interior), del que el ex primer ministro ya fue absuelto en enero del a?o pasado.