Dulce y agria

Sabra. As¨ª se dice en hebreo higo chumbo. Tambi¨¦n es una expresi¨®n que utilizan los nacidos en Israel para describir a aquellos en apariencia duros, pero de lo m¨¢s dulces en su interior. Y as¨ª es como se describe a s¨ª misma Natalie Portman: "Sabra". Nada de estrella ganadora del Oscar por su excelente trabajo en Cisne negro. Ni de ni?a prodigio que debut¨® con El profesional cuando solo ten¨ªa 12 a?os. Ni reina de los frikis tras su paso por La guerra de las galaxias ni la "aburrida ni?a buena" de la que hablaban sin cari?o sus compa?eros de colegio. Ni siquiera la m¨¢s sexi, seg¨²n las listas de Internet. Nada de eso. Cuando se acerca a los 30 a?os, a la espera de su primer hijo concebido con el bailar¨ªn Benjamin Millepied y con el Oscar y todos los premios de Hollywood en su poder, la Portman -nacida en Israel, aunque criada en EE UU- se ve como un higo chumbo, un fruto maduro y tenaz que pincha por fuera, mecanismo de defensa despu¨¦s de casi dos d¨¦cadas en esta industria, pero dulce por dentro, jugosa y llena del sabor que el p¨²blico ha disfrutado en Cisne negro.

"Siempre he buscado aquello que me ha llevado m¨¢s all¨¢ de lo que otros pensaban de m¨ª"

"Como artista, necesitas protegerte, volver a ti misma, ser t¨² misma"

"Si un trabajo me preocupa, no hago m¨¢s que pensar. Y eso me consume hasta dar lo mejor"

"Necesito una estimulaci¨®n constante. variedad. odio repetirme a m¨ª misma"

No hubo m¨¢s que verla cuando recogi¨® el Globo de Oro. Con la emoci¨®n dej¨® escapar desde su bien calculada imagen una risa nada posada, nada elegante, casi un ronquido, pero tan humana que daban ganas de abrazarla. Eso s¨ª, ?cuidado con los pinchos! Porque hasta que Portman sonr¨ªe y te deja probar su dulzura, lo primero que ves en esta diminuta actriz que ronda el 1,60 de altura es un discurso perfecto, compuesto y casi rob¨®tico, acompa?ado de una mirada fija y serena, segura pero a la vez huidiza, como la de un perro extraviado que no sabes si quiere morder o ser tu amigo para siempre. "Te acostumbras a verte desde fuera, a ver im¨¢genes tuyas, a ver tus pel¨ªculas, y es una disociaci¨®n peligrosa. Necesitas protegerte, pero tambi¨¦n, como artista, necesitas volver a ti misma, ser t¨² misma sin necesidad de complacer a los dem¨¢s", subraya con amabilidad.

El d¨ªa de la entrevista, la sonrisa est¨¢ m¨¢s cerca que el mordisco.

El encuentro tiene lugar lejos de todo. Lejos de su maternidad, lejos de su Oscar y lejos del mundo de los mortales. Perdidas en medio de la nada m¨¢s absoluta, en las planicies de Nuevo M¨¦xico, a una hora en coche de Santa Fe. La nada donde Portman estaba rodando Thor, el ¨²ltimo superh¨¦roe de la Marvel que llega a las pantallas y que se estrena el pr¨®ximo viernes en Espa?a. "Ni sab¨ªa qui¨¦n era hasta que me ofrecieron el papel. Pero si quiere que me invente que es mi superh¨¦roe preferido, lo hago...", a?ade con complicidad sobre los rigores de una publicidad imparable.

Nos encontramos guarecidas del fr¨ªo estepario en una caravana que sirve de camerino y en la que no falta nada. Hay hasta televisi¨®n; una paradoja para una actriz que asegura no tener ese aparato en su casa de Los ?ngeles, donde ahora vive. De repente, para romper el hielo, se arranca con un comentario buc¨®lico: "Es superbonito ah¨ª fuera, hay una naturaleza incre¨ªble para dar paseos interminables, montar a caballo, hacer snowboarding...". Desde luego que ella ve mucho m¨¢s en lo que a la mayor¨ªa de los mortales nos parece la nada acotada por unas monta?as nevadas. Quiz¨¢ sea una manera de demostrar su sensibilidad: ecologista, vegetariana desde que a los ocho a?os vio diseccionar un pollo, vegana desde que ley¨® a Jonathan Safran Foer y su Eating animals, aunque durante el embarazo parece haber diversificado algo su dieta.

Pero no ha sido el paisaje ni los poderes de Thor los que la han convencido para venir hasta aqu¨ª, sino la posibilidad de trabajar con Kenneth Branagh, el director de la cinta. Portman se entrega a los directores que admira. Dice que mientras que el trabajo del actor es ego¨ªsta y egoc¨¦ntrico, el director es quien comparte su visi¨®n con el p¨²blico a trav¨¦s de la lente. Ese es el credo de su carrera. "Ken es incre¨ªble. El verdadero motor de esta historia. ?No le parece fascinante que un director como ¨¦l est¨¦ detr¨¢s de una pel¨ªcula basada en un c¨®mic? Eso me hizo pensar que el filme ser¨ªa diferente, interesante. Y ha cumplido todas mis expectativas. Trabajar a su lado a diario es mi recompensa".

Son muchos los que se llevaron las manos a la cabeza al ver el nombre de Portman en este filme de palomitas, donde en principio se le ha perdido poco a una actriz de su talla. O en esas otras dos comedias, Sin compromiso y Caballeros, princesas y otras bestias, una rom¨¢ntica y otra de humor burdo. Todos ellos t¨ªtulos menores que llegan a la pantalla despu¨¦s de la solidez demostrada por esta actriz en su trabajo como primera bailarina en Cisne negro. Pero esta actriz siempre se ha caracterizado por tener su propio criterio y sus elecciones, acertadas o no. "Quiz¨¢ de peque?a me dejaba influir m¨¢s, sent¨ªa que ten¨ªa que responder a lo que otros esperaban de m¨ª. Pero, desde luego, no ahora".

Tampoco de peque?a. Luc Besson, uno de los primeros en darle una oportunidad en la gran pantalla, siempre recuerda su madurez a pesar de que solo ten¨ªa 12 a?os cuando hizo El profesional. Y el actor Timothy Hutton dice sin reparos que en Beautiful girls les rob¨®, con 15 a?os, la pel¨ªcula a todos. Esta admiraci¨®n tan temprana vino unida a elecciones asombrosas en un Hollywood dado al estereotipo. Si la industria quer¨ªa ver en Portman a su nueva Lolita, la actriz no quiso saber nada del proyecto de Adrian Lyne por "baboso". Tambi¨¦n le propusieron hacer Tormenta de hielo, pel¨ªcula que rechaz¨® por ser "demasiado t¨¦trica", y cuando le ofrecieron ser la Julieta del Romeo que reinvent¨® Baz Luhrmann para Leonardo Di Caprio, Portman se neg¨® porque el actor le llevaba siete a?os.

Portman pertenece a una amplia generaci¨®n de int¨¦rpretes que comenzaron a la vez y han llegado muy alto. "Todas comenzamos de ni?as. Si mira a Lindsay Lohan, Scarlett Johansson, Keira Knightley, Kirsten Dunst, Christina Ricci, Claire Danes o Reese Witherspoon, todas empezamos muy j¨®venes. Luego las hubo que crecieron m¨¢s y otras nos quedamos enanas", a?ade con humor, consciente de su estatura. Pero, como coment¨® en una ocasi¨®n el actor Eric Bana, "no te dejes enga?ar por su tama?o, porque es pura dinamita". Adem¨¢s, lo que realmente la diferencia del resto de su generaci¨®n es que Portman siempre ha ido por libre, nadando fuera de los estereotipos. Solo ella se libr¨® de ese sambenito que es la etiqueta de "la nueva Julia Roberts". "Siempre he buscado aquello que me ha llevado m¨¢s all¨¢ de lo que yo pensaba de m¨ª. Y de lo que otros pensaban de m¨ª", admite rebelde quien en apariencia era la m¨¢s d¨®cil de su generaci¨®n.

Quiz¨¢ por ello, y cuando nadie dudaba de su calidad y Portman rechazaba proyectos que parec¨ªan perfectos para alguien de su edad y val¨ªa, la actriz sorprendi¨® a la industria diciendo que s¨ª al trabajo m¨¢s criticado de su carrera. Tambi¨¦n el que m¨¢s seguidores (y m¨¢s dinero) le ha reportado. El de reina Amidala en la saga de La guerra de las galaxias. Eso s¨ª, tard¨® dos semanas en decir que s¨ª al papel m¨¢s buscado del momento. "Iban a ser 10 a?os de mi vida desde que firmaba hasta el estreno de la ¨²ltima. Fue una decisi¨®n que me dio miedo", recuerda con honestidad. Al volver a aquel momento, notas por primera vez en esta conversaci¨®n las p¨²as del cactus.

Sus amigos hablan de la friki que hay en Portman, y debe de ser cierto a juzgar por la soltura con la que se maneja en foros como la ComicCon de San Diego, la mayor concentraci¨®n de frikis por metro cuadrado, donde la actriz es reverenciada por su trabajo no solo en la saga de George Lucas, sino con los hermanos Wachowski en V de vendetta y ahora en Thor. Adem¨¢s, La guerra de las galaxias le vali¨® el Premio Razzie (pedorreta) a la peor pareja del a?o en cine. "Hay momentos en la vida de todos que son m¨¢s locos que otros", ataja sin resentimiento. "La ¨²nica raz¨®n por la que nunca he tirado la toalla es mi familia y mis amigos. Son mis cimientos, que me permiten superar todos mis miedos", explica con frases que suenan a mil veces o¨ªdas.

Tras verla en 'Cisne negro' se hace dif¨ªcil pensar o incluso creer que Portman tenga miedo a algo, que ponga en duda su talento. Quienes han trabajado con ella tampoco lo creen. Mike Nichols, el director que la hizo mujer con Closer y le dio su primera candidatura al Oscar, la compar¨® con Meryl Streep porque, como ella, sabe desaparecer en cualquier personaje que interpreta. Cuando se rap¨® el pelo para V de vendetta se asemej¨® a Jean Seberg en Al final de la escapada, y su comparaci¨®n a Audrey Hepburn es ya un lugar com¨²n. "Yo la veo m¨¢s con la clase de una Grace Kelly", aclar¨® Scarlett Johansson tras trabajar a su lado en Las hermanas Bolena. "Es la mujer que quieres que pilote tu avi¨®n", asegura el realizador Jim Sheridan alabando un trabajo "que parece t¨¦cnico, pero es pura emoci¨®n". De nuevo las dos caras de Portman. Claro que cuando le hablas de sus dualidades, la actriz dice con un ligero encogerse de hombros y una sonrisa aquello de "?qu¨¦ puedes esperar de una g¨¦minis!".

Portman parece conocerse bien. Se gradu¨® en psicolog¨ªa y se tiene bien estudiada. "El mejor sujeto que uno puede estudiar es uno mismo, ?no? Y est¨¢ claro que mis estudios en psicolog¨ªa influyen y mucho en la forma en la que observo el mundo que me rodea. Empezando por una misma. Algo muy ¨²til para una actriz, porque parte de nuestro trabajo es escuchar y observar".

Portman sabe que es t¨ªmida. Tambi¨¦n que es curiosa. "Tengo miedo de todo, pero eso suele ser se?al de que tengo que hacerlo. Porque si hago algo que no me da miedo, me acabo aburriendo y hago un mal trabajo. Mientras que si el trabajo me preocupa, lo ¨²nico que hago es pensar en ¨¦l y eso me consume hasta que consigo dar lo mejor de m¨ª". Tras semejante confesi¨®n, es f¨¢cil deducir por qu¨¦ ha bordado su papel en Cisne negro.

En las siguientes semanas despu¨¦s de nuestro encuentro en Santa Fe fue dif¨ªcil no coincidir con Natalie Portman. Las citas de prensa en Los ?ngeles con motivo de lo que se llama la carrera al Oscar fueron m¨²ltiples y obligadas. Hab¨ªa que dar a conocer su ¨²ltimo trabajo, la mejor inversi¨®n de su carrera, y adem¨¢s en algo que siempre le gust¨®. Porque de no haber sido actriz, Portman hubiera deseado ser bailarina. De ni?a aprendi¨® algo de ballet, y si se le pregunta por sus pel¨ªculas preferidas, no lo duda: Dirty dancing. "La puedo haber visto 400 veces. Lo mismo que Mary Poppins y Chitty Chitty Bang Bang". Por eso cuando, hace unos diez a?os, Aronofsky le sugiri¨® embarcarse en una pel¨ªcula centrada en el mundo de la danza, su respuesta fue un s¨ª inmediato. Aunque Cisne negro no tiene nada que ver con los musicales que le gustaban de peque?a y, desde luego, no fue nada sencillo sacarla adelante. La financiaci¨®n no se complet¨® hasta la segunda semana de rodaje, y a Portman le gusta compararse con una monja de clausura durante los casi doce meses que dedic¨® a preparar el personaje, "para darle a Nina el cuerpo que se merec¨ªa". "Darren [el director] muestra a trav¨¦s del ballet un mundo que bien puede ser el que vivimos las mujeres, donde son los hombres quienes dirigen, los que llevan las riendas de la estructura social y cultural y donde a nosotras nos queda la obligaci¨®n de mantenernos delgadas, con cuerpos casi de ni?a", resume de su visi¨®n de un filme independiente que ha gozado de un ¨¦xito inusitado gracias a sus m¨²ltiples lecturas. Porque, como dec¨ªa con humor la revista Entertainment Weekly, Cisne negro ha conseguido llevar a los chicos a ver una pel¨ªcula de ballet y a las chicas a ver una de suspense. Por supuesto, tambi¨¦n ha ayudado al taquillazo la ya famosa escena l¨¦sbica que Portman y Mila Kunis -Lily- protagonizan.

Y la pol¨¦mica tambi¨¦n ha puesto su grano de arena en la promoci¨®n. La bailarina Sarah Lane, que la dobl¨® en las coreograf¨ªas m¨¢s complejas, quiso empa?ar la victoria de Portman asegurando que la actriz solo interpret¨® un 5% de las escenas de cuerpo entero; que el resto eran de ella. El director sali¨® en defensa de la actriz con un comunicado: "Hay 139 planos de baile, de los que 111, el 80%, los protagoniza Natalie sin retoque, y 28, su doble".

Portman se sabe re¨ªr de todo, como cuando explica lo que significa ser una actriz jud¨ªa en Hollywood: "Recibes al d¨ªa 400 guiones sobre el Holocausto". Adem¨¢s, el humor no es, en su caso, la excusa c¨ªnica donde esconder la mala conciencia. Portman es una de las personas del engranaje Hollywood m¨¢s comprometidas con causas sociales. Eso s¨ª, sin aspavientos. Est¨¢ involucrada desde hace a?os en asociaciones como la Fundaci¨®n Internacional de Asistencia Comunitaria (FINCA), dirigida por la reina Rania de Jordania y encargada de facilitar peque?os pr¨¦stamos entre mujeres empresarias en pa¨ªses en desarrollo para que sirvan de germen para una mejora en la econom¨ªa local, un programa que se est¨¢ aplicando en Uganda, Guatemala y Ecuador. "Una de las mejores cosas de ser actriz", explica, "es que hacemos uno o dos filmes al a?o, trabajas tres meses y luego tienes todo el tiempo y todo el dinero para hacer otras cosas, para aprender m¨¢s cosas sobre el mundo en que vivimos".

Durante la pasada campa?a electoral, Portman no solo apoy¨® al actual presidente en las urnas, tambi¨¦n particip¨® en su campa?a como uno m¨¢s de los seguidores de Obama que llamaron por tel¨¦fono pidiendo el voto. "Ahora, la verdad, no me gustar¨ªa estar en la piel del presidente". Tambi¨¦n se mueve en defensa de los animales, un activismo que le lleva a vestir prendas sin piel y a boicotear en la alfombra roja a aquellas firmas que, en su opini¨®n, "torturan a los animales". "No quiero juzgar a nadie, pero tambi¨¦n quiero recordar d¨ªa a d¨ªa el valor de la vida que nos rodea, y eso no puedo call¨¢rmelo". ?Y c¨®mo compaginar la militancia con la alfombra roja? "Apreciando y disfrutando lo que se tiene, pero siendo consciente de lo que pasa en el mundo".

Los pinchos del cactus llamado Portman solo se afilan al m¨¢ximo si tratas de acercarte a su vida personal. Nunca ha soltado prenda, da igual que fuera Lukas Hass o Gael Garc¨ªa Bernal, Moby, Jake Gyllenhaal o Zach Braff, hombres que han sido parte de su vida en la realidad o en los rumores de la prensa rosa. Ahora las cosas han cambiado. Sigue sin hablar de su intimidad, pero no puede ocultar la sonrisa de felicidad ni la tripa de embarazada. Los antojos est¨¢n ah¨ª: "Cosas agrias o cualquier cosa con lim¨®n, vinagre o ketchup". Y sin querer hablar de Millepied, a quien conoci¨® durante el rodaje de Cisne negro, se le escapan momentos personales como la dedicatoria que hizo durante la entrega de los Globos de Oro: "Gracias, Benjamin, core¨®grafo y a quien le preguntan en la cinta: '?T¨² te acostar¨ªas con esta chica?'. Y responde que no. ?Es el mejor actor, porque est¨¢ claro que quer¨ªa acostarse conmigo!", declar¨® la m¨¢s reservada de las actrices delante de todo el mundo.

El futuro profesional parece no preocuparle mucho. "Lo m¨¢s maravilloso de estar embarazada es que he aceptado algo completamente desconocido. Un misterio y un milagro", afirm¨® la actriz ya en Los ?ngeles y con el Oscar en la mano. Portman lleva tiempo ensanchando sus horizontes. "Tuve la gran suerte de trabajar con Ben Gazzara y Lauren Bacall en el primer cortometraje que dirig¨ª", afirma sobre Eve, su primera expresi¨®n, en 2008, como realizadora. Tambi¨¦n est¨¢ la Portman productora a punto de estrenar Hesher, la primera obra bajo el sello Handsomecharlie Films, compa?¨ªa de producci¨®n que ha formado con su amiga Annette Savitch y que lleva el nombre de su perro ya fallecido, Charlie. Est¨¢ claro que quiere diversificar su futuro. "Necesito una estimulaci¨®n constante. Variedad. Odio repetirme a m¨ª misma". No es la primera vez que habla de lo dif¨ªcil que es cuidar a la familia y a los amigos, cuando cada tres o cuatro meses tienes que poner tu vida en pausa para meterte en la de otro. De momento, como dijo tras recoger el Oscar, el sue?o es uno: "Quedarme en casa en pijama y disfrutar de la vida".