El Gobierno prev¨¦ la recuperaci¨®n de empleo m¨¢s lenta en tres d¨¦cadas
Econom¨ªa cree que hasta 2014 solo se generar¨¢ la mitad de los puestos de trabajo perdidos - La crisis toc¨® fondo en el primer trimestre, seg¨²n los expertos
El incendio se origin¨® en los mercados financieros y se propag¨® luego a las cuentas p¨²blicas. Pero, en Espa?a, la Gran Recesi¨®n ha acabado siendo, sobre todo, una crisis laboral may¨²scula. Son tres a?os de destrucci¨®n de puestos de trabajo que tardar¨¢n en cicatrizar. Las dificultades que tendr¨¢ la econom¨ªa espa?ola para volver al nivel de empleo previo a la crisis se perciben incluso en el ¨²ltimo cuadro de previsiones del Gobierno. Seg¨²n el pron¨®stico oficial, publicado hace dos semanas, en 2014 no se habr¨¢ generado ni la mitad del empleo perdido. Ser¨¢, como poco, la recuperaci¨®n m¨¢s lenta de las tres ¨²ltimas d¨¦cadas.
La Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) del primer trimestre, que se divulgar¨¢ este viernes, trazar¨¢ la frontera entre lo peor de la crisis y el inicio de una d¨¦bil recuperaci¨®n. "Marcar¨¢ el m¨ªnimo de ocupaci¨®n de la crisis, con una tasa de paro que superar¨¢ el 21%", vaticina Mar¨ªa Jes¨²s Fern¨¢ndez, del gabinete de coyuntura de la Fundaci¨®n de Cajas de Ahorros (Funcas). "Las afiliaciones a la Seguridad Social entre enero y marzo anticipan que en el primer trimestre se perdieron unos 200.000 empleos m¨¢s", corrobora Sara Bali?a, de Analistas Financieros Internacionales (AFI).
La EPA aclarar¨¢ esta semana si se lleg¨® a los cinco millones de parados
Las analistas coinciden en que, entre abril y septiembre, el empleo se beneficiar¨¢ de una cierta mejora estacional, al calor de la temporada tur¨ªstica. Y anticipan que en el cuarto trimestre, aflorar¨¢ la recuperaci¨®n, aunque sea d¨¦bil, con mejores datos que en el mismo periodo de 2010. De ser as¨ª, la pr¨®xima EPA permitir¨¢ hacer un primer balance del descalabro: desde el tercer trimestre de 2007, cuando el mercado laboral alcanz¨® su ¨²ltimo m¨¢ximo (20,5 millones de empleos), hay 2,3 millones de empleados menos. Y la tasa de paro, si los vaticinios se cumplen, ha pasado del 8% al 21% de la poblaci¨®n activa.
Seg¨²n datos de la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE), ning¨²n pa¨ªs avanzado ha experimentado, ni de lejos, un incremento de la tasa de paro de esta magnitud (ver gr¨¢fico). Y ser¨¢ la evoluci¨®n de la poblaci¨®n activa, variable muy dif¨ªcil de anticipar, la que dictaminar¨¢ si en el primer trimestre se alcanzaron los cinco millones de parados, tras llegar a 4,7 millones de al cierre de 2010.
La vicepresidenta econ¨®mica, Elena Salgado, ha insistido en los ¨²ltimos d¨ªas en que no se llegar¨¢ a esa cifra. Pero, sean o no cinco millones de parados, lo relevante a partir de ahora es como de r¨¢pido va la econom¨ªa espa?ola a reducir el desempleo. Y, seg¨²n las cuentas del propio Ministerio de Econom¨ªa, m¨¢s optimistas que las de los analistas privados, la digesti¨®n ser¨¢ muy lenta.
El escenario macroecon¨®mico del Gobierno apunta a una generaci¨®n de empleo exigua este a?o -un incremento del 0,2%, frente al ligero retroceso que pronostican los analistas y el Banco de Espa?a-. Y a variaciones interanuales muy modestas en 2012 (1,4%), 2013 (1,5%) y 2014 (1,7%). El resultado es que la creaci¨®n de empleo en los pr¨®ximos cuatro a?os no compensar¨¢ ni la mitad de lo que se perdi¨® en la crisis.
Las estimaciones de Econom¨ªa se hacen a partir de los empleos equivalentes a tiempo completo, una medici¨®n que deriva de la contabilidad nacional: registra puestos de trabajo (una persona con dos trabajos cuenta por dos) y presenta los datos en jornadas completas (los trabajos a tiempo parcial se suman).
El resultado es algo distinto del de la EPA (en la crisis se perdieron 1,7 millones de empleos equivalentes a tiempo completo por 2,3 millones de ocupados). Pero esta serie estad¨ªstica no solo denota que, si se cumple el pron¨®stico del Gobierno, antes de 2015 no se habr¨¢ recuperado ni la mitad del empleo destruido. Tambi¨¦n que el ritmo de la recuperaci¨®n ser¨¢ mucho menor que en la crisis de los a?os noventa del siglo pasado. Entonces, se recuper¨® el nivel de empleo previo a la crisis (1991) en apenas cinco a?os.
En la segunda mitad de los ochenta, la recuperaci¨®n tambi¨¦n march¨® a mejor ritmo que lo que pronostica ahora el Gobierno, aunque se sal¨ªa de una crisis mucho m¨¢s prolongada y, a la postre, mayor: se perdi¨® m¨¢s empleo (un 13% con relaci¨®n al nivel m¨¢ximo, frente al 10% ahora) y durante m¨¢s tiempo (entre 1975 y 1985).
"M¨¢s de la mitad del empleo destruido en estos tres a?os corresponde a la construcci¨®n. La recolocaci¨®n de esos trabajadores en otros sectores no es f¨¢cil y eso pesar¨¢ en la recuperaci¨®n", argumenta Mar¨ªa Jes¨²s Fern¨¢ndez. "El crecimiento econ¨®mico que anticipa el Gobierno se basa en las exportaciones y en la inversi¨®n en bienes de equipo, actividades que tiran poco del empleo", se?ala Sara Bali?a.
Otro mito ca¨ªdo en EE UU
La 'triple A' con la que las agencias de calificaci¨®n acreditan la solvencia de las cuentas p¨²blicas estadounidenses no es el ¨²nico mito que se tambalea. A Estados Unidos, el pa¨ªs que mejor se recuperaba en la historia econ¨®mica reciente de las crisis laborales, la Gran Recesi¨®n se le ha atragantado.
No solo es que EE UU est¨¦ en el quinteto de pa¨ªses avanzados, donde m¨¢s ha aumentado la tasa de paro en puntos porcentuales, junto a otros nombres ilustres de la crisis, como Irlanda, Islandia y Grecia. Es tambi¨¦n el pa¨ªs industrializado donde m¨¢s ha crecido el desempleo de larga duraci¨®n (aqu¨ª por encima incluso de Espa?a). Y en las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas, nunca fue tan baja la probabilidad de que un parado estadounidense encuentre empleo el mes que viene.
La comisi¨®n de especialistas (NBER en sus siglas inglesas) que definen cuando empieza y acaba una recesi¨®n en EE UU ha concluido ya que ¨¦sta es la peor desde la Segunda Guerra Mundial, tanto por el empleo perdido (m¨¢s del 6%), como por la lentitud de la recuperaci¨®n (ni un 1% en un a?o).
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