La herencia de los narcos
La campa?a electoral reaviva en Vilagarc¨ªa la pol¨¦mica parcelaci¨®n de una playa
El juez Baltasar Garz¨®n estuvo casi 10 a?os recopilando datos sobre los negocios del entonces secretario de la C¨¢mara de Comercio de Vilagarc¨ªa, el abogado Pablo Vioque, para implicarle en el blanqueo de dinero, incluso antes de detenerlo por narcotr¨¢fico en abril de 1997. No es casualidad que la voluminosa causa que manejaba con absoluta discreci¨®n uno de sus funcionarios de confianza comenzara con el historial de una sociedad, Viveros de Carril, cuyo objeto social era la compra y venta de parques para el marisqueo en Vilagarc¨ªa.
La idea de parcelar la playa de Compostela para hacer negocio fue, al parecer, de Luis Falc¨®n P¨¦rez, cliente del c¨¦lebre despacho de Vioque, un empresario hostelero de Vilanova de Arousa que acab¨® siendo bastante m¨¢s conocido como Falconetti cuando se meti¨® a contrabandista de tabaco y luego a narcotraficante hasta que fue detenido en 1987.
Un contrabandista comenz¨® a hacer negocio parcelando el litoral
Los partidos que aspiran a la alcald¨ªa prometen poner en valor la costa
Vioque cre¨® la sociedad y mano a mano con Falc¨®n comenzaron a vender los viveros despu¨¦s de hacer una parcelaci¨®n mar¨ªtima a todas luces ilegal, un papeleo que se fragu¨® desde los despachos de la C¨¢mara. Pero gracias a las influencias de su secretario nadie de la Administraci¨®n auton¨®mica puso trabas a aquella barbaridad jur¨ªdica. Hace cuatro y cinco d¨¦cadas el arenal era un man¨¢ de moluscos bivalvos, principalmente berberechos, y hab¨ªa que sacarle partido.
Despu¨¦s de ser la playa de referencia de la aristocracia que verane¨® en Vilagarc¨ªa hasta los a?os sesenta, Compostela qued¨® pr¨¢cticamente abandonada por los ba?istas. La falta de un sistema de saneamiento de los vertidos que iban a parar al mar, provenientes de los barrios adyacentes y cada vez m¨¢s poblados, convirti¨® esta playa en una bah¨ªa desahuciada y luego olvidada. Tanto que a finales de los ochenta, durante el verano, la delegaci¨®n de Sanidad daba partes diarios del estado del agua cuando saltaba la alarma de contaminaci¨®n.
Solo a partir de los noventa, la playa comenz¨® a recuperarse, aunque muy lentamente y con parches poco efectivos como la regeneraci¨®n del arenal y la construcci¨®n, ya m¨¢s reciente, de un gran paseo mar¨ªtimo. Pero aun as¨ª, los vertidos afloran constantemente, los ba?istas protestan por la p¨¦sima calidad de la arena y, adem¨¢s, tienen que soportar el peligro potencial de los aparejos de los mariscadores que utilizan enormes varas para delimitar sus viveros. Esto, unido al manto de detritus y algas que cubre la playa, ha puesto en pie de guerra a los hosteleros y comerciantes, que piden a la Xunta y al Ayuntamiento que pongan fin a este espect¨¢culo "tercermundista".
A la pol¨¦mica tambi¨¦n se han subido al carro los cuatro partidos que concurren a las elecciones (PSdeG, PP, BNG y los independientes de IVIL), que est¨¢n de acuerdo en poner en valor la playa, haciendo promesas en sus programas electorales.
Jos¨¦ Luis Villanueva, portavoz de la Agrupaci¨®n de Parquistas de Carril -que cultiva 1.283 parcelas otorgadas a 656 productores- niega que sean ellos los culpables de la situaci¨®n. Asegura que luchan por mantener la calidad del agua y que no trabajan en la zona de los ba?istas, dado que los parques se encuentran en un ¨¢rea que pertenece exclusivamente a las explotaciones marisqueras.
Hace unos d¨ªas, en una rueda de prensa, el portavoz culp¨® a las Administraciones de no buscar una se?alizaci¨®n alternativa m¨¢s est¨¦tica y menos peligrosa y carg¨® contra el fe¨ªsmo de "la construcci¨®n salvaje" de Vilagarc¨ªa, los dep¨®sitos de hidrocarburos del muelle de Ferrazo, las torres del parque e¨®lico del monte Xiabre o la amurallada urbanizaci¨®n de San Roque de Carril que levantaron presuntos contrabandistas y narcotraficantes. "Las algas son un fen¨®meno natural que no contaminan y son buenas para la piel", asegur¨®.
El presidente de la C¨¢mara de Comercio de Vilagarc¨ªa, Carlos Oubi?a, defiende los intereses de la asociaci¨®n de hosteleros (Ahituvi) y la de los comerciantes (Zona Aberta), y exige una respuesta de la conselleira do Mar y de la alcaldesa de Vilagarc¨ªa, seis meses despu¨¦s de haber solicitado una entrevista con ambas que no lleg¨® a celebrarse. "Aqu¨ª hay una cosa clara: ?Queremos potenciar el turismo de Vilagarc¨ªa? S¨ª. ?Nuestra playa urbana es compatible con el marisqueo? No. Entonces habr¨¢ que ordenar el arenal porque, adem¨¢s, los mariscadores se han apoderado de m¨¢s superficie y ni la Xunta ni el Ayuntamiento dan una soluci¨®n", dijo.
Para Oubi?a, la playa Compostela es v¨ªctima de los impulsos de los pol¨ªticos que se han dedicado a poner parches, gastando alegremente el dinero de los ciudadanos. "Lo gastan con una alegr¨ªa tremenda y ahora tenemos el balneario, que lo han tirado despu¨¦s de abandonarlo sin saber qu¨¦ quieren hacer. Una barbaridad que hay que ponerle coto porque este desastre dura muchos a?os aunque ahora todos los partidos quieran subirse al carro", subray¨®.
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