Un pintor en verdad estramb¨®tico
Joan Fuster, creador del estrambotismo pict¨®rico, defiende el movimiento
Sentado en el sill¨®n de su casa de Torroella de Montgr¨ª (Baix Empord¨¤), bien vestido y con un aire sencillo, nadie le calificar¨ªa de estramb¨®tico. Pero lo es, al menos en el arte. Joan Fuster, creador del estrambotismo pict¨®rico, tiene 94 a?os y acaba de salir del hospital. Por eso no pudo acudir ayer al acto en el que su "heredero", el pintor gerundense Quim Hereu, daba las primeras pinceladas a El estramb¨®tico nacimiento de Venus, un colosal lienzo de 12 por 6 metros que se destinar¨¢ a un proyecto ben¨¦fico.
Fuster acu?¨® el t¨¦rmino estramb¨®tico all¨¢ por 1974 y escribi¨® una teor¨ªa sobre el tema. "El Bosco ya utilizaba esta palabra", explica. El pintor bebi¨® de Dal¨ª, al que visit¨® con frecuencia, pero el inventor del estrambotismo huye de automatismos y referentes en el psicoan¨¢lisis, y se basa en una libertad total del artista, guiado en todo momento por la raz¨®n, para sacarse de encima el peso de los c¨¢nones. "El surrealismo es una importaci¨®n. El estrambotismo expresa unas ideas que huyen de lo corriente. Cualquier elemento, sin perder su identidad, puede ser al mismo tiempo cualquier otra cosa", desgrana Fuster. Uno de sus cuadros, que el pintor califica de "ilusionista", refleja la luna dentro de un cesto de mimbre. Detr¨¢s, las ninfas del Empord¨¤ (el Montgr¨ª y las islas Medas) duermen.
Pasqual Maragall dio ayer la primera pincelada a un lienzo del g¨¦nero
Fuster se autodenomina "el padre real del estrambotismo" y dice con humildad que solo pretende hacer una aportaci¨®n al arte catal¨¢n, que ha dado tantos buenos artistas. Nunca ha buscado proyecci¨®n en el exterior. Ha vendido muchos cuadros y ha expuesto su obra, pero su holgada situaci¨®n econ¨®mica le ha permitido pintar con libertad y sin estrecheces. "Nunca ha querido viajar", explica su amigo Eugeni Llos, que fue en representaci¨®n de Fuster al acto de ayer, al que tambi¨¦n acudi¨® el ex presidente de la Generalitat Pasqual Maragall, para dar la primera pincelada al lienzo. "Es un gran pintor, un excelente m¨²sico y un gran poeta", afirma Llos. En 1953, su buen amigo acudi¨® tambi¨¦n en nombre de Fuster al Sal¨®n de Acuarelistas de Par¨ªs, donde gan¨® el primer premio.
Mientras muestra unos libros de f¨¢bulas que ha escrito e ilustrado, Fuster se manifiesta agradecido del trabajo que est¨¢ realizando Quim Hereu para difundir su obra y el estrambotismo por el mundo. Jugando con el apellido de su disc¨ªpulo, Fuster le nombr¨® heredero de su legado art¨ªstico. Hasta hace poco, ese legado hab¨ªa estado "enterrado, dormido, cerrado" en el estudio de Fuster, relata el propio Hereu, que muestra una admiraci¨®n sin fisuras por el maestro.
Un d¨ªa que hab¨ªan concertado un encuentro, Fuster apareci¨® con un poema que hab¨ªa escrito para otorgar oficialmente ese legado a Hereu. "Fue como si me diera un tesoro. ?Qu¨¦ es una obra estramb¨®tica? Es pintar cosas raras, ins¨®litas, con una gran imaginaci¨®n, de forma consciente", a?ade.
Fuster ha llevado una vida muy casera. "Mi vida ha sido muy contemplativa. Me he dedicado a tocar el viol¨ªn, a pintar, a escribir". Sigue pintando casi todos los d¨ªas. "Me siento satisfecho de mi existencia", concluye.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.