Un gran hotel para la ¨²ltima noche antes de ser princesa

Los Windsor tienen castillos y mansiones por todo Reino Unido pero han elegido dos hoteles cerca de Buckingham Palace para que sean enclaves importantes de la boda real que unir¨¢ ma?ana a Guillermo de Inglaterra, el heredero del heredero, con Kate Middleton, su novia desde hace diez a?os.

En Belgravia, uno de los barrios m¨¢s selectos de Londres, pasar¨¢ Kate su ¨²ltima noche de soltera. Se hospedar¨¢ con su familia en el hotel Goring, que suele visitar de manera asidua y discreta Isabel II cuando hace vida fuera de palacio. La novia tiene reservada toda una planta. Estar¨¢ acompa?ada por sus padres y sus dos hermanos. De all¨ª saldr¨¢ para convertirse en la nueva princesa de Inglaterra.

La Reina de Espa?a y los pr¨ªncipes de Asturias, entre los invitados a la boda

El centenario establecimiento est¨¢ a tres minutos en coche de la residencia de la reina y a diez de la abad¨ªa de Westminster, donde se celebrar¨¢ la boda real. El Goring era ayer era un hervidero de idas y venidas pese al inter¨¦s de sus empleados en que los preparativos para acoger a hu¨¦sped tan importante no alteren la vida cotidiana de sus otros clientes.

En el sal¨®n de t¨¦, presidido por un solemne cuadro del almirante Nelsson, una docena de personas disfrutaba de la t¨ªpica merienda como manda la tradici¨®n: manteles de hilo, teteras de plata, porcelana alemana, deliciosos pasteles financer... Todo servido por camareros vestidos de negro y con corbata amarilla, el color del hotel. Pero el susurro del sal¨®n -en el que est¨¢n prohibidos los m¨®viles- se romp¨ªa por el desfile de polic¨ªas que llegaban para revisar las instalaciones y por los floristas que decoraban la entrada con rosas blancas, que, cortadas con el tallo muy corto y colocadas en enormes jarrones de cristal, daban la sensaci¨®n de estar ya en el escenario de una boda. Subir a la planta en la que se alojar¨¢ Kate es tarea imposible. Solo ha trascendido que la suite que ocupar¨¢ ha sido totalmente redecorada y que lleva d¨ªas protegida por los servicios de seguridad de la familia real.

Kate llegar¨¢ al Goring para pasar su ¨²ltima noche de soltera procedente de otro hotel, el Mandarin. All¨ª la novia de Guillermo de Inglaterra ser¨¢ presentada esta noche a los representantes de todas las casas reales invitadas a la boda, que son muchos y comienzan a llegar hoy en aviones privados.

La Reina de Espa?a y los pr¨ªncipes de Asturias asistir¨¢n a esta cena previa a la boda y a la ceremonia. El Rey, como es su costumbre, no viaja, ya que no asiste a bodas, solo a las de sus m¨¢s cercanos familiares. Adem¨¢s estar¨¢n: Felipe y Matilde de B¨¦lgica, el sult¨¢n de Brunei y su primera esposa, Pengiran Saleha Hajah Anak; la reina Margarita de Dinamarca, los grandes duques de Luxemburgo, Alberto de M¨®naco y su prometida, Charlene Wittsock -los siguientes en esta cadena de bodas reales-; Guillermo y M¨¢xima de Holanda, Lalla Salma de Marruecos; los reyes de Noruega; Victoria de Suecia y su esposo, Daniel; el heredero al trono de Abu Dabi; el emir de Catar y la jequesa Moza bin Nasser al Missned, los reyes de Tonga y Suazilandia, el pr¨ªncipe Mohamed bin Nawaf bin Abdulaziz de Arabia Saud¨ª y la princesa Fadua bin Jalid bin Abdul¨¢ bin Abdulrahman, entre otros.

Los hoteles han sido la soluci¨®n para esta boda a la que han sido invitadas 1.900 personas, porque hasta la realeza tiene problemas de espacio a la hora de invitar. Por eso los 650 convidados a la recepci¨®n que la reina Isabel II ofrecer¨¢ tras la ceremonia en el palacio de Buckingham almorzar¨¢n de pie y a base de canap¨¦s.

El men¨² es resultado de las limitaciones de espacio del palacio, seg¨²n han se?alado portavoces de la casa real. Al parecer las cocinas de Buckingham est¨¢n solo equipadas para manejar cenas formales para unas 150 personas. Por eso se servir¨¢n canap¨¦s. Los cocineros preparar¨¢n 15 para cada uno de los invitados.

El palacio ofrece normalmente hace ocho tipos de canap¨¦s fr¨ªos y cinco calientes. Las especialidades incluyen salm¨®n ahumado, crepes de hierbas, empanadas de Cornualles y rollos de salchicha. No son demasiado grandes. El truco es poderlos comer en dos bocados para as¨ª estar en disposici¨®n de hablar y saludar a los otros comensales.

Para acompa?ar las viandas habr¨¢ champ¨¢n, vino espumoso y una limonada hecha con sales de Epsom, una especialidad de palacio.