Cuatro a?os despu¨¦s

Si tuviera que destacar tres grandes diferencias entre la econom¨ªa valenciana de 2007 y 2011 —que la obligan ahora a navegar con marejada y viento en contra— se?alar¨ªa las siguientes: 1) el paso de una econom¨ªa en crecimiento vigoroso a una estacionada; 2) el crecimiento de los servicios impulsado por la crisis y 3) el mayor condicionante del elevado endeudamiento p¨²blico y privado. Hay muchas m¨¢s diferencias que otros considerar¨¢n de mayor relevancia con datos procedentes de la Contabilidad Regional y de la Encuesta de Poblaci¨®n Activa del INE.

1) De que una econom¨ªa crezca a que no lo haga la diferencia es abismal. Sin crecimiento, las empresas no ven la necesidad de invertir y crear empleo, porque para qu¨¦ habr¨ªa que elevar la capacidad productiva si con la existente sobra para atender una demanda estancada y unas perspectivas inciertas. Se agudizan los problemas de la distribuci¨®n de renta y empeora la posici¨®n financiera de las administraciones p¨²blicas.

En 2007 la CV pon¨ªa fin a una prolongada etapa de crecimiento vigoroso, con una media anual de un 3,7% desde 1995, que hab¨ªa permitido crear 880.000 empleos principalmente en el sector servicios (579.000), la construcci¨®n (210.000) y la industria (117.000) y reducido 20.000 en el sector primario. La principal consecuencia de la desaparici¨®n del crecimiento es la gran p¨¦rdida de ocupaci¨®n (300.000) de los que 167.000 pertenecen a la construcci¨®n, 128.000 a la industria y 12.000 al sector primario. Los servicios, por el contrario, han mantenido estable su nivel de ocupaci¨®n. Hasta que no se recupere el crecimiento con cierto vigor no aumentar¨¢ la ocupaci¨®n a corto plazo aunque, con todo y a pesar de la crisis, se mantiene desde 1995 un saldo neto positivo de 580.000 empleos.

2) La crisis ha otorgado de nuevo un gran protagonismo a los servicios, que han crecido 4,5 puntos en el PIB, en detrimento de la construcci¨®n y la industria (1,7 puntos de reducci¨®n en cada una). Como contraste, entre 1995 y 2007 la construcci¨®n, que representaba inicialmente menos del 8% del PIB, contribuy¨® al crecimiento econ¨®mico el doble de lo que le hubiera correspondido por tama?o y algo m¨¢s que la industria y la energ¨ªa juntas. En todo caso no debemos olvidar que, incluso en la etapa del gran boom de la construcci¨®n, los servicios contribuyeron cuatro veces m¨¢s al crecimiento del PIB y que su importancia no da muestras de que vaya a descender en el futuro.

Desde 2007 la econom¨ªa de mercado de la CV ha ca¨ªdo un 2,01% acumulado, aunque el peor a?o que fue 2009, con descensos en todos los grandes sectores se van quedando atr¨¢s. Cay¨® mucho la industria, aunque de forma desigual, con ramas como la agroalimentaria, bebidas y tabaco o la de equipo el¨¦ctrico, electr¨®nico y ¨®ptico que se sostuvieron mucho mejor. Algunos subsectores de la construcci¨®n, sin embargo, continuaron su descenso gradual durante un mayor tiempo.

3) Por ¨²ltimo, los excesos del pasado, la intensidad de la crisis, el desempleo y la ausencia de crecimiento vigoroso hacen que las restricciones financieras condicionen ahora m¨¢s el inicio de la recuperaci¨®n. Tanto el sector privado como el p¨²blico est¨¢n en una delicada situaci¨®n financiera que no hace sino dificultar la capacidad de relanzar la inversi¨®n. Estas han sido uno de los principales motores del crecimiento econ¨®mico anterior y deber¨ªan volverlo a ser. Habr¨¢ que esperar para que una imprescindible recuperaci¨®n de la tasa de ahorro restaure el equilibrio financiero en los dos sectores. Para colmo de las dificultades, el sistema bancario espa?ol (particularmente las cajas) se encuentra inmerso en un proceso de transformaci¨®n y recomposici¨®n de sus balances que limita temporalmente su capacidad de movilizar recursos ajenos.

La importancia de las tres diferencias entre la CV de hoy y la de hace cuatro a?os parece evidente. La creaci¨®n de empleo privado depende del crecimiento, este exige inversi¨®n (en sectores existentes y/o nuevos) y la inversi¨®n exige confianza y capacidad financiera. Habr¨¢ que aplicarse a fondo desde los tres ¨¢mbitos (hogares, empresas y Administraciones) para quitarnos de encima cuanto antes esta crisis antes de que terminemos por acomodarnos a ella.

Javier Quesada. Universitat de Val¨¨ncia. Adjunto al presidente de los Premios Rey Jaime I.