"Siempre he pensado que el p¨²blico sabe tanto como yo"
Da igual cu¨¢nto brille el sol en Nueva York, Woody Allen llega a la cita con su t¨ªpico gorro de gabardina bien agarrado en la mano. Y no lo suelta. Por muy animada que sea la conversaci¨®n de este neoyorquino internacional de 75 a?os, el gorro permanece bien anclado. Como sus gafas. Hay cosas que no cambian. Est¨¢ a punto de montar en un avi¨®n camino del Festival de Cannes donde presenta su ¨²ltimo largometraje, Midnight in Paris, una visi¨®n rom¨¢ntica y nost¨¢lgica de la ciudad de la luz donde Allen visita cara a cara a algunos de los ¨ªdolos de esa edad dorada que fueron los a?os veinte para preguntarse si el pasado fue mejor. Esta vez su musa es Marion Cotillard; su ¨¢lter ego, Owen Wilson y su Manhattan, Par¨ªs.
"Hay pocos como Luis Bu?uel, una estrella que hizo arte del cine"
"?Pen¨¦lope Cruz, mi musa? En todo caso, habr¨ªa que decir que yo soy su musa"
"Mis hijos dicen que soy una antigualla y que estoy en las ¨²ltimas"
"Creemos que el pasado fue mejor, pero solo pensamos en el lado bohemio"
Pregunta. ?C¨®mo nace Midnight in Paris?
Respuesta. Acept¨¦ hacer una pel¨ªcula en Francia sin tener una idea. Sab¨ªa que ser¨ªa una pel¨ªcula rom¨¢ntica porque Par¨ªs es una ciudad rom¨¢ntica. Y ten¨ªa el t¨ªtulo, Midnight in Paris. Pero no sab¨ªa lo que iba a pasar hasta que imagin¨¦ un coche que, a medianoche, invitaba al protagonista a meterse en esta aventura.
P. Una aventura que pueblan personajes como Ernest Hemingway, Scott Fitzgerald, Salvador Dal¨ª, Gertrude Stein o Luis Bu?uel. ?Con qui¨¦n de ellos le gustar¨ªa hablar si fuera posible?
R. Yo nunca me meter¨ªa en un coche con extra?os por miedo a acabar en un s¨®tano en Darfur. No soy nada aventurero. Tampoco me gusta conocer a mis ¨ªdolos. No conoc¨ª a Louis Armstrong aunque tuve oportunidades. Prefiero dejar a mis ¨ªdolos en un pedestal. Conoc¨ª a Groucho Marx, alguien a quien idolatraba, y acab¨® siendo uno de esos t¨ªos chistosos que hay en cualquier familia. No me gustar¨ªa hablar con Hemingway, un tipo bastante irritante por lo que he le¨ªdo. Ni con Picasso, tambi¨¦n dif¨ªcil. Probablemente disfrutar¨ªa con Luis Bu?uel, de todos ellos el m¨¢s cuerdo e imaginativo.
P. Este a?o se celebra el 50? aniversario de la Palma de Oro de Viridiana...
R. Bu?uel est¨¢ en un lugar bien alto en el pante¨®n de los grandes genios del cine. Hay pocos como ¨¦l, reconocido por todos como un gran innovador. Kurosawa, Bergman, Fellini y Bu?uel. Una de esas pocas estrellas que hizo arte del cine.
P. Su pr¨®ximo filme, The wrong picture, vuelve a contar con Pen¨¦lope Cruz. ?Acaso es su nueva musa?
R. Pen¨¦lope no es m¨¢s que una amiga y una gran actriz. Con Vicky Cristina Barcelona fue ella quien llam¨® para decirme que quer¨ªa trabajar conmigo. El trabajo fue genial, as¨ª que cuando me dijo que quer¨ªa volver a trabajar conmigo y que hablaba italiano a la perfecci¨®n le escrib¨ª un nuevo papel. Pero en todo caso habr¨ªa que decir que yo soy su musa.
P. ?Y Carla Bruni? ?Cu¨¢l fue, exactamente, su relaci¨®n con la primera dama francesa?
R. Es tan guapa que le propuse hacer un peque?o papel en mi pel¨ªcula y dijo que s¨ª. Lo hizo sin mayor esfuerzo, aunque la prensa diga que hicimos miles de tomas y que cort¨¦ sus escenas. Son comentarios infundados. Fue un encanto y el rodaje, muy agradable.
P. Por maravilloso que sea Par¨ªs, ?echa de menos su adorado Nueva York?
R. Por lo general voy donde me financian la pel¨ªcula. ?Quieres rodar en Barcelona? ?Par¨ªs? Ahora Roma. Me lo hacen muy f¨¢cil porque la ciudad quiere que ruede all¨ª, as¨ª que la cooperaci¨®n es extrema. Estar¨ªa muy bien rodar en Nueva York, pero es muy caro. Al menos para un presupuesto limitado como el m¨ªo.
P. Ya s¨¦ que lo suyo no es la nostalgia...
R. Siempre decimos que lo pasado fue mejor, que nos gustar¨ªa vivir en otra ¨¦poca, pero solo pensamos en el lado bohemio, no en lo que ser¨ªa ir al dentista sin novoca¨ªna.
P. ?Pero alguna vez mira al cine de los setenta como ese momento irrepetible de su carrera?
R. En Estados Unidos el cine de los setenta fue mucho m¨¢s interesante. Los estudios, aunque eran unos filisteos dentro de su avaricia, hac¨ªan un par de pel¨ªculas con calidad. Por su propio ego. Y se contentaban con un menor margen de beneficios. Ahora cualquier cosa por debajo de los 70 millones de d¨®lares es un fracaso. Yo adem¨¢s tuve mucha suerte porque con United Artists fue como trabajar con una beca. Respaldaban mis pel¨ªculas sin leer el gui¨®n ni hacer preguntas. Siempre tuve la ¨²ltima palabra. En la actualidad muchos de los realizadores de entonces no tendr¨ªan esa posibilidad.
P. ?Y con sus hijos? ?Tiene m¨¢s suerte con lo que les apetece ver?
R. Soy un completo fracaso. No hay quien se enfrente a la presi¨®n que sufren entre sus compa?eros. Me paso el d¨ªa habl¨¢ndoles de las maravillas de Cole Porter o Charlie Parker y no me quieren ni escuchar. Para ellos solo existen Justin Bieber y Lady Gaga. Me desprecian. Dicen que soy una antigualla, una verg¨¹enza y que estoy en las ¨²ltimas...
P. ?Pensar¨¢ eso un p¨²blico como el actual, poco conocedor de los Hemingway, Bu?uel o Fitzgerald de anta?o?
R. Siempre he contado con una audiencia limitada. No soy un intelectual ni he ido a la universidad, pero siempre he pensado que el p¨²blico sabe tanto como yo. Si no sabes qui¨¦nes son los que salen en la cinta, no pasa nada. Pero me niego a hacer un cine dirigido a lo m¨¢s bajo, lleno de persecuciones y humor de cloaca. Mi p¨²blico ser¨¢ limitado pero as¨ª ha sido siempre.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.