Desencuentro total

El martes por la noche Quique Flores y Diego Forl¨¢n casi llegaron a las manos tras la derrota en Santander, en la que el entrenador del Atl¨¦tico se?al¨® al delantero uruguayo como uno de los responsables, si no el principal, de la remontada del Racing en El Sardinero. "Yo veo al equipo todos los d¨ªas y s¨¦ la disponibilidad de los jugadores con los que cuento. A veces me equivoco, pero los asuntos est¨¢n claros y las cartas est¨¢n sobre la mesa. No hay nada que indagar. Ha tenido 35 minutos, 40 con el descuento y ya hab¨¦is visto los minutos de Forl¨¢n. Cuando el equipo ganaba no se habl¨® de su suplencia", proclam¨® Quique. Las consecuencias no se hicieron esperar. Avisado de la rajada a trav¨¦s de un sms, el futbolista se levant¨® de su asiento en el autob¨²s camino del aeropuerto c¨¢ntabro y se acerc¨® a la parte delantera, donde se encontraban Quique y el resto del cuerpo t¨¦cnico, a pedir explicaciones. Seg¨²n varios testigos, el intercambio de opiniones se endureci¨® de tal modo que varios integrantes de la expedici¨®n tuvieron que intervenir para evitar que la discusi¨®n pasara de las palabras a los hechos.

La bronca fue el punto final a una relaci¨®n que ha experimentado un cambio radical. Hace un a?o el Atl¨¦tico gan¨® la Liga Europa, su primer t¨ªtulo en 14 a?os, el tercer trofeo de la casa extramuros desde la Recopa de 1962 y la Intercontinental de 1974. Forl¨¢n fue el principal responsable de la gesta. "Diego es un profesional como la copa de un pino. Le hemos pedido sacrificio y nos lo ha dado, le hemos pedido trabajo y tambi¨¦n nos lo ha dado, esfuerzo en los momentos m¨¢s duros y respondi¨® como un reci¨¦n llegado...", le pon¨ªa entonces por las nubes.

El cuento ha cambiado por completo desde entonces, por m¨¢s que el preparador fuera uno de los m¨¢s firmes defensores del atacante, que est¨¢ firmando su peor temporada (ocho goles en la Liga, uno en la Liga Europa y uno en la Copa) en Espa?a. "Cuando marca no se dice nada. Cuando no, parece que solo le pasa a ¨¦l. Se responsabiliza en exceso", dec¨ªa Quique cuando el doble Bota de Oro y mejor jugador del Mundial de Sud¨¢frica se pas¨® 12 duelos seguidos sin marcar en el paso del oto?o al invierno. El jugador, de arrancar tard¨ªo, inofensivo en las primeras vueltas y un depredador en las segundas, acus¨® el esfuerzo del curso anterior y la falta de descanso tras la Copa del Mundo.

Tras unas minivacaciones, Quique le pidi¨® un esfuerzo suplementario para pelear la final de la Supercopa de Europa al Inter. Forl¨¢n hizo en 15 d¨ªas el trabajo de un mes y medio. Aunque no destac¨® en M¨®naco, arranc¨® como un tiro en la Liga, con tres goles en las dos primeras jornadas. Fue un espejismo en una campa?a en la que ha disputado 14 encuentros completos de 49 posibles, el ¨²ltimo en marzo. Todo empez¨® a torcerse en octubre en Vila-real (2-0), donde Forl¨¢n disput¨® unos minutos. Quique le reproch¨® su falta de intensidad en el calentamiento. Fue el principio del fin de una relaci¨®n que se agrav¨® con otros roces, como que el t¨¦cnico le dejara fuera del once contra Osasuna porque ven¨ªa de competir con Uruguay. Ese d¨ªa s¨ª jug¨® God¨ªn, y Diego Costa marc¨® un hat trick que le convirti¨® en titular.

El entrenamiento de ayer comenz¨® con una tensa reuni¨®n de 45 minutos. El uruguayo, irritado, reproch¨® al t¨¦cnico que le criticara en p¨²blico y le ignorara en privado. "No hab¨ªa que se?alar a nadie", afirm¨® despu¨¦s Antonio L¨®pez, expresando el sentir de un grupo que pidi¨® al entrenador que dejara de hacer probaturas con el sistema para dejar fuera a Forl¨¢n. Pitarch cerr¨® el sanedr¨ªn insistiendo a los jugadores que deben ganar para garantizarse un lugar en Europa y que Quique no seguir¨¢. En principio, como ¨¦l.