Nace el port¨¢til Chromebook

Se llama Chromebook y es un port¨¢til. Se present¨® en la convenci¨®n de desarrolladores de Google, que durante dos d¨ªas se han reunido en San Francisco (EE UU). Nadie se lo esperaba, pero el gigante inform¨¢tico mostr¨® su primer ordenador, un miniport¨¢til. En el acto no se habl¨® de disco duro ni de hipot¨¦ticas capacidades del mismo. Es irrelevante. Es su manera de apostar por la conexi¨®n permanente a Internet y el almacenamiento en la nube (servidores deslocalizados en la Red y no en la memoria del aparato). Chromebook es el nombre de estos aparatos de bajo consumo, bater¨ªa de ocho horas en el caso de Samsung y m¨¢s de seis si se opta por el aparato creado por Acer y dise?o muy parecido al netbook.

Hay una modalidad de alquiler para empresas y centros educativos

Los archivos y programas se almacenan en la 'nube' de Internet

Ambos modelos pesan alrededor de kilo y medio y tienen pantalla que ronda las 12 pulgadas (12,1 el de Samsung y 11,6, el de Acer). Cuenta con ranura para tarjetas SD (las m¨¢s comunes entre las c¨¢maras de fotos), procesador Intel AtomTM Dual-Core de bajo consumo y doble n¨²cleo, wifi con banda doble y 3G con conexi¨®n mundial (opcional) integrados, webcam de alta definici¨®n con micr¨®fono con cancelaci¨®n de ruido y dos puertos USB 2.0.

Los ordenadores llegar¨¢n a Estados Unidos, Italia, Reino Unido, Francia, Espa?a y Alemania el 15 de junio. Se desconoce el precio en Europa, no as¨ª en Estados Unidos donde oscila entre 429 y 499 d¨®lares (301 y 351 euros). En Espa?a lo har¨¢ con Telef¨®nica como operador y Pixmania en la distribuci¨®n. No se vender¨¢ en las tiendas f¨ªsicas.

Entre las bondades del sistema operativo destaca su facilidad de uso, muy parecido al navegador Chrome. En realidad, toda la interfaz es el sistema operativo y cada aplicaci¨®n se abre en un pesta?eo. El tiempo de arranque se reduce hasta ocho segundos.

Durante la presentaci¨®n en el Moscone Center de la ciudad californiana, se hizo hincapi¨¦ en dos factores: la facilidad para compartir cualquier fotograf¨ªa o v¨ªdeo con sus contactos y las actualizaciones autom¨¢ticas.

En caso de no tener conexi¨®n a la Red, el servicio de correo Gmail, el calendario y la gesti¨®n de documentos de texto y hoja de datos GDocs se podr¨¢ usar copiando los cambios en el ordenador hasta que se restaure el acceso a la Red. As¨ª se podr¨¢ trabajar en un avi¨®n, por ejemplo.

Adem¨¢s, habr¨¢ una versi¨®n del miniordenador para escritorio. Google lo ha presentado en el segundo d¨ªa de su sesi¨®n para desarrolladores, Google I/O, con dos posibles clientes preferentes: las empresas y los centros educativos. En el primer caso el alquiler de hardware y software tendr¨¢ un coste de 28 d¨®lares mensuales (unos 20 euros)por usuario. En la ense?anza se reduce a 20 (14 euros). No se han especificado los precios para Espa?a. En el mismo evento, Google aport¨® datos de su navegador que comparte nombre con el sistema operativo. Chrome tiene varios miles de aplicaciones y m¨¢s de 160 millones de usuarios. De ahora en adelante permitir¨¢ dos aspectos importantes para el desarrollo de sus aplicaciones: el cobro por contenidos directamente dentro de la aplicaci¨®n y una tarifa fija por parte de Google. La empresa de Mountain View cobrar¨¢ el 5%.

Entre las novedades presentadas del navegador Chrome hay una alegr¨ªa para los jugadores. Angry Birds se ofrece en su tienda como aplicaci¨®n para web.

En la misma conferencia de desarrolladores, el martes, Google confirm¨® el lanzamiento de Google Music, que funciona tanto con Windows como con Mac.

El programa permite exportar al tel¨¦fono o tableta toda la colecci¨®n de canciones del propietario de las mismas al aparato Android, a partir de la versi¨®n 2.2, que se desee. Desde ah¨ª las canciones pasan a la nube y est¨¢n accesible en cualquier momento. Google Music est¨¢ de momento en versi¨®n de prueba y solo disponible en Estados Unidos con 20.000 canciones gratis. Pero este servicio, junto al alquiler de pel¨ªculas, ha quedado ensombrecido por el lanzamiento de Chromebook, con el posible impacto que pueda tener en el futuro de las tabletas.