Cuatro visiones de China
Pol¨ªtica. No es que China sea el pa¨ªs del futuro, es que ya lo es del presente, y por eso se multiplican los libros que retratan una realidad llena de matices y nos ayudan a entender un mundo que Occidente no ha sabido o querido valorar en el pasado. Es el caso de los cuatro vol¨²menes que aqu¨ª se rese?an y entre los que destacan las memorias escritas desde el arresto domiciliario y el exilio interior por Zhao Ziyang, uno de los art¨ªfices del milagro chino: la fren¨¦tica puesta en marcha de un pa¨ªs que ha pasado de la ruina a la segunda potencia econ¨®mica mundial en tres d¨¦cadas. Los enviciados con las intrigas del poder que describe Zhao podr¨¢n abundar en la historia de China con un ameno recorrido por los ¨²ltimos cuatro siglos, obra del prestigioso sin¨®logo brit¨¢nico Jonathan D. Spence. Adem¨¢s, el empresario espa?ol Marcelo Mu?oz se aventura a dise?ar la China de 2050, en tanto que Qiu Xiaolong se adentra en las aguas procelosas de la vida amorosa de Mao Zedong, con formato de novela negra.
Prisionero del Estado, el libro p¨®stumo de Zhao Ziyang, se teji¨® de forma furtiva durante los 16 a?os que el exdirigente comunista vivi¨® encerrado en su casa. Es la transcripci¨®n de 30 horas de grabaciones sacadas clandestinamente de China. Este diario sui g¨¦neris fue publicado por primera vez en Hong Kong, en la primavera de 2009, justo 20 a?os despu¨¦s de los sucesos de Tiananmen, que marcaron con sangre la apertura de China y acabaron con la carrera pol¨ªtica de Zhao, por oponerse a la ley marcial y al avance de los tanques sobre los estudiantes que ped¨ªan libertad de prensa, lucha contra la corrupci¨®n y limpieza y reforma del Partido Comunista.
"Me dije a m¨ª mismo que, sin importarme lo que pasara, rechazaba convertirme en el secretario general que moviliz¨® a los militares contra los estudiantes", dice Zhao cuando cuenta que se fue de la reuni¨®n en la casa del anciano dirigente Deng Xiaoping, despu¨¦s de que este decidiera la movilizaci¨®n del Ej¨¦rcito. Zhao desvela la encarnizada lucha de poder que vivi¨® la c¨²pula comunista tras la desaparici¨®n de Zedong y la puesta en marcha de la reforma econ¨®mica que apoyaba Deng Xiaoping. Con el tel¨®n de fondo de Tiananmen, desgrana las dificultades con que se encontraron la reforma y quienes la defend¨ªan frente a los ataques implacables de una izquierda obsoleta, radical y amparada en la alargada sombra de Zedong.
Este amante del golf, abierto y jovial, que los occidentales vieron como el gran dem¨®crata chino, confiesa que el hombre que verdaderamente luch¨® por la reforma pol¨ªtica de China, la defensa de sus intelectuales, la tolerancia y la libertad de opini¨®n fue Hu Yaobang, el secretario general del PCCh, defenestrado en 1987 para aplacar la ira de los izquierdistas. Reconoce que se sent¨ªa muy c¨®modo como primer ministro, dedicado a la reforma econ¨®mica y las tareas del Estado, por lo que acept¨® de mala gana, tras la destituci¨®n de Hu, la secretar¨ªa general del PCCh, el cargo que le llevar¨ªa a la ruina. Entonces comprendi¨® la soledad de su predecesor y sinti¨® el cerco de las espadas izquierdistas: "Pronto pasaron a considerarme su rival principal", dice. Pero solo despu¨¦s de Tiananmen y de su injusto arresto que exige in¨²tilmente que levanten, Zhao concluye que para avanzar en la reforma econ¨®mica es necesaria la reforma pol¨ªtica.
En busca de la China moderna, del profesor de Historia en Yale Jonathan D. Spence, es un cl¨¢sico de 1990 que Cr¨ªtica publica con la revisi¨®n minuciosa de 1999, realizada dos a?os despu¨¦s de la recuperaci¨®n por Pek¨ªn de Hong Kong. Pese a la carencia de esta ¨²ltima d¨¦cada de r¨¦cords de crecimiento, sigue siendo un libro de largo aliento e imprescindible. Arranca en 1600 y con minuciosidad y amenidad va demostrando que la China de hoy es la consecuencia obligada de una evoluci¨®n que viene de lejos y que no ha concluido.
En cuanto a China 2050, de Marcelo Mu?oz, se trata del segundo intento, tras El enigma chino, con el que este veterano hombre de negocios trata de acercarse a la vertiginosa transformaci¨®n china. Si su primer libro era una descripci¨®n subjetiva de la realidad actual, este ¨²ltimo plantea preguntas b¨¢sicas a intelectuales y empresarios chinos para prever la evoluci¨®n en las pr¨®ximas d¨¦cadas.
El caso Mao, de Qiu Xiaolong, es en apariencia una novela negra. Hay un investigador esc¨¦ptico (protagonista de otras obras), una delicada investigaci¨®n y alg¨²n crimen. Sin embargo, lo m¨¢s relevante no es la intriga policiaca, sino el retrato de interioridades del poder en China y de los estrechos l¨ªmites dentro de los cuales naufraga cualquier intento de revisi¨®n hist¨®rica, sobre todo cuando el objeto de investigaci¨®n es Mao Zedong. Qiu, cuyo padre fue v¨ªctima de la Revoluci¨®n Cultural, se permite unas libertades a la hora de hablar de las debilidades del Gran Timonel, incluida la crueldad con que pod¨ªa tratar a esposas o amantes, que solo se explican porque vive en Estados Unidos. Algunas de sus obras no han sido editadas en China o han sufrido los rigores de la censura.
Prisionero del Estado. Zhao Ziyang. Traducci¨®n de Emilio Ortega. Alg¨®n Editores. Granada, 2011. 438 p¨¢ginas. 20 euros. En busca de la China moderna. Jonathan D. Spence. Traducci¨®n de Jordi Beltr¨¢n. Tusquets. Barcelona, 2011. 1.076 p¨¢ginas. 34 euros. China 2050. Marcelo Mu?oz. Kailas. Madrid, 2011. 282 p¨¢ginas. 19,90 euros. El caso Mao. Qiu Xiaolong. Traducci¨®n de Victoria Ord¨®?ez. Tusquets. Barcelona, 2011. 330 p¨¢ginas. 19 euros.
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