Rumania a¨ªsla a la extrema derecha al designar un nuevo Gobierno de coalici¨®n europe¨ªsta
Los socialdem¨®cratas, los liberales y la minor¨ªa h¨²ngara forman un Ejecutivo que acuerda presentar a un candidato conjunto para las elecciones presidenciales
Los socialdem¨®cratas del Partido Social Dem¨®crata (PSD), el Partido Nacional Liberal (PNL) y la minor¨ªa h¨²ngara (UDMR), todas formaciones europe¨ªstas, han sacado adelante este lunes en el Parlamento de Rumania una nueva coalici¨®n de Gobierno que resucita a grandes rasgos al anterior Ejecutivo del pa¨ªs, aunque sale adelante por un margen estrecho. El Ejecutivo obtiene una mayor¨ªa simple de 240 votos, tan solo siete m¨¢s de los 233 en los que se fija la mayor¨ªa simple, y 140 en contra. El nuevo Gabinete tendr¨¢ al frente a Marcel Ciolacu, el primer ministro saliente y l¨ªder de los socialdem¨®cratas, que repite en el cargo. Los partidos que lo conforman tambi¨¦n han anunciado que presentar¨¢n un candidato com¨²n para la repetici¨®n de las elecciones presidenciales ¡ªcuya primera vuelta fue anulada el 6 de diciembre por el Tribunal Constitucional rumano¡ª que se prev¨¦ para el mes de marzo. Se trata del exdirigente de los liberales del PNL Crin Antonescu, cuyo nombre son¨® inicialmente como sucesor del ahora confirmado primer ministro Ciolacu.
Solo el partido europe¨ªsta Uni¨®n Salvar Rumania (USR) ha declinado participar en el nuevo Ejecutivo, en parte por la continuidad de Ciolacu como jefe de Gobierno. Tanto la USR como las formaciones europe¨ªstas que s¨ª est¨¢n incluidas en la nueva alianza gubernamental hab¨ªan anunciado el 11 de diciembre su intenci¨®n de formar una nueva coalici¨®n con el fin de establecer un cord¨®n sanitario y eliminar de ra¨ªz cualquier opci¨®n de que los extremistas alcanzaran el poder tras las elecciones legislativas del 1 de diciembre.
En esos comicios, los dos grandes partidos rumanos, el PSD y el PNL, sufrieron un serio rev¨¦s al perder, respectivamente, 5 y 10 puntos porcentuales. El varapalo se atribuye a la corrupci¨®n, extendida en todos los estamentos del poder en Rumania, la elevada inflaci¨®n y la lentitud de las reformas y de la modernizaci¨®n del pa¨ªs, 17 a?os despu¨¦s de su ingreso en la Uni¨®n Europea. Aun as¨ª, ambas formaciones sumaron el 33% de los votos, un porcentaje que les ha permitido finalmente formar un nuevo Gobierno con el apoyo de los 19 diputados reservados a las minor¨ªas ¨¦tnicas.
El descr¨¦dito de los partidos tradicionales rumanos que se considera beneficia a la extrema derecha populista hab¨ªa quedado, si cabe, a¨²n m¨¢s patente en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, celebradas el 24 de noviembre, en las que venci¨® inesperadamente Calin Georgescu, un candidato prorruso y de extrema derecha. Con la aprobaci¨®n del nuevo Gabinete, Rumania da otro paso hacia la normalizaci¨®n democr¨¢tica despu¨¦s de la conmoci¨®n que provoc¨® la victoria de Georgescu, cuyo ¨¦xito, aupado sobre todo por una campa?a feroz en la red social TikTok, sacudi¨® todos los estamentos pol¨ªticos y de la sociedad civil. Ese se¨ªsmo pol¨ªtico salpic¨® incluso a los servicios secretos y al propio jefe de Estado, Klaus Iohannis, a quienes muchos rumanos culpan de no haber detectado a tiempo el ascenso de la popularidad del candidato ultra.
La primera vuelta de las presidenciales fue finalmente anulada por el Tribunal Constitucional del pa¨ªs el 6 de diciembre, despu¨¦s de que el Consejo Supremo de Defensa desclasificara una serie de documentos que se?alaban la injerencia electoral de un ¡°actor estatal¡±, aunque no indic¨® a qu¨¦ pa¨ªs se refer¨ªa. Sin embargo, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, apunt¨® a Rusia.
¡°Perm¨ªtanme desear buena suerte a la nueva coalici¨®n, una proeuropea y prorrumana, que tiene todas las posibilidades de continuar el muy buen camino de Rumania despu¨¦s de los indiscutibles ¨¦xitos econ¨®micos y de la entrada de Rumania en el espacio Schengen [que se har¨¢ efectiva el pr¨®ximo 1 de enero]¡±, hab¨ªa declarado por la ma?ana el presidente Klaus Iohannis en una rueda de prensa sin preguntas en la que confirm¨® el encargo de formar Gobierno a Ciolacu. El presidente rumano subray¨® luego que el nuevo Ejecutivo deber¨¢ elaborar el presupuesto y fijar el calendario de la repetici¨®n de las anuladas elecciones presidenciales.
¡°Vienen tiempos complicados, pero creo que todos hemos aprendido de los errores del pasado. Soy consciente de que no ser¨¢ un mandato f¨¢cil. Es esencial que este Gobierno establezca la confianza de los inversores y garantice un clima predecible para el entorno empresarial. Necesitamos acelerar las reformas en el Plan Nacional de Resistencia y Resiliencia para reducir los gastos presupuestarios y destinar cualquier super¨¢vit a inversiones¡±, se?al¨®.
Ciolacu se ha referido a los objetivos de su Gobierno durante su discurso de investidura en el Parlamento, previo al recuento de votos. ¡°El primer paso es dar un impulso positivo al entorno empresarial a trav¨¦s de la estabilidad, y el segundo pasa por la r¨¢pida organizaci¨®n de elecciones presidenciales con total seguridad y total transparencia¡±, ha declarado. Y ha insistido, no obstante, en que su prioridad consiste en restablecer la equidad econ¨®mica y social. ¡°El ciudadano ha servido demasiado al Estado, le toca al Estado servir al ciudadano¡±, ha recalcado el primer ministro, quien no cree que ¡°haya pol¨ªticos proeuropeos y antieuropeos¡± en el Parlamento: ¡°35 a?os despu¨¦s de la Revoluci¨®n, me cuesta creer que alguien quiera que volvamos a la dictadura¡±. Por ¨²ltimo, ha se?alado que se asegurar¨¢ de que ¡°las presidenciales sean justas para todos los competidores y de que decida la voluntad de los rumanos, no los algoritmos¡±.
Por su parte, el partido europe¨ªsta que ha declinado formar parte de la coalici¨®n de Gobierno reeditada en Rumania, la USR, critic¨®, ya antes de la votaci¨®n en el Parlamento que le ha dado luz verde, al nuevo Gabinete, al que acus¨® de continuismo, especialmente por la confirmaci¨®n de que Ciolacu seguir¨¢ en su cargo: ¡°Nada cambia. Tenemos el mismo primer ministro, la misma forma de gobernar, sin un recorte serio del gasto estatal y del despilfarro para reducir el d¨¦ficit y el endeudamiento. Eso significa que a la gente y a la econom¨ªa les ir¨¢ peor el pr¨®ximo a?o¡±, indic¨® la diputada Cristina Pruna, quien adelant¨® que el nuevo Gobierno seguramente anunciar¨¢ un aumento de impuestos. ¡°Es como el Titanic, la m¨²sica contin¨²a mientras el barco se hunde¡±, asever¨® Pruna.
Reparto de carteras
Los datos que han trascendido del reparto de carteras entre los socios de la nueva coalici¨®n apuntan a que los socialdem¨®cratas del PSD asumir¨¢n ocho de los 16 ministerios del pa¨ªs, entre ellos los de Justicia, Transportes y Defensa, mientras que los liberales estar¨¢n al frente de seis, entre ellos, Interior, Energ¨ªa y Exterior. La minor¨ªa h¨²ngara gestionar¨¢ dos carteras, la de Finanzas y la de Desarrollo.
El nuevo Ejecutivo tendr¨¢ enfrente al bloque que engloba a la extrema derecha, con la Alianza para la Uni¨®n de los Rumanos (AUR, oro en rumano), formaci¨®n que qued¨® segunda en las urnas, el partido SOS, de la pol¨¦mica europarlamentaria Diana Sosoaca, y el Partido de las Personas J¨®venes (Puedo en rumano). Aunque esas formaciones no conseguir¨ªan ni siquiera unidas una mayor¨ªa relativa alternativa, s¨ª podr¨ªan poner en aprietos al nuevo Gabinete. El l¨ªder de AUR, George Simion, ya hab¨ªa dicho antes que el nuevo Gobierno ser¨ªa ¡°igual de ileg¨ªtimo¡± que el presidente Iohannis, cuyo mandato expir¨® el pasado s¨¢bado. ¡°El hecho de que el Parlamento regrese con el Gobierno de Ciolacu demuestra que no han escuchado la voz de los rumanos¡± tras los comicios, ha protestado Simion durante el recuento de votos.
El candidato al cargo de primer ministro de los tres partidos que han suscrito el pacto de coalici¨®n fue inicialmente Antonescu, que finalmente ha sido elegido como candidato conjunto de la alianza gubernamental para las pr¨®ximas presidenciales. Antonescu, mu?idor de la coalici¨®n entre el PSD y el PNL bautizada como Uni¨®n Social Liberal en 2012, lider¨® ese a?o el proceso de destituci¨®n del entonces presidente rumano Traian Basescu, que no sali¨® adelante porque el refer¨¦ndum que exige la ley rumana para ello no logr¨® el quorum necesario del 30%. El nombre de Antonescu son¨® entonces como candidato a presidente del pa¨ªs, aunque finalmente fue el actual jefe de Estado, Iohannis, quien se alz¨® en 2014 con la primera magistratura pol¨ªtica de Rumania.
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