El PP aspira a ganar hoy en las siete ciudades por primera vez
Todas han tenido alcalde de izquierdas en el ¨²ltimo mandato - El electorado urbano solo dio 13 mayor¨ªas absolutas en democracia - Suman 35% del censo
Las siete ciudades gallegas tienen todas, por primera vez en democracia, un alcalde de izquierdas. Cuatro socialistas gobiernan en coalici¨®n con el BNG, otros dos (Lugo y Ferrol) en minor¨ªa y el nacionalista Fern¨¢ndez Lores manda en Pontevedra con el apoyo del PSdeG. Galicia, a nivel auton¨®mico, ha sido feudo de la derecha. El PP es tambi¨¦n hegem¨®nico en votos y alcald¨ªas en el ¨¢mbito local. Pero desde las primeras elecciones municipales de 1979, el electorado urbano siempre se inclin¨® a la izquierda. Aunque desde la Rep¨²blica no hab¨ªa vuelto a ganar en el conjunto de las ciudades. Hasta 2007. En pleno ecuador de la Xunta bipartita de PSOE y Bloque, las fuerzas de izquierdas se impusieron a la derecha sin excepciones en las urbes.
En 39 municipios se investigan presuntos fraudes en el censo
Las siete urbes han aportado el 35% de los votos obtenidos por los socialistas
Ganar en las siete ciudades. Es el gran sue?o del PP de Alberto N¨²?ez Feij¨®o para hoy, su primera contienda electoral siendo presidente de la Xunta. "Ser¨ªa algo hist¨®rico, no lo recuerda nadie en el partido", confes¨®. Un objetivo dif¨ªcil. Ninguna formaci¨®n pol¨ªtica en solitario lo consigui¨® a¨²n. El voto urbano siempre se le resisti¨® a la derecha. Incluso en los mejores momentos de las presidencias de Manuel Fraga, cuando bat¨ªa r¨¦cords de mayor¨ªa absoluta en el Parlamento gallego.
Los conservadores, no obstante, estuvieron muy cerca de conseguir ese vuelco que ahora ans¨ªa Feij¨®o: en las elecciones municipales de 1999, cuando el veterano fundador del PP llevaba ya casi un d¨¦cada en la Xunta, su partido alcanz¨® una hegemon¨ªa urbana in¨¦dita hasta entonces. Logr¨® ser el m¨¢s votado en seis de las siete ciudades. Solo A Coru?a, que nunca tuvo en democracia un alcalde conservador, se resisti¨® a aquella ola azul. Finalizaba ese d¨ªa un mandato en el que hab¨ªa batido otra marca: cinco de las siete alcald¨ªas m¨¢s importantes estaban desde 1995 en manos de los conservadores.
Los socialistas solo mantuvieron entonces A Coru?a y Santiago. En la primera, marcada por las seis mayor¨ªas absolutas consecutivas del exalcalde Francisco V¨¢zquez, el PP nunca logr¨® ganar. Y en la capital gallega, solo consigui¨® estar un a?o en la alcald¨ªa gracias a una moci¨®n de censura con tr¨¢nsfugas. En las siguientes elecciones de 1987, el socialista Xerardo Est¨¦vez recuperar¨ªa, y con mayor¨ªa absoluta, el bast¨®n de mando. Sigue hasta hoy en manos del PSOE.
Viven en las siete ciudades casi el 35% de los 2.316.249 electores llamados a acudir hoy a las urnas en Galicia. Unos comicios para renovar 315 ayuntamientos e, indirectamente, cuatro diputaciones provinciales, en los que tambi¨¦n tienen derecho a voto 10.062 extranjeros residentes en la comunidad aut¨®noma.
Pero por primera vez, los gallegos que est¨¢n fuera de Espa?a no tendr¨¢n voz ni voto en la elecci¨®n de los alcaldes. Una novedad que adelgaz¨® mucho el censo (un 12%, unos 320.000 votantes menos), con especial incidencia en las provincias m¨¢s rurales, Ourense (perdi¨® un 21% de electores) y Lugo (un 13,7%). Podr¨ªa influir en los resultados de hoy.La participaci¨®n de los emigrantes en las municipales sol¨ªa ser baja. Aunque hubo excepciones significativas en algunas localidades. Ante la votaci¨®n de hoy, est¨¢n siendo investigados 39 municipios por fraude en su censo.
El descenso de electores es menos perceptible en las ciudades, que siguen siendo el gran campo de batalla de los principales partidos porque son tambi¨¦n su granero m¨¢s caudaloso de votos. Una de cada tres papeletas que cosechan el PP o el BNG procede del ¨¢mbito urbano. Para los socialistas, el peso es a¨²n mayor: las siete ciudades les proporcionan casi el 35% de sus sufragios. Esquerda Unida se juega literalmente su supervivencia. En Ferrol, donde ahora suma cuatro concejales y el 14% de las papeletas emitidas en 2007, alberga su principal -y casi ¨²nica- representaci¨®n en Galicia.
Aunque la izquierda ha sido, en l¨ªneas generales, hegem¨®nica hasta ahora en el voto urbano en Galicia, se sucedieron, en cada convocatoria con las urnas, vuelcos pol¨ªticos. Al igual que A Coru?a nunca tuvo en democracia un alcalde del PP, tampoco Pontevedra tuvo ninguno del PSOE. Y los nacionalistas no se estrenaron con el bast¨®n de Santiago, Ourense o Lugo. Aunque s¨ª participaron en sus gobiernos.
Los pactos o coaliciones, hoy tan denostados por el PP, siempre fueron habituales en las ciudades. Todos, incluidos los conservadores, recurrieron a alianzas para hacerse con alcald¨ªas: las urbes gallegas son reacias a dar mayor¨ªas absolutas. Solo ocurri¨® en 13 ocasiones. En Ferrol, no hubo ninguna en las ocho elecciones municipales. Solo seis pol¨ªticos gallegos pueden presumir de haber cosechado en las urnas votos suficientes para gobernar sin otros apoyos. Dos son socialistas, Francisco V¨¢zquez (seis mayor¨ªas consecutivas en A Coru?a 1983-2004) y Xerardo Est¨¦vez (dos en Santiago 1987-1991). En el PP militan los dem¨¢s: Manuel Cabezas (tres consecutivas en Ourense (1995-2003); Manuel P¨¦rez (la ¨²nica que hubo en Vigo, en 1995); Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa D¨ªez (Lugo, 1995), y Jos¨¦ Rivas Font¨¢n, tambi¨¦n el ¨²nico que lo logr¨® en Pontevedra (1983).
Esas tres ¨²ltimas mayor¨ªas absolutas, que constituyeron en su momento una importante victoria para el PP, solo duraron un mandato. En el apogeo pol¨ªtico de Fraga, en 1995, logr¨® romper la hegemon¨ªa urbana del PSOE al conseguir cinco de las siete alcald¨ªas. Pero liquid¨® sus mejores activos al empe?arse en no presentar a la reelecci¨®n a sus alcaldes, tuviesen o no mayor¨ªa absoluta. Incluso Cabezas opt¨® por irse en 2003, despu¨¦s de tres mayor¨ªas absolutas y continuas tiranteces con el bar¨®n provincial, Jos¨¦ Luis Baltar. Solo Corina Porro gobern¨® Vigo entre 2004 y 2007 tras una estrepitosa ruptura del pacto PSOE-BNG.
A falta de mayor¨ªa absoluta, que gobierne la lista m¨¢s votada, clama el PP, que tambi¨¦n se vali¨® en el pasado, hasta en cinco ocasiones, de pactos para hacerse con alcald¨ªas importantes. La ¨²ltima fue en Ferrol, la coalici¨®n entre 2003 y 2007 del popular Juan Juncal con los independientes de Juan Fern¨¢ndez. El PP tiene clavada la espina de 1991, cuando se hizo con solo una alcald¨ªa, la de Ourense, siendo el m¨¢s votado en seis de las siete ciudades. O la de 2007, en que se qued¨® sin ninguna pese a ganar en votos en Santiago, Vigo, Ourense y Pontevedra.
El alcalde de Lugo, Xos¨¦ L¨®pez Orozco (PSdeG), en un escenario an¨¢logo, ignor¨® al BNG y gobern¨® este ¨²ltimo mandato en minor¨ªa. Pero su partido siempre defendi¨® lo contrario. Los socialistas se valieron de pactos de gobierno desde el inicio de la democracia para hacerse con el bast¨®n de mando de ciudades como Santiago, Ferrol o Vigo. En 1991, tras el desembarco de Fraga en la Xunta, lograron conservar Vigo, Ourense y Ferrol con alianzas a dos o tres bandas. En 1995, cuando el PP se hizo con cinco ciudades, PSOE y BNG firmaron su primer pacto "de mayor¨ªas de progreso" y sumaron 31 alcald¨ªas. Hace cuatro a?os, los socios de gobierno en la Xunta lograron 86 alcald¨ªas mediante su pacto.
"Las coaliciones son habituales en toda Europa, significan cultura democr¨¢tica", reivindica Guillerme V¨¢zquez. Al BNG le dieron grandes alegr¨ªas, como en 1999, cuando repiti¨® a nivel municipal su haza?a de superar al PSOE y lograr as¨ª las alcald¨ªas de Vigo, Pontevedra y Ferrol.
Hoy se dirime si el PP, tras retomar la Xunta, conseguir¨¢ parar la continua p¨¦rdida de votos que experimenta a nivel local desde 2003. Los socialistas buscan continuar con su curva en ascenso y el BNG espera demostrar que su retroceso de 2007 fue anecd¨®tico.
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