Doble emergencia
El PSOE debe cerrar con urgencia y sin batalla la sucesi¨®n para asegurar la estabilidad en Espa?a
El Comit¨¦ Federal del Partido Socialista fijar¨¢ en su reuni¨®n del pr¨®ximo s¨¢bado el calendario de las primarias de las que saldr¨¢ el sucesor de Rodr¨ªguez Zapatero como candidato a las elecciones generales oficialmente previstas para marzo. Seg¨²n matiz¨® el vicesecretario general, Jos¨¦ Blanco, la convocatoria de los comicios internos no significa necesariamente que vayan a tener lugar. Esta observaci¨®n solo puede interpretarse en un sentido: existen voces dentro del partido que desaconsejan una operaci¨®n cuyos beneficios podr¨ªan ser muy escasos en comparaci¨®n con el coste de ofrecer una imagen de divisi¨®n, tras la derrota municipal y auton¨®mica del domingo. Son voces sensatas.
Zapatero sigue siendo el secretario general del Partido Socialista y presidente del Gobierno. Es de sobra conocido que personalizar los ¨¦xitos conlleva el riesgo de tener que hacer otro tanto con los fracasos, y ese es el riesgo que precisamente se materializ¨® el domingo, cuando una parte sustancial del electorado socialista decidi¨® no movilizarse para cerrar el paso al Partido Popular. Desencantado con la gesti¨®n del Gobierno central, el electorado hizo recaer el castigo sobre los candidatos municipales y auton¨®micos, independientemente de los m¨¦ritos o dem¨¦ritos de su gesti¨®n en las plazas respectivas.
La derrota socialista ha sido de una magnitud que pocos confesaban esperar pero que todos tem¨ªan. M¨¢s all¨¢ del debate sobre si la asunci¨®n de responsabilidades queda zanjada con la renuncia de Zapatero a ser cabeza de cartel, los socialistas necesitan con urgencia interiorizar que se encuentran ante una doble emergencia y que ni sus votantes, ni la sociedad en general, est¨¢n dispuestos a abrir un nuevo comp¨¢s de espera hasta que ellos resuelvan sus problemas internos.
Si la situaci¨®n en la que se encuentra Espa?a es cr¨ªtica por la inestabilidad de los mercados financieros internacionales y las crecientes presiones sobre la deuda nacional, la tesitura en la que se ha colocado el partido que sustenta al Gobierno respecto a la sustituci¨®n de Zapatero como candidato no es menos grave. Y no solo por la inestabilidad que esta ¨²ltima supondr¨ªa para la primera.
Abrir unas elecciones primarias en las que presumiblemente dos candidatos, miembros ambos del actual Ejecutivo, se enfrentasen por las agrupaciones socialistas de toda Espa?a supondr¨ªa un riesgo incontrolado y un obst¨¢culo a?adido a la responsabilidad primera del Gobierno, y la raz¨®n ¨²nica que justifica que no se adelanten las elecciones. Esto es, continuar con ah¨ªnco los planes para devolver la estabilidad financiera a este pa¨ªs y proseguir con las reformas sin peligrosas cesuras temporales, as¨ª como asegurar la estabilidad parlamentaria para todo ello. En definitiva, mantener el rumbo en un momento de grave peligro de zozobra.
Si los socialistas creen que la ciudadan¨ªa entender¨ªa otro proceder, entonces es que su desconexi¨®n con la sociedad espa?ola alcanza un grado tal que amenaza con arrebatarles el papel central que siempre han desempe?ado en la pol¨ªtica espa?ola. Cerrar bien, con rapidez y sin heridas la elecci¨®n del candidato resulta imprescindible, adem¨¢s, para que este disponga de tiempo suficiente para construir un discurso y un programa que sirva de cortafuegos ante el incendio del domingo pasado y para aspirar a movilizar a sus votantes (y exvotantes) el a?o que viene.
Jos¨¦ Blanco asegur¨® ayer que el Partido Socialista iniciar¨¢ el proceso para llegar a las elecciones con un nuevo liderazgo y un nuevo programa. Es un reto mayor, no solo para el PSOE, sino para todo el sistema democr¨¢tico. Lo que est¨¢ en juego es la existencia misma de una alternativa y de un contrapoder a lo que se va perfilando poco a poco como una situaci¨®n de hegemon¨ªa del Partido Popular.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero
- Opini¨®n
- Elecciones primarias
- Comit¨¦ Ejecutivo Federal
- Elecciones Auton¨®micas 2011
- Ejecutivas partidos
- Resultados electorales
- Congresos pol¨ªticos
- Presidencia Gobierno
- Organizaci¨®n partidos
- PSOE
- Elecciones auton¨®micas
- Conflictos pol¨ªticos
- Elecciones
- Espa?a
- Partidos pol¨ªticos
- Administraci¨®n Estado
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica