?Un 15-M en el PSPV-PSOE?
Dec¨ªa Jorge Alarte que compart¨ªa la indignaci¨®n de los que se manifiestan como movimiento 15-M. Pues ahora es el momento de que entienda, comparta y escuche la indignaci¨®n de los militantes socialistas, cuyas voces han estado silenciadas por responsabilidad y disciplina.
El PSPV tiene dos crisis: una, evidente como todo el conjunto del PSOE, propiciada por no haber sabido gestionar la situaci¨®n econ¨®mica desde una posici¨®n socialdem¨®crata y no haber impuesto criterios pol¨ªticos a la voracidad mercantil y financiera; debate que el PSOE debe realizar en un congreso extraordinario. Dos, los socialistas valencianos tenemos nuestra propia crisis, de la que no hemos sabido salir desde la p¨¦rdida del poder auton¨®mico en 1995 y ahora nos encontramos en la peor situaci¨®n nunca vivida. No olvidemos que el PSOE ha ganado elecciones y ha gobernado en la mayor¨ªa de Espa?a, pero el PSPV lleva en la oposici¨®n auton¨®mica 16 a?os.
No hemos parado de tocar fondo, y seguiremos cayendo si no intentamos poner remedio
Ha habido voluntad y ambici¨®n de cada secretario general de ser la soluci¨®n al problema, incluido Alarte, pero los hechos demuestran que no hemos parado de tocar fondo, y seguiremos cayendo si no intentamos poner remedio. Porque ahora mismo nuestras debilidades se multiplican: nuestra permanente invisibilidad ante la ciudadan¨ªa se ha convertido en rechazo del voto progresista; no hemos consolidado un liderazgo ni un equipo s¨®lido y formado que lo sustente; hemos desarticulado un programa y un proyecto coherente, hoy es dif¨ªcil que la ciudadan¨ªa reconozca qu¨¦ somos, qu¨¦ defendemos y ad¨®nde vamos; nuestra militancia est¨¢ muy indignada, porque se ha perdido la capacidad organizativa y movilizadora del partido, ignorando la presencia y utilidad de los propios militantes; nuestros concejales se han visto m¨¢s solos que nunca durante estos a?os de gesti¨®n; y se ha hecho una campa?a ocultando al m¨¢ximo las siglas y la identidad del partido, que ha contribuido a ningunear a quienes est¨¢n afiliados en una organizaci¨®n centenaria. Nunca los propios militantes del PSPV se han sentido tan "extra?os" en su propia casa.
Estamos en una situaci¨®n tan indefinida que nos movemos entre la necesidad de ser visibles a la sociedad y de ofrecer a la militancia el orgullo de unas siglas y un partido ganador. Ambas necesidades son complementarias e imprescindibles.
El PSPV parece que no sale nunca de sus luchas internas, conflictos org¨¢nicos, congresos, gestoras... As¨ª estamos 20 a?os, pero llenos de desaciertos m¨¢s que aciertos. ?Qu¨¦ hacer ahora? ?Volver al desconcierto o seguir en la penumbra? Lamentablemente, no hay salida. Seguir as¨ª es seguir cayendo. No hay m¨¢s remedio que asumir responsabilidades, porque el problema no ha sido perder estas elecciones, sino perder m¨¢s que en ninguna otra etapa, desconcertar a nuestros votantes, perder nuestra propia base, indignar a nuestros militantes y desorientar nuestro camino. La ruta del PSPV es paralela a la del PSOE, porque la responsabilidad de esta situaci¨®n no es solo de Alarte, que hoy parece que nadie lo vot¨® en un congreso y que nadie lo respald¨® desde Madrid.
Pero eludir la situaci¨®n del PSPV diciendo que la culpa es de la crisis y de Zapatero, es una frivolidad y una irresponsabilidad. De la misma manera que hoy se responsabiliza a Zapatero del desastre nacional, a Alarte se le responsabiliza desde los Ayuntamientos del desastre municipal.
No queda m¨¢s remedio que ocupar los espacios p¨²blicos de debate del PSPV, realizando sentadas de los militantes indignados, tanto de dentro como de fuera del partido (recuperar a los que han ido desvincul¨¢ndose), para que expliquen qu¨¦ ha fallado. Enrocarse no es una posici¨®n progresista, y adem¨¢s no soluciona el negro futuro.
Ana Noguera es militante del PSPV-PSOE.
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