Manolo Otero, la voz m¨¢s seductora de los setenta

El cantante y actor madrile?o Manolo Otero muri¨® el mi¨¦rcoles, a los 63 a?os, en S?o Paulo, donde resid¨ªa desde hace tiempo. Lo mat¨® un c¨¢ncer de h¨ªgado. En diciembre hab¨ªa perdido a su madre en Espa?a. Fue al regresar, tras el sepelio, a Brasil cuando se descubri¨® que su propia enfermedad era irreversible. Sus restos fueron incinerados ayer en la ciudad de Santos.

Manolo Otero nunca fue una estrella, solamente una estrella fugaz en 1975 cuando grab¨® Todo el tiempo del mundo, tras terminar sus estudios de Filosof¨ªa y Letras en la Universidad Complutense de Madrid.

Tuvo momentos de fama al casarse con la actriz Mar¨ªa Jos¨¦ Cantudo en 1793, la belleza del momento. Se divorci¨® poco despu¨¦s. Pero la fama le lleg¨® a la artista a ra¨ªz de su matrimonio.

Manolo Otero proven¨ªa de familia de artistas, cosa que le ayud¨® a introducirse en el mundillo de la televisi¨®n como ayudante de realizaci¨®n y despu¨¦s como int¨¦rprete en montajes como Los Tarantos, Madre Coraje o La muralla china.

En 1968 compiti¨® con Julio Iglesias en el Festival de Benidorm, donde pas¨® sin pena ni gloria. Sin embargo, algunos cr¨ªticos despistados llegaron a comparar su voz con la de Frank Sinatra. Otros llegaron a afirmar que era tan guapo, o m¨¢s, que Alain Delon. Eso s¨ª, a pesar de su notable ¨¦xito Todo el tiempo del mundo, que lleg¨® a ser n¨²mero uno en las listas de Espa?a e Iberoam¨¦rica, muchos cr¨ªticos declararon sin tapujos que el cantante, m¨¢s que cantar, se dedicaba a "susurrar".

Con ese escaso bagaje decidi¨® cruzar el charco, iniciar una nueva vida sentimental y crear su propia compa?¨ªa con la que recorri¨® Argentina, Brasil y la comunidad hispana de Estados Unidos.

Pero con su ausencia de Espa?a no logr¨® m¨¢s que su olvido en su propia tierra, a pesar de la cantidad de pel¨ªculas olvidables en las que particip¨®, excepto algunas, como Mi querida se?orita, de Jaime de Armi?¨¢n, o Del amor y otras soledades, de Basilio Mart¨ªn Patino.

Otero fue uno de esos artistas que pudo haber sido y no fue, no se sabe si porque ¨¦l no daba para m¨¢s o porque siempre estuvo rodeado de asesores mediocres que se fijaban m¨¢s en su matrimonio con Mar¨ªa Jos¨¦ Cantudo que en sus posibilidades como actor y cantante. Hay muchas historias as¨ª en el mundo del espect¨¢culo espa?ol e internacional. Solo ha dejado un recuerdo de buena voluntad y de buena persona, seg¨²n quienes le conocieron. Pero merece la pena escuchar Todo el tiempo del mundo.