La 'contrarreforma' de Mas tambi¨¦n desregula los pisos tur¨ªsticos

La actual regulaci¨®n de los pisos de uso tur¨ªstico en Catalu?a est¨¢ a punto de acabar en el cubo de la basura. Todo depende de si el Parlament aprueba la ley ¨®mnibus de simplificaci¨®n administrativa que el Gobierno de la Generalitat present¨® el viernes y que estar¨¢ en exposici¨®n p¨²blica por una semana. Este anteproyecto, junto con la Ley de Acompa?amiento de los Presupuestos, son dos herramientas con las que el Ejecutivo de Artur Mas quiere barrer siete a?os de mandato del tripartito. Con ellas, la Generalitat elimina por la puerta de atr¨¢s, entre otras, la Ley de Barrios, la obligaci¨®n de declaraci¨®n de impacto ambiental y limita el acceso a la sanidad p¨²blica a quienes no lleven seis meses empadronados en Catalu?a.

Tambi¨¦n le ha tocado el turno a los pisos de uso tur¨ªsticos y a los apartoteles. La proliferaci¨®n de este tipo de viviendas, as¨ª como los patera, en zonas como el distrito de Ciutat Vella y los problemas de convivencia que generan motiv¨® que dentro de la Ley de Derecho a la Vivienda, aprobada por el tripartito, se reconociera la existencia de estos alojamientos.

Mediante dos decretos se facult¨® a los Ayuntamientos para expedir la licencia para esta actividad y se les obligaba a realizar las inspecciones correspondientes para evitar la ilegalidad y garantizar los derechos de los vecinos, propietarios y usuarios. Sin embargo, el borrador de la ley ¨®mnibus abre la puerta a suavizar los requisitos para operar este tipo de pisos-negocio. Para empezar, elimina de la ley de vivienda el reconocimiento de los pisos tur¨ªsticos (lo reemplaza por la categor¨ªa "vivienda con actividad econ¨®mica") y traslada su definici¨®n a la Ley de Turismo de Catalu?a. All¨ª el redactado no incluye la obligaci¨®n de una autorizaci¨®n expresa del Consistorio para operar como piso tur¨ªstico, sino de una simple "comunicaci¨®n previa de inicio de la actividad ante el Ayuntamiento".

Respecto a los apartoteles, el anteproyecto de reforma elimina de la ley que los regula los art¨ªculos que detallan las condiciones m¨ªnimas que deben reunir los pisos y el principio de unidad de explotaci¨®n, que actualmente solo puede recaer "en una ¨²nica persona".

La Federaci¨®n Catalana de Apartamentos Tur¨ªsticos, Federatur, no estuvo de acuerdo con la legislaci¨®n aprobada por el tripartito, argumentando que las exigencias para conceder las licencias ser¨ªan dispares en los diferentes Ayuntamientos y que no todos los Consistorios tendr¨ªan dinero para realizar las inspecciones que detectaran los pisos tur¨ªsticos ilegales.

Su lobby hizo que la nueva directora general de Turismo de la Generalitat, Marian Muro, se comprometiera poco despu¨¦s de tomar posesi¨®n a revocar las normativas aprobadas en la era de Jos¨¦ Montilla. La modificaci¨®n de la ley ¨®mnibus obligar¨¢ seguramente a cambiar el decreto de vivienda de uso tur¨ªstico y el de alojamiento de uso tur¨ªstico.

La indignaci¨®n por los planes de la Generalitat no se hizo esperar. En un comunicado de prensa, la portavoz y diputada de Iniciativa en el Parlament, Laia Ortiz, asegur¨® que las dos leyes son un ejemplo de "la prepotencia y el autoritarismo" del Ejecutivo de Artur Mas. Para ella, CiU "hace trampa (...) salt¨¢ndose el debate democr¨¢tico que se deber¨ªa hacer en el Parlament" y ret¨® al presidente de la Generalitat para hacer las modificaciones propuestas una a una.

Desde las filas republicanas, el exconsejero Josep Huguet asegur¨® en su Twitter que "bajo la excusa de los recortes CiU hace un reset total de la obra estrat¨¦gica de gobierno pactada con la sociedad civil".

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