Una semana de c¨¢rcel por no pagar 90 euros

A Salvador G¨®mez le cay¨® en 2008 una multa por un altercado con la polic¨ªa nacional el a?o anterior, tras una concentraci¨®n ante la comisar¨ªa de Vigo en apoyo a un grupo de independentistas que hab¨ªan sido detenidos, a su vez, por quemar un mu?eco con la cara del Rey durante una manifestaci¨®n celebrada unas horas antes. La juez apreci¨® una falta y le impuso pagar seis euros diarios durante 15 d¨ªas. En total, 90 euros. G¨®mez, curtido militante y miembro tambi¨¦n del colectivo ecologista A R¨ªa non se Vende, que tiene por objetivo principal la defensa de la r¨ªa de Vigo, acudi¨® al juzgado para preguntar qu¨¦ pasar¨ªa si no abonaba la cantidad. Le dijeron lo que la ley prev¨¦: si no pagaba tendr¨ªa que pasar un d¨ªa en la c¨¢rcel por cada dos de multa.

El fiscal del caso pidi¨® la absoluci¨®n por no encontrar pruebas suficientes

G¨®mez no pag¨®. "Ten¨ªan que haberle notificado los plazos, pero nunca lo hicieron", justifica su hermano ?scar, que insiste en que Salvador jam¨¢s rehus¨® hacer frente a la sanci¨®n. En el juzgado no lo interpretaron as¨ª y a principios de este a?o emplazaron al sancionado a presentarse en el centro penitenciario de A Lama.

"Se le presentaron en casa dos polic¨ªas con la notificaci¨®n", comenta ?scar. La orden lleg¨® tras un intento fallido de localizar a Salvador. "No recibi¨® ninguna comunicaci¨®n, y no cambi¨® de domicilio", opone su hermano, que es consciente de c¨®mo funcionan las notificaciones judiciales: si tras varios intentos no se logra contactar con el interesado, la publicaci¨®n en los edictos surte el mismo efecto en la pr¨¢ctica.

En el colectivo de defensa de la r¨ªa de Vigo y en el entorno de Salvador aseguran que el secretario del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 6 de Vigo, al que Gomes hab¨ªa preguntado a?os antes por sus opciones tras la sentencia condenatoria, entendi¨® err¨®neamente que este se hab¨ªa negado ya entonces a pagar la multa. ?scar asegura que Salvador acudi¨® al juzgado tras la visita policial para intentar aclarar el entuerto, pero sin ¨¦xito. "Yo no lo so?¨¦", aducen que aleg¨® el secretario.

El abogado Xes¨²s Sanxo¨¢s present¨® dos recursos para evitar que la condena se ejecutase, primero ante el propio juzgado y despu¨¦s ante la Audiencia Provincial. En ellos ped¨ªa que su suspendiese la condena, ya que Salvador no ten¨ªa antecedentes, o que se sustituyese la pena de prisi¨®n por la de arresto domiciliario. Ambos recursos fueron rechazados.

G¨®mez entr¨® finalmente en el centro penitenciario de A Lama el pasado s¨¢bado, donde permanecer¨¢ hasta ma?ana. A R¨ªa non se Vende emiti¨® un comunicado de apoyo cargando contra la "maniobra oscura" del secretario del juzgado, que no ha querido hacer comentarios sobre el asunto a EL PA?S. Censuran una medida "enormemente desproporcionada y abusiva" y cargan contra la "ley del embudo" en la pr¨¢ctica judicial. Tanto Duarte Ferr¨ªn, portavoz de la asociaci¨®n, como el propio hermano del encarcelado especulan con que el proceder del secretario obedece a "motivaciones pol¨ªticas e ideol¨®gicas", al tiempo que insisten en que la concentraci¨®n que dio pie a la condena final fue "pac¨ªfica" y que el fiscal responsable del caso hab¨ªa pedido la absoluci¨®n por no encontrar pruebas suficientes para la condena. Sanxo¨¢s no entra en esas disquisiciones, pero se?ala el agravio comparativo con otros casos. "Al de la Fundaci¨®n San Rosendo

[el cura Benigno Moure, condenado por estafar a una anciana impedida mentalmente] le cayeron cinco a?os y a¨²n no ha entrado en prisi¨®n, y este chico por 90 euros va a la c¨¢rcel".