Para el 'cumple', botox de regalo

Una ni?a de tres o cuatro a?os implora a su madre que no le depile las cejas. Otra grita desesperada que no quiere ponerse unos pendientes mientras que en una mano sujeta un chupete. La madre intenta tranquilizarla y que se recupere de la pataleta a la vez que se vuelve a la organizadora del concurso y le asegura que "todo va a estar bien, se los pondr¨¢". Todo esto -y m¨¢s- se puede ver en el programa Toddlers and Tiaras de la cadena por cable TLC.

Los concursos de belleza infantiles en Estados Unidos tienen miles de seguidores y tambi¨¦n los programas de reality shows (como el mencionado) en los que se sigue la vida diaria de ni?as que participan en ellos desde edades tan tempranas como los dos a?os y medio. Los padres justifican la participaci¨®n de sus hijas alegando que les gusta y que refuerza su autoestima. Pero asociaciones de pediatras en diferentes Estados de la Uni¨®n cuestionan el hecho de que se est¨¦ sexualizando a las m¨¢s peque?as desde cada vez m¨¢s tempranas edades.

El caso m¨¢s dram¨¢tico en los ¨²ltimos tiempos levant¨® una inmensa pol¨¦mica en EE UU. Los servicios de protecci¨®n el menor de la ciudad de San Francisco le retiraron la custodia a Kerry Campbell por inyectar botox a Britney, su hija de ocho a?os. "Solo quiero lo mejor para mi hija en la vida, as¨ª que cuanto antes empiece a ser una superestrella mucho mejor", declar¨® la madre. Campbell acudi¨® a todos los programas de las ma?anas televisivas de EE UU mostrando las bondades de que el rostro de su hija estuviera libre de arrugas -y de pelo, las depilaciones en el cuerpo de Britney eran sistem¨¢ticas- desde tan joven. "Es muy afortunada y va a ser famosa por todo lo que le estoy dando desde tan pronto", declar¨® la progenitora. "Cuando sea una estrella y gane muchos millones siempre estar¨¢ agradecida a su madre por lo que hizo por ella".

La pol¨¦mica no qued¨® ah¨ª y la se?ora Campbell declar¨® despu¨¦s haberse inventado parte de sus declaraciones porque el diario sensacionalista brit¨¢nico The Sun le hab¨ªa pagado por ello. El peri¨®dico lo niega y el caso es que la peque?a Britney estuvo un tiempo en manos de los servicios sociales de California.

Sea como fuere, cada d¨ªa son m¨¢s las ni?as que por su cumplea?os ya no piden una mu?eca ni tan siquiera un tel¨¦fono m¨®vil. Las m¨¢s j¨®venes reclaman operaciones de cirug¨ªa est¨¦tica o botox y adoptan modelos de mujeres propios de otras edades.

La industria de la publicidad siempre ha sido reticente a poner normas que la limiten en la aparici¨®n de ni?os y j¨®venes en actitudes sexuales alegando libertad de expresi¨®n. Y, sin embargo, compa?¨ªas de ropa como Abercrombie & Fitch han tenido que soportar boicoteos de la Coalici¨®n Nacional para la Protecci¨®n de los Ni?os y las Familias por anuncios de alto contenido sexual entre los m¨¢s j¨®venes.