Un ej¨¦rcito al rescate de Luis
Un centenar de indignados y afectados por la hipoteca evita en Parla que sea desahuciado un hombre de 74 a?os con un 65% de minusval¨ªa
Luis Dom¨ªnguez Quintana, de 74 a?os, lleva tatuado en el pecho un coraz¨®n con una flechita donde se especifica cu¨¢l es su grupo sanguineo. Lo primero simboliza el amor a una exnovia y lo segundo demuestra que es un hombre pr¨¢ctico. En caso de accidente, un m¨¦dico sabr¨¢ a ciencia cierta que tipo de sangre utilizar. Dom¨ªnguez, en el sof¨¢ de su casa de Parla, se abre el bat¨ªn y ense?a ese dibujo hecho con tinta de marinero. "Aqu¨ª llevo ahora a los cien que han logrado que yo pueda permanecer en mi casa". Se refiere al centenar de personas que, ayer por la ma?ana, lograron paralizar su desahucio con una sonora protesta.
Dom¨ªnguez, con una minusval¨ªa del 65%, lleva dos a?os sin hacer frente al pago de su hipoteca. Estaba previsto que le desalojaran de su vivienda a primera hora. Sin embargo, al grito de "Luis, amigo, el pueblo est¨¢ contigo", los manifestantes, agrupados en la plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid, evitaron que la secretaria judicial y el representante del banco pudieran acceder al edificio.
El banco reclama a Dom¨ªnguez la vivienda y 150.000 euros
Afiliado al PSOE, busc¨® apoyo en los pol¨ªticos pero no lo encontr¨®
El abogado de la plataforma present¨® a las autoridades judiciales unos informes m¨¦dicos con los que se consigui¨® paralizar el alzamiento. "Se solicita un aplazamiento dado el estado de salud en la que se encuentra su representado", se recoge en las diligencias.
El caso de este hombre no es ¨²nico. La crisis ha multiplicado el n¨²mero de desahucios en Espa?a. Ahora, los alzamientos est¨¢n encontrando respuesta en movimientos ciudadanos como este que clama contra la legislaci¨®n hipotecaria. Los manifestantes, organizados por Democracia Real Ya, g¨¦rmen del Movimiento 15-M, piden que la entrega de la vivienda sea suficiente para liquidar el pufo con el banco.
Una vez que los encargados del desahucio desistieron en su empe?o, a Dom¨ªnguez, que vive solo en un piso de 130 metros cuadrados, le tocaron al telefonillo. "?As¨®mate!", le dijeron. Sac¨® la cabeza por la ventana y vio a una multitud que celebraba en el portal la victoria. "Esto es esperanza y no la presidenta", cantaba la gente.
Horas despu¨¦s Dom¨ªnguez abre las puertas de la casa donde al menos va a vivir unos meses m¨¢s. Apoyado en unas muletas, sirve un mejunje a base de agua y lim¨®n inventado por ¨¦l. Es especialista en nutrici¨®n y guarda una estricta dieta que parece que le rejuvenece. Come una sola vez al d¨ªa y se alimenta a base de legumbres, fruta, queso y yogures.
El banco le reclama 150.000 euros adem¨¢s de la devoluci¨®n de la vivienda. Cuenta que sus problemas comenzaron hace tres a?os, cuando sufri¨® un accidente de tr¨¢fico que le afect¨® gravemente a las piernas. A la vez, no cobr¨® dos facturas que suman 60.000 euros a nombre de su empresa de construcci¨®n. Se qued¨® sin dinero y empez¨® a dejar de pagar la hipoteca. Afiliado al PSOE, busc¨® apoyo en los pol¨ªticos pero no lo encontr¨®.
?C¨®mo ha conseguido tanto apoyo entonces? D¨®minguez fue a la Puerta del Sol el s¨¢bado 21 de mayo, durante la jornada de reflexi¨®n. Ver all¨ª a miles de indignados le emocion¨®: "Tom¨¦ conciencia de que hab¨ªa un verdadero sentimiento de cambio". El d¨ªa antes del desahucio fue otra vez al kil¨®metro 0 y cont¨® su caso. De inmediato se organiz¨® un grupo de gente dispuesta a echarle una mano. "Nos hemos juntado una guerrilla sin metralleta que vamos contra el sistema", clama a punto de abrirse una vez m¨¢s el bat¨ªn para ense?ar el tatuaje.
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