La patronal y el sector p¨²blico andaluz
El presidente de la Confederaci¨®n de Empresarios de Andaluc¨ªa, pr¨¢cticamente a coro con otros dirigentes patronales, ha afirmando que "es evidente que hay un sobredimensionamiento de las administraciones p¨²blicas, una superposici¨®n de las administraciones p¨²blicas y un excedente de funcionarios". Una aseveraci¨®n sin mucho fundamento y que me parece que solo responde a sus preferencias ideol¨®gicas y al intento de contribuir con menos impuestos al inter¨¦s colectivo.
Es evidente que no hay una medida objetiva que indique cu¨¢l es el n¨²mero ideal de empleados p¨²blicos, no solo de funcionarios, que debe haber en una sociedad. Pero lo que s¨ª sabemos a ciencia cierta es que las sociedades m¨¢s competitivas y favorables para el bienestar humano son generalmente las que tienen un sector p¨²blico mayor y m¨¢s eficiente. Por eso la ¨²nica forma de poder hablar con propiedad de si su dimensi¨®n es m¨¢s o menos la adecuada es la de compararnos con esas naciones que deber¨ªan servirnos de referencia.
Para ello dar¨¦ algunos datos relativos al periodo 2000-2008 (que es mucho m¨¢s representativo que el de los dos ¨²ltimos a?os de excepcionales condiciones econ¨®micas) recogidos del informe "El empleo p¨²blico en Espa?a no es excesivo. Los errores del informe sobre el coste de la administraci¨®n de la EAE Business School", realizado por Vicen? Navarro, catedr¨¢tico de Pol¨ªticas P¨²blicas de la Universidad Pompeu Fabra y de la John Hopkins University de Estados Unidos, y Marta Tur, coordinadora del Observatorio Social de Espa?a.
Espa?a es uno de los pa¨ªses integrantes de la UE-15 con un sector p¨²blico de menor tama?o. Nuestro porcentaje de poblaci¨®n empleada en ¨¦l sobre el total de poblaci¨®n activa era del 12,75% en 2008, mientras que el de Dinamarca llega al 31,27%, el de Finlandia al 24,64% o el de Suecia al 26,2% en 2007. Y, a diferencia de lo que tambi¨¦n se afirma, el crecimiento del empleo ha sido m¨¢s r¨¢pido en el sector privado que en el p¨²blico.
Es verdad que de 2000 a 2008 el gasto p¨²blico realizado por Espa?a ha aumentado significativamente, con una media del 5% anual que es superior a la de la UE-15 que fue del 3,4%. Pero hay que tener en cuenta que el d¨¦ficit que presenta Espa?a en cuanto a gasto p¨²blico respecto a la UE-15 es muy grande. As¨ª, a pesar de este crecimiento, todav¨ªa tenemos un gasto p¨²blico por habitante de 2.600 euros (estandarizados) menos que el promedio de la UE-15.
Adem¨¢s, Espa?a era en 2008 el pa¨ªs de la UE-15 que menos gastaba en salarios a los trabajadores p¨²blicos y el quinto que menos gastaba en compensaci¨®n salarial a sus empleados p¨²blicos por habitante.
Sobre Andaluc¨ªa lo cierto es que est¨¢ muy ligeramente por encima de la media espa?ola en estos par¨¢metros pero, por tanto, muy alejada tambi¨¦n de los niveles medios y superiores de nuestro entorno europeo m¨¢s ejemplar.
Y tampoco es cierto que en Andaluc¨ªa la tendencia haya sido al crecimiento del n¨²mero de empleados p¨²blicos si la medici¨®n se hace tomando el porcentaje de asalariados en el sector p¨²blico sobre el total de asalariados, puesto que aqu¨ª se registr¨® una disminuci¨®n de 1,30 puntos de 2005 a 2008 y en el conjunto espa?ol de 0,80 puntos.
Por tanto, si nos comparamos con los pa¨ªses europeos m¨¢s ricos y competitivos lo cierto es que no tenemos un sector p¨²blico demasiado grande, como dice la patronal, sino demasiado peque?o y que debemos aumentar nuestro gasto p¨²blico en lugar de reducirlo.
Naturalmente, lo que acabo de se?alar no quiere decir que el sector p¨²blico funcione todo lo bien que debiera (lo que es pr¨¢cticamente imposible gastando insuficientemente en ¨¦l) o que todos los empleados p¨²blicos est¨¦n bien utilizados. Pero eso es una cosa y otra que est¨¦ sobredimensionado, como afirma el se?or Herrero.
Por otro lado, no se puede olvidar que lo que est¨¢ pasando a partir de 2009 es extraordinario y que no es precisamente la iniciativa p¨²blica a quien haya que hacer responsable de ello sino m¨¢s bien a la privada, y particularmente a la financiera. Lo que quiz¨¢ habr¨ªa que preguntarse es c¨®mo estar¨ªamos ahora y d¨®nde habr¨ªan ido muchas m¨¢s empresas de las desaparecidas por culpa de la banca si hubi¨¦semos tenido ya el sector p¨²blico jibarizado que propone las patronales.
En suma, o el presidente de la patronal andaluza est¨¢ muy mal informado o lo que desea es que Andaluc¨ªa se parezca m¨¢s a los pa¨ªses atrasados que a los m¨¢s avanzados que nos rodean.
Juan Torres L¨®pez es catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada de la Universidad de Sevilla.
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