El beso del ¨¢ngel
Narrativa. Como en su d¨ªa afirm¨® Roberto Bola?o, la literatura de Irene Gracia (Madrid, 1956) "es evocadora, salvaje, de grandes ca¨ªdas y de emociones". Con la salvedad de la primera novela, Fiebre para siempre (1994), de corte m¨¢s realista, en las tres restantes (Hijas de la noche en llamas, 1999; Mordake, 2001, y El coleccionista de almas perdidas, 2006) la autora abarca desde los claroscuros m¨ªticos hasta los crep¨²sculos m¨¢s recientes, escenarios en los que Irene Gracia se mueve con la elegancia y la seguridad que proporciona el llevar en su equipaje pertrechos tan s¨®lidos como sugerentes: un plural abanico de referencias culturales -arte, m¨²sica, literatura, danza- que despliega para elevar las historias que nos cuenta por encima del rasero com¨²n, eludiendo el realismo de manual. Ahora, en El beso del ¨¢ngel, a partir de las revelaciones y ensue?os y fantas¨ªas -tan luminosas como atroces- de Th¨¦r¨¨se Fuler, una m¨ªstica visionaria encerrada en el sanatorio psiqui¨¢trico de Saint Sulpice, Irene Gracia fabula sobre la relaci¨®n del hombre con los seres ang¨¦licos a lo largo de la historia del mundo, desde la g¨¦nesis y el esplendor del momento o mandato fundacional hasta la modernidad y la muerte de Dios. Cuatro historias -las de Apolina, Ledo, Dionisio (la m¨¢s destacable de todas, la de este joven que vivi¨® con Leonardo en Florencia) y la propia Th¨¦r¨¨se-, m¨¢s otra que todos ellos comparten -la ininterrumpida metamorfosis de Adanel, el ¨¢ngel sin para¨ªso-, trazan el v¨¦rtigo y la zozobra de esos quiebros del tiempo y, m¨¢s all¨¢ de los grandiosos escenarios y de las criaturas irreales, la narraci¨®n indaga y tantea lo inmutable de la humana condici¨®n: anhelos, deseos, miedos, apetitos, sue?os, derrotas y muerte. Y formula preguntas perturbadoras: "?Acaso Dios merece su poder?".
El beso del ¨¢ngel
Irene Gracia
Siruela. Madrid, 2011
208 p¨¢ginas. 17,95 euros
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.