Croquetas cremosas

Casi todos los enunciados de su carta transmiten diversi¨®n o sugieren desenfado. En la lista, transcritos al pie de la letra, bol de ensaladas y hortalizas de cultivo ecol¨®gico, burrata (queso fresco) aut¨¦ntica tra¨ªda en barco desde Puglia (Italia) dos veces por semana con guarnici¨®n de tomates a la albahaca, lentejas guisadas con chorizo, arroz meloso al estilo de J¨¢vea, sepia a la plancha con salsa t¨¢rtara, costillas de cerdo 100% ib¨¦rico de Extremadura con manzanas asadas, raviolis de carrillera de nuestra abuela Catalina, pescado de la lonja con patatas al estilo de Joseph Arrom y muslos de pollo de pay¨¦s guisados. Y entre los postres, recuit de Fonteta (reques¨®n del Ampurd¨¢n) con miel y nueces, y tartaleta de chocolate con frutos rojos.

Platos reconfortantes, puro confort food de nostalgia mediterr¨¢nea, que los hermanos Torres, Sergio y Javier, que dirigen el prestigioso restaurante Dos Cielos en el ¨¢tico del mismo inmueble, han dise?ado para este local situado en el vest¨ªbulo del hotel Me al que la cadena Meli¨¢ intenta conferir un aire joven. Local de precios ajustados y en la l¨ªnea de las segundas marcas, el consabido pr¨ºt-¨¤-porter al que desde hace tiempo acceden en medio mundo cocineros de relumbre. Hasta tal punto que resulta muy raro que sus facturas superen la barrera de los 30-35 euros por persona.

Por su parte, Luc¨ªa Bos¨¦, responsable del interiorismo, ha rubricado su trabajo con un olivo simb¨®lico, una escultura abstracta que preside el centro de la sala. De ella y de su marido, Carlos Tristancho, gestores del Pa¨ªs de Quercus, procede el jam¨®n ib¨¦rico de la casa, m¨¢s que aceptable. Profesionales con quienes los hermanos Torres sintonizan respecto a la preservaci¨®n del medio ambiente y la conciencia ecol¨®gica.

Recetas de amigos

"En la carta hemos concentrado platos tradicionales que nos gustan, incluidos algunos de amigos y familiares. Recetas populares que interpretamos con criterios contempor¨¢neos", afirma Sergio Torres. Para picar o compartir resulta preceptivo el pan de cristal del obrador Guzm¨¢n con tomate y aceite de oliva virgen extra, un gran bocado. Son reconfortantes las croquetas caseras cremosas, que la carta atribuye al chef Tom¨¢s, una de sus mejores especialidades, y no est¨¢n nada mal los bu?uelos de bacalao, otra fritura lograda. Y como complemento, minitostadas untadas con queso cremoso de la denominaci¨®n de origen Torta del Casar (C¨¢ceres). En el grupo de entrantes, la t¨®nica se mantiene. Es acertada la crema de guisantes del Maresme de color verde menta con huevo pochado, y pasa sin pena ni gloria la ensalada de puerros de Navarra con una salsa romesco mejorable. La coordinaci¨®n y puesta a punto del lugar corre a cargo de un equipo joven m¨¢s que diligente: Mila Acosta en funciones de cocinera jefe, Raquel Ripoll¨¦s como directora de sala y Juan Nieto, responsable del vino, sumiller que gestiona una bodega corta aunque bien estructurada con marcas condicionadas por el factor precio. Entre los segundos, un suquet de pescados de la lonja de Palam¨®s al que le falta cierta chispa y unos canelones caseros gratinados procedentes de una receta familiar que podr¨ªa aligerarse.

Con los postres, el nivel se mantiene. Est¨¢ bien aunque no entusiasme la crema catalana a la naranja y no desilusiona la versi¨®n mini de la tarta tatin con crumble de cinco especias.