Siria paga la factura

La econom¨ªa siria se encuentra en m¨ªnimos despu¨¦s de tres meses de protestas y enfrentamientos que piden el fin del r¨¦gimen de Bachar el Asad. El balance de los corresponsales extranjeros presentes en el pa¨ªs habla de comercios desiertos, carreteras cortadas que impiden el correcto suministro de productos b¨¢sicos, hoteles vac¨ªos y zonas tur¨ªsticas sin visitantes. S¨ªntomas del estancamiento del consumo, de la ca¨ªda de la inversi¨®n extranjera, la escasez de alimentos y la inactividad en los sectores productivos m¨¢s importantes.

El primer afectado ha sido el sector tur¨ªstico que en 2010 ingres¨® 8.000 millones de d¨®lares, lo que le convirti¨® en responsable del 12% del PIB. El a?o pasado llegaron al pa¨ªs nueve millones de visitantes, pero tras los disturbios esta cifra se ha reducido casi a cero. En el caso del comercio, la actividad se ha recortado al menos en un 50%, mientras que la moneda local se ha depreciado un 17% en relaci¨®n con el d¨®lar, demostrando la p¨¦rdida de confianza de los mercados en la econom¨ªa siria. La inflaci¨®n, que el a?o pasado cerr¨® en el 4,4%, tambi¨¦n amenaza con dispararse.

El Ejecutivo prev¨¦ un crecimiento del 2,5% pero el paro ronda ya el 8,4%

Estos datos se suman a los problemas de liquidez a los que se puede ver abocado el Gobierno tras el alza de los subsidios con los que busca calmar el descontento popular. En su reciente plan de reformas econ¨®micas, El Asad anunci¨® que se elevar¨ªan las asignaciones a los combustibles, los sueldos a los funcionarios y que se reducir¨ªan los impuestos de los alimentos. Solo el alza de los salarios p¨²blicos costar¨ªa al Estado un 6% de su presupuesto anual. En total, los analistas locales creen que el d¨¦ficit p¨²blico podr¨ªa rozar el 8% este a?o, desde el 4,3% que registr¨® en 2010.

Pese a ello, el Ejecutivo es optimista y anunci¨® el pasado 9 de junio que Siria cuenta con 18.000 millones de d¨®lares en reservas extranjeras "equivalentes a dos a?os de importaciones" para afrontar los pagos y solventar la crisis. Esto le ha permitido al Estado cancelar una venta de bonos por valor de 21.000 millones porque no estuvo de acuerdo con la tasa exigida por los mercados. Ello a pesar de que los economistas han sugerido que una de las pocas v¨ªas de ingresos que le quedan al Gobierno en estos momentos es, precisamente, la financiaci¨®n internacional.

Este optimismo oficial se basa en los altos precios del petr¨®leo sumados a una excepcional cosecha agr¨ªcola, sus dos principales exportaciones. Tambi¨¦n se ha producido una s¨²bita confianza de los empresarios locales en Siria, que se ha traducido en un aumento del 3,2% de los dep¨®sitos bancarios en la primera quincena de mayo. Este alza compensa en parte los 680 millones de d¨®lares que se retiraron durante el primer trimestre. Con estas cifras, el Ejecutivo mantiene sus previsiones de crecimiento de este a?o en torno al 2,5% mientras que el FMI las eleva hasta el 3,2%.

Pero esta coyuntura no ha logrado evitar la p¨¦rdida de puestos de trabajo en diferentes industrias durante los ¨²ltimos meses. En 2010 el paro lleg¨® al 8,4% pero podr¨ªa dispararse. Los buenos datos de las exportaciones tampoco maquillan los verdaderos problemas de la econom¨ªa siria, basada en un asfixiante control estatal y una corrupci¨®n hist¨®rica que vincula a los principales empresarios, sus compa?¨ªas y sus contratos con la familia gobernante.