M¨¢rquez ya sabe divertirse

Dec¨ªa Marc M¨¢rquez a principio del curso que hab¨ªa algunas cosas de su nueva Suter que todav¨ªa no entend¨ªa, que no le hab¨ªa pillado el punto, acostumbrado como estaba a aquella peque?a Derbi con la que se convirti¨® en campe¨®n del mundo de 125cc el a?o pasado. Para desgracia de sus rivales, ya no tiene m¨¢s secretos escondidos ni la categor¨ªa ni la moto de 600cc. Y M¨¢rquez, 18 a?os, p¨ªcaro y listo como pocos, dice que ahora ya se divierte con esa Suter. "Empiezo a jugar encima de la moto. Ya puedo cambiar una l¨ªnea de la trazada si me apetece o correr para salvaguardar el estado de los neum¨¢ticos. Esto me ayuda tambi¨¦n a gestionar las carreras", confiesa.

M¨¢rquez tropez¨® en su estreno, en Catar; en ocasiones tuvo mala suerte (como cuando fue arrastrado por Cluzel) y en otras se equivoc¨® (como cuando fue ¨¦l quien tir¨® a Redding), hasta que le ha pillado el punto a la moto, como ¨¦l dice. Desde entonces, en Le Mans, donde logr¨® su primera victoria, suma tres triunfos y un segundo puesto, adem¨¢s de un abandono. Y en el a?o en que su objetivo es adaptarse a la categor¨ªa, o eso promulga su entorno, cauto y paciente, asalta el dominio de Stefan Bradl con el segundo puesto en la clasificaci¨®n, aunque a¨²n a 52 puntos. "No le tengo miedo. Al rev¨¦s, me alegro por ¨¦l. Todo el mundo sab¨ªa que es muy r¨¢pido. No estoy sorprendido en absoluto", concede el alem¨¢n, 21 a?os, magn¨ªfico contendiente, pretendido por medio paddock.

Los mec¨¢nicos alucinan con Marc por su madurez y por sus comentarios

Ayer ambos libraron una batalla deliciosa, con Smith y De Angelis como animadores de la fiesta. Ayer, ni siquiera Bradl se atrevi¨® con el catal¨¢n: "No ten¨ªa ninguna posibilidad de adelantarle", apunt¨®. Sin embargo, atrevido, firm¨® la vuelta r¨¢pida de la carrera en el ¨²ltimo giro, como si no se estuviera jugando el t¨ªtulo, y entr¨® a meta a escasas 61 mil¨¦simas de M¨¢rquez. El de Cervera (Lleida) es el ni?o con el que los mec¨¢nicos alucinan, por su madurez, por lo acertados que son siempre sus comentarios, porque es capaz de rodar tan r¨¢pido que sus apuntes para poner la moto a punto son siempre precisos y correctos. Ahora, dicen en su taller, la presi¨®n la tiene Bradl. M¨¢rquez solo tiene que divertirse.

Como har¨¢ Nico Terol cuando se lo permita su "d¨¢til", que as¨ª es como llamaba estos d¨ªas a su maltrecho me?ique de la mano derecha, reci¨¦n operado, hinchado, con ocho puntos de sutura y un aspecto terror¨ªfico. Sin embargo, ni ese dedo lastimado impidi¨® que el de Alcoy se apuntara su quinta victoria del a?o. Doloroso y feliz triunfo: "Cuando me he concentrado en ir fuerte me he dado cuenta de que solo llev¨¢bamos cinco vueltas. He pensado 'a este ritmo, en las frenadas me va a reventar el d¨¢til", contaba jocoso. Se jug¨® la victoria con Johann Zarco, como ya hizo en Catalu?a, aunque esta vez fue ¨¦l el que le adelant¨® en la ¨²ltima curva, sin necesidad de sacar codo alguno. "Se la ten¨ªa guardada", reconoci¨®. Su triunfo, aderezado con otro podio del benjam¨ªn Maverick Vi?ales (el cuarto del a?o, dos primeros incluidos), fue el primero del d¨¦cimo triplete espa?ol para la historia del motociclismo, algo que no se ve¨ªa desde el 5 de septiembre del 2010, en Misano, donde ganaron Pedrosa, El¨ªas y M¨¢rquez. Espa?a suma y sigue.