M¨¢s de un centenar de socios exige la refundaci¨®n de la SGAE

La iniciativa no quiere tener cabeza ni que nadie ejerza de portavoz. Es, seg¨²n uno de los socios de la SGAE firmantes del llamamiento, un impulso para defender la propiedad intelectual. Desde hace dos d¨ªas el texto va de ordenador en ordenador con unas peticiones claras. Una, la convocatoria inmediata de una Asamblea General Extraordinaria en la que los socios puedan debatir las medidas necesarias para encarar la actual situaci¨®n de crisis. Y dos, la formaci¨®n de una Comisi¨®n Rectora Unitaria compuesta por tres representantes de cada una de las candidaturas que han competido en las ¨²ltimas elecciones -CPAC, ganadora y continuista, y DOM, encabezada por Jos¨¦ Miguel Fern¨¢ndez Sastr¨®n-, m¨¢s cinco vocales independientes, uno de los cuales ha de presidir la nueva comisi¨®n.

"No abundemos en la divisi¨®n con una guerra civil entre nosotros"

"Necesitamos una reforma electoral que ampl¨ªe la masa rid¨ªcula de votantes"

El programa de esa Comisi¨®n se centrar¨ªa en la defensa de la profesi¨®n y de la propiedad intelectual; la exigencia de responsabilidades si se comprobaran los hechos delictivos, y la convocatoria de nuevas elecciones con un nuevo reglamento electoral que ampl¨ªe decididamente el censo y contemple listas abiertas y limitaci¨®n de mandato. Es decir, no solo una salida a la crisis actual sino, adem¨¢s, una especie de refundaci¨®n, de cambio en su funcionamiento con esa ampliaci¨®n de votantes -de los m¨¢s de 100.000 socios de la SGAE, solo tienen ese derecho 8.271 y menos a¨²n, unos 1.300, participaron en las ¨²ltimas elecciones- y la concreci¨®n temporal en los ¨®rganos directivos.

Anoche se hab¨ªan adherido m¨¢s de medio centenar de nombres -hoy superar¨¢n el centenar y esperan llegar durante el fin de semana a unos 500 porque sienten que han encontrado el eco adecuado en sus compa?eros -como Francisco Nieva, Pedro Almod¨®var, Alonso de Santos, Josep Mar¨ªa Benet i Jornet, Roberto Bodegas, Juan Diego Botto, Achero Ma?as, Ferm¨ªn Cabal, Fernando Colomo, Antonio Del Real, Cristina del Valle, Gabino Diego, Ana Diosdado, Javier Elorrieta, ?ngel Facio, Jordi Galcer¨¢n, Andr¨¦s Lima, Juan Margallo, Petra Mart¨ªnez, Nancho Novo, David Planell, Cristina Rota, ?lvaro S¨¢enz de Heredia, Daniel S¨¢nchez Ar¨¦valo, Assumpta Serna, Enrique Sim¨®n, Ros¨¢ngeles Valls o Mar¨ªa Velasco.

No quieren demonizar, pero creen que ha llegado el momento de los cambios. En el texto, al que ha tenido acceso EL PA?S, aseguran: "Alarmados ante los lamentables acontecimientos en los que se ha visto envuelta nuestra sociedad y preocupados porque la divisi¨®n de los autores con derecho a voto pueda debilitar a¨²n m¨¢s la posici¨®n de nuestra sociedad frente a los ataques de todo tipo que est¨¢ recibiendo, sugerimos...". Y a continuaci¨®n dan varias pinceladas sobre lo que ocurre actualmente. "No abundemos en la divisi¨®n electoral iniciando una guerra civil entre nosotros. La mejor manera de defender la protecci¨®n de los derechos de Propiedad Intelectual es mantenernos unidos en estos momentos". Por eso insisten: "Es imprescindible colaborar activamente con la justicia para esclarecer los hechos supuestamente delictivos que hayan podido cometer unos desaprensivos, demostrando que no solo no somos c¨®mplices de estos hechos sino que los autores y m¨²sicos somos las v¨ªctimas, los verdaderos perjudicados por estas actuaciones irregulares". Y aseguran, finalmente: "Nuestra sociedad tiene que ponerse al d¨ªa en muchos aspectos. Su relaci¨®n con los ciudadanos espa?oles no puede ser de ordeno y mando, sino de debate democr¨¢tico y convencimiento por la raz¨®n. Tenemos que recuperar la dignidad profesional y para ello es necesaria una refundaci¨®n que facilite la participaci¨®n de los asociados, con una reforma electoral que ampl¨ªe la masa, hoy rid¨ªcula, de votantes y contemple limitaciones precisas en los mandatos para protegernos de la corrupci¨®n". Es decir, un cambio de imagen que deje claro la importancia y la honorabilidad de la labor de la SGAE.

La convocatoria se est¨¢ realizando v¨ªa correo electr¨®nico, exigiendo a los firmantes la devoluci¨®n del email para tener constancia de su nombre y no una simple firma a?adida a un documento de texto. Como asegura uno de sus firmantes, "sentimos que es el momento; no hay pol¨ªticas ni l¨ªderes, solo ganas de luchar".