Pol¨ªtica homeop¨¢tica

Nos sonr¨ªe la fortuna: nos basta con creer. As¨ª tendr¨¢n remedio todos nuestros males econ¨®micos, pol¨ªticos y espirituales. La negra realidad acabar¨¢ cediendo ante el empuje de nuestra devota fe. N¨²?ez Feij¨®o acaba de profetizar que con Mariano Rajoy en La Moncloa se solucionar¨¢ la crisis econ¨®mica. Es de bien nacido ser agradecido. D¨ªas antes, el salv¨ªfico candidato del PP glos¨® las virtudes del presidente gallego y adelant¨® que su programa de gobierno ser¨ªa un spin-off de las pol¨ªticas de Feij¨®o en la Xunta. No sabemos cu¨¢l es el plan de choque de los conservadores para enfrentar la crisis pero, gracias a su Gobierno, somos laboratorio de vanguardia de innovadoras pol¨ªticas homeop¨¢ticas: similia similibus curantur; a saber, lo semejante se cura con lo semejante. La crisis se supera con m¨¢s crisis. En Galicia, con una desoladora crisis social.

Feij¨®o quiere una mayor cohesi¨®n social con una menor inversi¨®n dirigida a los que menos tienen

Miremos para donde miremos, se agrandan los efectos negativos de la crisis econ¨®mica. M¨¢s de 240.000 gallegos suman lunes al sol mientras esperan por in¨¦ditas pol¨ªticas activas de empleo. En abril, el ?ndice General de Producci¨®n Industrial registr¨® un descenso interanual del 7,9%, encadenando ya ocho meses regresivos. La construcci¨®n no ofrece un balance m¨¢s esperanzador y la creaci¨®n de empleo descansa d¨¦bilmente en los servicios. El IGE revela que el 30% de las familias gallegas viven gracias a los ingresos de personas que tienen 65 a?os o m¨¢s a?os: 309.494 hogares dependen econ¨®micamente de las pensiones y las ayudas percibidas por nuestros mayores y solo seis de cada 100 familias tienen como principal fuente de ingresos a alguien con menos de 30 a?os. Miles de mujeres y j¨®venes acampan fuera del mercado de trabajo.

Hablando de soluciones a la crisis, Feij¨®o tiene la vaporosa credibilidad de un profeta desarmado por las evidencias. No obstante, la Agencia Tributaria public¨® pasmosos datos que acuden en su auxilio: Galicia es la quinta Comunidad Aut¨®noma que tiene mayor n¨²mero de ricos. Entre nosotros -es un decir- viven 274 personas que ingresan anualmente m¨¢s de 600.000 euros. Aument¨® tambi¨¦n el censo de gallegos que ingresan m¨¢s de 150.000 euros al a?o; en 2005, antes de la Gran Depresi¨®n, eran 1.941 bienestantes, la Declaraci¨®n de la Renta de 2009 cifr¨® ya 3.326 afortunados. Caritas, en paralelo, advierte que el ¨ªndice de pobreza relativa en Galicia -las personas que tienen ingresos que no superan el 60% del salario medio- se sit¨²a en un 21% y destaca que m¨¢s 580.000 ciudadanos viven por debajo del umbral de la pobreza.

Galicia se empobrece, pero aumenta el n¨²mero de fortunas, un (dudoso) m¨¦rito que debe ser anotado en la brillante hoja de servicios de N¨²?ez Feij¨®o. Su consejero, Agust¨ªn Hern¨¢ndez, con la misma alegr¨ªa que, anta?o, certificaba obras inexistentes, proclam¨® que hab¨ªa que revisar las prioridades de las inversiones auton¨®micas "porque el primer gasto social es la inversi¨®n productiva". Quiz¨¢s no sea precisa la aclaraci¨®n, pero el conselleiro de Medio Ambiente y Obras entiende por inversi¨®n productiva el gasto en cemento y poco m¨¢s. Hern¨¢ndez, devoto neoliberal, aboga por un crecimiento sin inclusi¨®n social.

A nuestro presidente no le agrada tanta sinceridad (Agust¨ªn, estas cosas se piensan, pero no se dicen en p¨²blico). Prefiere ensayar la prestidigitaci¨®n pol¨ªtica: quiere lograr mayor inclusi¨®n y cohesi¨®n social con una menor inversi¨®n p¨²blica en bienes y servicios dirigidos a los ciudadanos que menos tienen y que viven en situaciones de mayor vulnerabilidad y peligro de exclusi¨®n. Es la nueva oferta de N¨²?ez Feij¨®o que los jueves, a la salida del Consello de la Xunta, ejerce como presidente de Galicia y el resto de semana va de gran estadista como Alto Comisionado del PP para adelgazar el Estado del Bienestar.

Como Alto Comisionado, Feij¨®o no cree que las instituciones democr¨¢ticas tengan la obligaci¨®n de prestar mayor protecci¨®n social a los ciudadanos frente a los infortunios del desempleo o la pobreza. Su pol¨ªtica homeop¨¢tica remacha que basta con el mercado, el principal catalizador de las desigualdades, para combatir las desigualdades sociales y, de paso, cancelar el principio activo de toda pol¨ªtica igualitaria que nos recuerda que la calidad de una sociedad debe medirse, no en funci¨®n del bienestar medio de sus miembros, sino atendiendo el de los ciudadanos que padecen mayores d¨¦ficits y suman menores ingresos. En lo que respecta al Estado de Bienestar, con el presidente Feij¨®o solo est¨¢ garantizado que seguir¨¢ aumentando el s¨ªndrome del C¨®dice Calixtino. En Galicia valoramos las cosas en cuando desaparecen o son desaparecidas. Sea un libro, una lengua o la solidaridad.