Salgado ofrece un cr¨¦dito ICO para aliviar las cuentas de las autonom¨ªas

La hegemon¨ªa auton¨®mica del PP ha dado un vuelco a la correlaci¨®n de fuerzas entre el Gobierno central y los auton¨®micos en un momento crucial dada la asfixia financiera de las comunidades. El Ejecutivo vivi¨® ayer con apuros la agitada sesi¨®n del Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera que se reun¨ªa por primera vez desde las elecciones del 22 de mayo. Frente al respaldo que recib¨ªan las propuestas gubernamentales en citas anteriores, el Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda se top¨® con un voto un¨¢nime de las autonom¨ªas -incluida la socialista Andaluc¨ªa- para aplazar la deuda que mantienen estas Administraciones con el Estado. Esa rotundidad oblig¨® a Hacienda a presentar una soluci¨®n que atiende, en parte, las demandas de auxilio.

Lo ¨²nico aprobado sin conflicto fueron las cifras del largo plazo

El rev¨¦s que sufri¨® el Ejecutivo durante cuatro de horas de reuni¨®n super¨® lo esperado. La vicepresidenta y ministra de Econom¨ªa, Elena Salgado, no logr¨® sacar adelante la regla de gasto que hab¨ªa trasladado a las comunidades para contenerlo a largo plazo. "No lo he planteado [someter la regla a votaci¨®n]", se defendi¨® la vicepresidenta, que eludi¨® valorar si el resultado de esta reuni¨®n colmaba sus expectativas.

Para subrayar los avances, Salgado opt¨® por dar la vuelta a lo ocurrido en el Consejo: no se vot¨® el documento de Hacienda, pero s¨ª un compromiso por parte de todas las comunidades de presentar una regla de gasto en sus respectivos Parlamentos en el plazo de seis meses. Una votaci¨®n confusa que la consejera de Hacienda de Castilla y Le¨®n, Pilar del Olmo, lleg¨® a calificar, en nombre de todas las Administraciones del PP, como "churrigueresca".

Con el objetivo de que la regla sea lo m¨¢s homog¨¦nea posible, los consejeros auton¨®micos se reunir¨¢n en septiembre y fijar unos criterios comunes. La tarea no parece sencilla, pues la larga sesi¨®n de ayer no bast¨® para que emergiera un m¨ªnimo consenso sobre c¨®mo ligar el gasto al crecimiento del PIB de forma que resulte sostenible. Pese a la indefinici¨®n en que queda ese esquema, Salgado quiso dejar claro que su modelo es el que envi¨® a las autonom¨ªas: una cifra resultante de la media de los ¨²ltimos a?os m¨¢s las previsiones de los pr¨®ximos.

La principal novedad de lo acordado ayer radica en la soluci¨®n imaginativa que ofreci¨® Salgado a la deuda que tienen que pagar las comunidades por las cantidades percibidas de m¨¢s en 2008 y 2009. La responsable de Hacienda no accedi¨® a la petici¨®n del PP de aplazar el pago de esas cantidades -de cinco a 10 a?os-, pero ofreci¨® una soluci¨®n con efectos parecidos, aunque en principio solo para 2012. Se trata de exigir la devoluci¨®n completa, pero al mismo tiempo ofrecer un cr¨¦dito del ICO (Instituto de Cr¨¦dito Oficial) por la mitad de ese dinero que cada comunidad tiene que reintegrar en tres a?os. Con el cr¨¦dito las comunidades deben pagar a sus proveedores, una de las necesidades m¨¢s acuciantes de estas Administraciones.

Con cifras por delante, esos cr¨¦ditos supondr¨¢n un total de unos 2.500 millones para el a?o pr¨®ximo. Ser¨¢ el Estado el que se endeude para ponerlos a disposici¨®n del ICO y este a su vez lo transferir¨¢ a las autonom¨ªas, con su correspondiente inter¨¦s. "Es una cosa voluntaria y adem¨¢s no constituye una soluci¨®n", se quej¨® la consejera castellanoleonesa.

Salgado enfatiz¨® que los objetivos de d¨¦ficit entre 2012 y 2014 se aprobaron sin votos en contra, aunque con la abstenci¨®n del PP. Es decir, lo ¨²nico aprobado sin conflicto fueron las cifras del largo plazo. Consciente de que la impresi¨®n predominante no era la de concordia, el vicepresidente Manuel Chaves tom¨® la palabra para hablar de "consenso" y alegrarse porque "la sangre no haya llegado al r¨ªo".