Mar¨ªa Wonenburger, menuda gigante
Para los algebristas era una referencia dentro de la pl¨¦yade de prestigiosos nombres de autores que conoc¨ªamos por los libros y trabajos punteros. Aparec¨ªa pr¨®xima a Natham Jacobson (su director de tesis) y a Israel Halperin y, sobre todo, era la directora de la tesis de Robert Moody en la Universidad de Toronto, Canad¨¢. Su apellido, de origen alsaciano, encajaba como de otro cient¨ªfico americano. Muchos a?os despu¨¦s nos dio una pista Federico Gaeta, catedr¨¢tico desterrado a Santiago de Compostela y finalmente exilado a USA hasta su retorno a la c¨¢tedra, junto con Tierno Galv¨¢n y Aranguren.
El profesor Gaeta, que hab¨ªa coincido con Mar¨ªa Wonenburger en la Universidad de Buffalo, comunic¨® que ella viv¨ªa en donde hab¨ªa nacido, en Oleiros, A Coru?a. El sorprendente dato era coherente con la existencia de una familia de ese apellido con tradici¨®n industrial en la capital provincial. Dos profesoras de Matem¨¢ticas de la UDC, Ana Tarr¨ªo y Mar¨ªa Jos¨¦ Souto, contactaron con ella. No solo la trajeron de visita a la universidad sino que su cordial trato les permiti¨® dar a conocer su singular biograf¨ªa. En 2006 las profesoras publicaron un art¨ªculo en el Bolet¨ªn de la Real Sociedad Matem¨¢tica Espa?ola (Resme), Mar¨ªa Josefa Wonenburger Planells. Mujer y matem¨¢tica, en la secci¨®n iniciada en 2004 por otra algebrista, Pilar Bayer. As¨ª desvelaron a la comunidad matem¨¢tica espa?ola la figura de Wonenburger.
Investigar en Matem¨¢ticas en los dif¨ªciles tiempos de la postguerra espa?ola requer¨ªa pasi¨®n por la ciencia y una enorme fortaleza mental y moral para seguir un camino vocacional. Gracias a becas extranjeras se le abrieron las puertas de entrada a universidades y a centros de investigaciones punteros (ley¨® su tesis en la Universidad de Yale en 1957), alcanz¨® la categor¨ªa de Full Professor en la Universidad de Indiana en 1967 y pudo trabajar al lado de matem¨¢ticos de referencia.
En la universidad espa?ola de la ¨¦poca no hab¨ªa sitio para el talento investigador de Mar¨ªa, ni entorno profesional para el "exotismo" de una matem¨¢tica. Todav¨ªa se cumple ahora el centenario del curso en el que, por primera vez, se permiti¨® a la mujeres matricularse en la universidad sin necesidad de, como dec¨ªa la Gaceta de Madrid, "consulta a la superioridad para que ¨¦sta resuelva seg¨²n el caso". Curiosamente, tambi¨¦n acabamos de celebrar el centenario de la Resme, oportuna efem¨¦ride para que el ministro Gabilondo destacase el actual impacto mundial de la matem¨¢tica espa?ola. Lo cual es a¨²n m¨¢s significativo si se conoce que en la ¨¦poca de nacimiento de Mar¨ªa, la American Mathematical Society, ante una carta que les dirige Julio Rey Pastor, manifiesta su sorpresa por la existencia de alg¨²n matem¨¢tico en Espa?a.
Mar¨ªa es una persona espont¨¢nea y sencilla que, con gran sentido del humor, declara tener "tendencia a ser feliz". Es la "madre" de la Teor¨ªa de Kac-Moody, ¨¢lgebras con muchas aplicaciones en F¨ªsica Te¨®rica y en distintos campos de las Matem¨¢ticas. Su menuda figura esconde la importancia de sus aportaciones, esa cualidad de la investigaci¨®n cient¨ªfica que ya en el siglo XII describ¨ªa Bernardo de Chartres, y a la que se remite Newton, al asegurar que "he podido ver m¨¢s lejos porque me he subido a hombros de gigantes".
Pelda?os
Montrove-Oleiros (A Coru?a), 1927.
1945-50. Estudi¨® matem¨¢ticas en la Universidad Central de Madrid.
1953. Beca Fulbright en Estados Unidos.
1957. Doctorado en la Yale University de Estados Unidos.
1960-1983. Profesora de las universidades de Toronto, Bufalo e Indiana.
1983. Se traslada a Oleiros por motivos familiares.
2006. La Xunta de Galicia crea el Premio Mar¨ªa Josefa Wonenburger.
2010. Doctora Honoris Causa por la Universidade de A Coru?a.
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