Nuevas cr¨ªticas a las Grandes V¨ªas
Se reaviva la pol¨¦mica por la remodelaci¨®n de los bulevares de Valencia
La remodelaci¨®n de las grandes v¨ªas de Valencia, concluida hace apenas un mes, ha resultado ser uno de los proyectos m¨¢s pol¨¦micos del Ayuntamiento en los ¨²ltimos a?os. Desde que se presentaron las obras, asociaciones vecinales y entidades en apoyo al ciclismo urbano han criticado la obra por "innecesaria" o "insuficiente". Ahora, la asociaci¨®n de vecinos de Bot¨¤nic abunda en el reproche al Gobierno local y denuncia que parte de los ¨¢rboles que se han plantado sufren una plaga, que las fuentes "de dise?o" que se han instalado sirven de pila a los toxic¨®manos y que hay un bar que ha montado sus mesas en el paso al jard¨ªn.
"Nuestro tramo est¨¢ bien, no lo voy a negar", explicaba ayer Manuel Carles, vicepresidente de la asociaci¨®n del barrio de Bot¨¤nic. "Lo que no tiene sentido son las fuentes esas que han puesto entre el colegio Jes¨²s y Mar¨ªa y la calle de Calixto III, que solo sirven para que los los grafiteros hagan sus pintadas ah¨ª, los otros se laven su ropa... Es que no sirven para nada, ?para qu¨¦ sirven?". A Bot¨¤nic no le disgusta la remodelaci¨®n en s¨ª, sino algunas consecuencias concretas como el asunto de las fuentes. Expertos y dem¨¢s entidades critican sin embargo todo el concepto.
La obra, con fondos del Plan E, ha costado m¨¢s de 4 millones de euros
Desde que empezaran las obras de remodelaci¨®n, a principios de a?o, se han celebrado varias bicifestaciones en las grandes v¨ªas, un vial con forma de cu?a que bordea la cara oeste del centro. Cientos de ciclistas, de manera pac¨ªfica, han reclamado la conversi¨®n de estas v¨ªas r¨¢pidas en calles amables para ellos y los viandantes. Pero no les han hecho demasiado caso. La remodelaci¨®n era cosa del servicio de jardines y la Concejal¨ªa de Tr¨¢fico se desmarc¨® enseguida aduciendo que un carril bici en las grandes v¨ªas resultaba "inviable": ni en el jard¨ªn central (por los continuos cruces); ni a los lados (por los peligros que entra?ar¨ªa el tr¨¢fico para el ciclista). El colectivo Valencia en Bici y gran cantidad de expertos en urbanismo se?alan que estas dificultades t¨¦cnicas son salvables, pero que requieren un cambio de modelo. Joan Olmos, especialista en Urbanismo y profesor de la Universitat de Val¨¨ncia, explicaba por ejemplo que "tal como est¨¢n planteadas, las grandes v¨ªas son de dudosa utilidad para el ciudadano". "Sus bulevares centrales tendr¨ªan sentido si el tr¨¢fico fuese calmado, amable, as¨ª podr¨ªan funcionar como el antiguo cauce del r¨ªo Turia o el paseo mar¨ªtimo", matizaba. Manuel Carles, de Bot¨¤nic, apuntaba ayer algo parecido: "Un carril bici no cabe seg¨²n est¨¢n configuradas las grandes v¨ªas".
Adem¨¢s del carril bici, la pol¨¦mica ha rodeado estos meses las obras por otros motivos. Asociaciones de vecinos como la de Russafa no ve¨ªan pertinente la remodelaci¨®n. No entend¨ªan para qu¨¦ gastarse m¨¢s de cuatro millones de euros (dinero del Plan E) en poner bancos nuevos, cambiar los bordillos o adoquinar los lugares de paso de viandantes. Tambi¨¦n hubo contestaci¨®n vecinal a la intenci¨®n municipal de pavimentar todo el bulevar, hist¨®ricamente de tierra prensada.
Los oposici¨®n pol¨ªtica, por su parte, ha criticado la remodelaci¨®n por insuficiente. La concejal socialista Isabel Dolz declar¨® hace unas semanas que las obras supon¨ªan una "oportunidad perdida" por el asunto del carril bici y que adem¨¢s solo hab¨ªa creado 125 puestos de trabajo. EUPV y Comprom¨ªs, que no estaban en el Ayuntamiento representados cuando empezaron las obras, expresaron su rechazo al proyecto sobre todo por lo mismo: el carril bici y el coste.
Manuel Carles, de Bot¨¤nic, se siente algo decepcionado. "Nosotros nunca hemos pedido ninguna estupidez, jam¨¢s. Solo cosas necesarias". Explica que la asociaci¨®n tiene la sensaci¨®n de que "la sensibilidad del Ayuntamiento ha desaparecido". "Hemos hablado con Ram¨®n Isidro (concejal delegado de Jardines) pero nada". Est¨¢n disgustados. No les gusta la plaga de las moreras entre Calixto III y ?ngel Guimer¨¢ -"los bichos se comen las hojas de tantos que hay"- ni que un bar haya instalado su terraza en el jard¨ªn. "No queremos que empiecen a aparecer y no se pueda pasar", dijo.
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