La Nasa conjura sus fantasmas
Actores vinculados a la sala se despiden con una s¨¢tira sobre el alcalde de Santiago
Fue el ap¨®stol Santiago quien clausur¨® el vodevil tres horas despu¨¦s de su inicio. "Yo es que cuando me indigno, adem¨¢s me cabreo", advirti¨® el evangelizador desde el centro de la Praza da Quintana. La desaparici¨®n del C¨®dice Calixtino de las dependencias catedralicias y "la vida disoluta" del nuevo alcalde de la ciudad no le dejan descansar. "Gerardito, Gerardito...", amenazaba, antes de explicar que si Conde Roa, primer edil de Santiago, ha llegado a Raxoi ha sido ¨²nicamente debido a su intercesi¨®n ante la superioridad divina. Y que la penitencia por sus pecados consisti¨® en vestir el traje gallego tradicional durante la ofrenda del 25 de julio.
Con este desternillante mon¨®logo del dramaturgo Carlos Santiago, trufado de memoria teol¨®gica e irreverencia salvaje, la tropa de la hist¨®rica Sala Nasa cerr¨® la Ultranoite dun so?o de ver¨¢n -desp¨²es hubo canci¨®n de despedida: ya era tarde- y dej¨® en suspenso, la noche del mi¨¦rcoles, el popular cabaret tem¨¢tico que celebraba peri¨®dicamente en su local de Poza de Bar. El cansancio de su direcci¨®n y la campa?a desatada por el ahora regidor de la ciudad, Gerardo Conde Roa (PP), contra la iniciativa de teatro independiente les hicieron arrojar la toalla. Los empleados de la Nasa debaten ahora sobre la posibilidad de metamorfosearse en cooperativa y continuar ofreciendo espacio a cierta cultura alternativa.
700 personas abarrotaron A Quintana y rieron sin interrupci¨®n
La direcci¨®n deja el local de cultura alternativa tras dos d¨¦cadas de actividad
Pero la ultranoite del mi¨¦rcoles conjur¨®, al menos moment¨¢neamente, los fantasmas. Rojo y Gualda -el director de la Nasa, Xes¨²s Ron, y el actor Miguel de Lira-, dos conseguidores exiliados en Valencia y Murcia durante la legislatura bipartita y "biling¨¹es cerrados", condujeron el carrusel de variedades y fueron presentando los participantes a las 700 personas que abarrotaron las escaleras de A Quintana. Estas lo hicieron previo pago de ocho euros, ya que, a diferencia del pasado a?o, el Festival Feito a Man, organizado por la asociaci¨®n cultural Cidade Vella, no ha contado con el apoyo municipal. Apenas el permiso para vallar una parte de la plaza y cobrar entrada.
Y eso que el c¨¦lebre Carlos Blanco finaliz¨® su intervenci¨®n en la velada con un recado para Conde Roa: "Le deseo la mejor de las gestiones posibles en el Ayuntamiento, le deseo incluso que gestione mejor el Ayuntamiento que sus propias empresas". Las ¨²ltimas noticias al respecto, publicadas en este peri¨®dico, apuntaban que la promotora inmobiliaria del alcalde de Santiago hab¨ªa recibido en un a?o 18 embargos por incumplir sus obligaciones fiscales con el Estado. Sin embargo, Blanco, segundo Rojo y Gualda "el sobrino enchufado de Pepi?o Blanco en esta gala", no se centr¨® en Conde Roa, sino en los "papaflautas". "Son much¨ªsimos, est¨¢n ahora en Madrid". Se refer¨ªa a los participantes en la denominada Jornada Mundial de la Juventud de recepci¨®n del Papa Ratzinger en Madrid.
Porque, adem¨¢s del nuevo regidor compostelano, la otra gran diana de los dardos esc¨¦nicos fue la Iglesia. Como instituci¨®n y como relato. Tom¨¢s Lij¨®, quien tambi¨¦n compareci¨® con Os da R¨ªa -el d¨²o mel¨®dico que mantiene con Carlos Meijide-, retrat¨® en una coreograf¨ªa junto a Pepa Y¨¢?ez la sustracci¨®n del C¨®dice. Manolo Cort¨¦s, que encarn¨® a Mariano Rajoy con discrecci¨®n y al Rey y a Anxo Quintana con recochineo y brillantez, llev¨® a sus personajes a intentar evacuar en la Puerta Santa. "Este chico nuevo que ha entrado en Galicia", dec¨ªa el remedo de Su Majestad en referencia a N¨²?ez Feij¨®o, "simp¨¢tico es, pero liante...". Todo ante las carcajadas generales de la audiencia, casi ininterrumpidas a lo largo de las tres horas del espect¨¢culo.
Por entre la parodia y la s¨¢tira m¨¢s directamente enraizada en la realidad seg¨²n la cuentan los peri¨®dicos, la ultranoite ofreci¨® sus habituales n¨²meros musicales. Patricia de Lorenzo transform¨® Fever en Crise; Chiqui y Paula, de la compa?¨ªa Berrobamb¨¢n, ironizaron sobre el localismo e Iria Pi?eiro hizo lo propio alrededor del peregrino ofrecimiento municipal de la Cidade da Cultura para albergar la Copa Davis de tenis. Ant¨®n Coucheiro se burl¨® del mentalismo. Y Ch¨¦vere, la compa?¨ªa teatral que orbitaba en torno a la Sala Nasa, mostr¨® otro de los puntos ¨¢lgidos de la noche de verano: su versi¨®n de Shakespeare radiada, en plan partido de f¨²tbol, por un Manolo Cort¨¦s al que le asist¨ªa De Lira interpretando a Arsenio Iglesias.
Entonces se person¨® el ap¨®stol (Carlos) Santiago. Aunque debi¨® apurar su contundente perorata -la Polic¨ªa Local no apart¨® su coche con luces encendidas de A Quintana ni cinco minutos - a juzgar por el volumen y frecuencia de las risas, se qued¨® con el respetable. Despu¨¦s se cant¨® el adi¨®s y los actores colocaron un aviso impl¨ªcito: aunque sea en las calles, quieren que las ultranoites contin¨²en.
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