Una noche de j¨²bilo y disparos

Fue una noche decisiva. Coordinados en el tiempo, el inesperado levantamiento en Tr¨ªpoli, el r¨¢pido avance de los rebeldes desde el oeste, el desembarco de tropas procedentes de Misrata (al este de la capital) y el bombardeo de la OTAN sorprendieron a los leales al l¨ªder libio, Muamar el Gadafi.

? 17.00 horas. La OTAN bombarde¨® la residencia del coronel Gadafi en el centro de la capital de Libia el pasado domingo. Apenas 15 minutos despu¨¦s, un activista inform¨® a Reuters del desembarco en los alrededores de Tr¨ªpoli de 200 rebeldes de Misrata. Al mismo tiempo, se suced¨ªan las batallas en el barrio tripolitano de Tajura. Y hacia las puertas de la capital se dirig¨ªan miles de opositores a Gadafi.

"Temo que Tr¨ªpoli va a arder", anunci¨® entonces el dictador libio en una grabaci¨®n de voz emitida por la televisi¨®n estatal. Y no se equivocaba. Gadafi a?adi¨® que dotar¨ªa de armas a los suyos y que se quedar¨ªa hasta el final. Se vio acorralado.

? 20.30. Los grupos rebeldes estaban a 25 kil¨®metros de Tr¨ªpoli al grito de "libertad, libertad" y "vamos a por ¨¦l", seg¨²n un corresponsal de Reuters. Por el camino, los opositores a Gadafi hab¨ªan tomado la base militar de Jamis. Liberaron a m¨¢s de 5.000 presos y saquearon las armer¨ªas. Con disparos al aire agradecieron a Al¨¢ las nuevas armas. Animados, los rebeldes se dirigieron a la ciudad que quer¨ªan "liberar" desde hace seis meses... Tr¨ªpoli. Los bombardeos de la OTAN les abr¨ªan el camino.

? 23 horas. El primer convoy entr¨® en la capital. Se intensificaron los disparos. Sin embargo, a pesar de que los leales hab¨ªan levantado barricadas en algunas calles, los rebeldes encontraron poca resistencia. Pronto encontraron apoyos en los barrios de Tajura y Fashlum. El recibimiento en muchos distritos fue de cl¨¢xones y gritos de alegr¨ªa. Los tripolitanos se enviaban mensajes de texto con la buena noticia.

Una hora m¨¢s tarde fue capturado Saif el Islam, hijo de Gadafi sobre el que pesa una orden de arresto de la Corte Penal Internacional. Y a los pocos minutos respondi¨® su padre. En otro discurso televisado, Gadafi pidi¨® ayuda a todo el pa¨ªs para defender Tr¨ªpoli de "los nuevos colonialistas". La llamada iba dirigida a las tribus que le son leales.

Musa Ibrahim, portavoz del Gobierno libio, anunci¨® la muerte de m¨¢s de 1.300 personas en 12 horas. Ibrahim habl¨® de una "masacre" que las fuerzas de seguridad conseguir¨ªan detener.

? 0.3o. Gadafi volvi¨® a tener malas noticias. Su hijo Saadi, exjugador de f¨²tbol y empresario, fue capturado por los rebeldes. Una hora m¨¢s tarde, el hijo mayor del coronel, Mohamed, se entregaba y era entrevistado por la cadena catar¨ª Al Yazira. Su intervenci¨®n tuvo que ser interrumpida en dos ocasiones por disparos y explosiones. La familia del dictador estaba acorralada.

? Madrugada. Las celebraciones ganaron Tr¨ªpoli. Los rebeldes, llenos de j¨²bilo, alcanzaron la c¨¦ntrica y simb¨®lica Plaza Verde, lugar de reuni¨®n de los leales a Gadafi. No tardaron en rebautizar el espacio: la Plaza de los M¨¢rtires. Retratos destrozados del dictador, disparos al aire y gritos de alegr¨ªa, los combatientes estaban fuera de s¨ª. Pero no bajaban la guardia, entre ellos se avisaban de la presencia de francotiradores de Gadafi.

Los rebeldes rompieron el aislamiento de la Red. Los ciudadanos de la capital recuperaron Internet, despu¨¦s de que fuera bloqueada durante los ¨²ltimos seis meses por el r¨¦gimen.

Los opositores a Gadafi controlaban ya, a primera hora de la ma?ana de ayer, casi toda la ciudad. Al amanecer, un nuevo objetivo: la residencia del dictador.