"No hay coraje pol¨ªtico para enfrentarse a los mercados"
Hace una d¨¦cada que Bernard Cassen (Par¨ªs, 1937), uno de los l¨ªderes mundiales del altermundismo, ex director de Le Monde Diplomatique y fundador de la Asociaci¨®n por la Tasaci¨®n de las Transacciones Financieras y por la Ayuda a los Ciudadanos (ATTAC) en Francia, acu?¨® el lema Otro mundo es posible. Todav¨ªa lo sigue pensando, pero insiste en la necesidad de tener pol¨ªticos "con coraje" que se planten ante los mercados. Cassen, que asiste estos d¨ªas al Rototom de Benic¨¤ssim, cree en la necesidad de cancelar parte de la deuda de los pa¨ªses y prev¨¦ que los j¨®venes pasar¨¢n de la indignaci¨®n a la rebeli¨®n.
Pregunta. ?En qu¨¦ momento perdieron los gobiernos su capacidad de decisi¨®n frente a los mercados?
"No hay diferencia entre lo que hace Zapatero y lo que har¨ªa el PP"
"Creo que los j¨®venes van a pasar de la indignaci¨®n a la revuelta"
Respuesta. Fueron los gobiernos los que organizaron la globalizaci¨®n y fijaron las reglas: la liberalizaci¨®n de capital, la libertad de inversiones y el libre comercio de mercanc¨ªas y servicios. El viraje se produjo hace 30 a?os, en la ¨¦poca de Margaret Thatcher en Inglaterra; pero el mayor cambio se dio con el Acta ?nica Europea de 1986. Entonces capitularon y ahora han perdido todas las herramientas de control. Es como un avi¨®n en el que la tripulaci¨®n ha perdido el control.
P. ?Se puede revertir la situaci¨®n?
R. Se necesita una ruptura real, no peque?os ajustes. Hay que establecer un control sobre la econom¨ªa y las finanzas. Pero ning¨²n gobierno est¨¢ dispuesto a llevar a cabo una para la que se necesita coraje pol¨ªtico porque abre un periodo de confrontaci¨®n sin que el ¨¦xito est¨¦ garantizado. Pero con las normas actuales lo ¨²nico que est¨¢ garantizado es la cat¨¢strofe.
P. Es poco optimista...
R. Soy un optimista natural. En la actualidad, incluso gobiernos de derecha y la Comisi¨®n Europea est¨¢n dispuestos a proponer, que no a imponer, una tasa sobre las transacciones financieras. El hecho de que se levante esta bandera es al menos un s¨ªntoma de que se debe hacer algo.
P. ?Qu¨¦ opina del Gobierno espa?ol?
R. Ha capitulado. No hay ninguna diferencia entre las medidas que ha tomado Zapatero y las que tomar¨ªa el PP. Pero hay que entender que es dif¨ªcil para una potencia media como Espa?a estar en la vanguardia. Pero si un pa¨ªs abre el camino, detr¨¢s tendr¨¢ mucho apoyo.
P. ?La compra de deuda por parte del Banco Central Europeo puede tranquilizar a los mercados?
R. De ninguna manera. Los mercados financieros siempre exigen m¨¢s, tienen hambre todo el tiempo. La compra de deuda espa?ola es una soluci¨®n a muy corto plazo. Espa?a no est¨¢ en una situaci¨®n tan complicada de deuda p¨²blica, pero la privada es tremenda y se convertir¨¢ r¨¢pidamente en p¨²blica. Esas deudas son insostenibles. El Banco Central Europeo debe prestar dinero al mismo inter¨¦s que pide a los bancos privados. Es escandaloso que lo reciban al 1% y hagan pr¨¦stamos al 5%. Es una estafa y un esc¨¢ndalo. El problema es saber qui¨¦n va a pagar las consecuencias: los bancos o los ciudadanos. Y parece claro que ser¨¢n estos ¨²ltimos porque las entidades financieras no aceptan ninguna reestructuraci¨®n. Y sin cancelaci¨®n parcial de la deuda p¨²blica no habr¨¢ ninguna soluci¨®n.
P. ?Apoya las medidas de austeridad aprobadas en Espa?a?
R. Claro que no. Es lo que hizo el gobierno ingl¨¦s con los resultados que se han visto. Existe, en parte, un sentimiento de injusticia en todo el pa¨ªs y todo eso puede estallar sin que se pueda saber d¨®nde y cu¨¢ndo, pero ya hay condiciones prerrevolucionarias y de eso tienen miedo los gobiernos. No hay garant¨ªa de nada, es un futuro abierto.
P. ?Qu¨¦ pasar¨¢ si los gobiernos no pueden pagar sus deudas?
R. Hay varios escenarios. La reestructuraci¨®n puede ser organizada por los propios bancos en su propio beneficio. O pueden ser los gobiernos progresistas (que ahora no hay) los que organicen la salida en detrimento de los mercados financieros con medidas como la supresi¨®n de los flujos con para¨ªsos fiscales o la lucha contra fraude fiscal. Y hay que optar entre bajar gastos o aumentar los recursos. Ahora se se reducen gastos en detrimento de los servicios p¨²blicos. Pero hay otro camino: Aumentar los recursos v¨ªa tributaria y hacer pagar a los que tienen dinero. El dinero existe y hay que sacarlo de donde est¨¢, el problema es simple pero la soluci¨®n m¨¢s complicada.
P. ?No llega un poco tarde el despertar del movimiento social?
R. No. Llega cuando puede llegar. Pero es interesante que la gente se pregunte porqu¨¦ votar cuando se enfrenta a un sistema bipartidista en el que PSOE y PP son iguales. El problema del movimiento social es que, en un momento dado, debe desembocar en una traducci¨®n pol¨ªtica que, en la actualidad, acaba dentro de un sistema bipartidista. ?se es el desaf¨ªo y no tengo la soluci¨®n.
P. ?Qu¨¦ futuro les espera a los j¨®venes? ?Otro mundo sigue siendo posible?
R. Creo que van a pasar de la indignaci¨®n a la revuelta. El futuro a corto plazo es imposible de prever. Antes del 16 de diciembre nadie hubiera pensado en T¨²nez que la inmolaci¨®n de un joven iba a conducir a la ca¨ªda de Ben Al¨ª, y ocurri¨® antes con la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn. Hay que estar preparado ante cualquier eventualidad.
P. Alemania y Francia han retomado la idea de implantar la tasa Tobin en la zona Euro pero no han tardado en salir voces en contra.
R. Eso es la excusa para no hacerlo. Te dicen que es una buena idea pero que debe generalizarse a todo el mundo. Si se hace en un pa¨ªs, claro que habr¨¢ fuga de capitales, pero hay m¨¦todos de control para evitarlo. Si hay voluntad habr¨¢ soluci¨®n pol¨ªtica.
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