Euskadi se abre a la convivencia con dudas

"La convivencia pac¨ªfica en Euskadi no es posible mientras el le¨®n ande suelto. Bien es cierto que el le¨®n no est¨¢ ahora en el centro de la plaza. Est¨¢ en un rinc¨®n, agazapado a la sombra de los soportales, pero, aunque no se le vea, conserva sus colmillos y sus zarpas. No nos enga?emos: la paz es un resultado, no una premisa". Ma?ana se cumpla un a?o del anuncio por ETA, a trav¨¦s de un video enviado a la BBC, de que declaraba el alto el fuego que todav¨ªa mantiene, y el escritor Fernando Aramburu, quien en libros como Los peces de la amargura y El vigilante del fiordo ha diseccionado toda la crudeza de la violencia etarra, remarca con aquellas palabras que la convivencia es imposible mientras la banda exista.

"El problema es la pervivencia del odio", sostiene una concejal popular

Pero 365 d¨ªas despu¨¦s de aquel anuncio, la agenda de cuestiones pendientes en Euskadi va anotando algunos otros asuntos hasta ahora impensables. Uno de ellos es el de la concordia c¨ªvica cuando ETA anuncie su final. El lehendakari, Patxi L¨®pez, presentar¨¢ el pr¨®ximo 29 de septiembre ante el Parlamento vasco, en el marco del pleno de pol¨ªtica general, su iniciativa por la paz y la convivencia que los socialistas vienen preparando durante los ¨²ltimos meses.

Las l¨ªneas maestras de este plan pivotar¨¢n sobre la conservaci¨®n de la memoria de las v¨ªctimas, la educaci¨®n en valores y la presi¨®n a los radicales para que exijan el final definitivo y sin condiciones de la banda. A ello se a?ade el esfuerzo para evitar que sea la izquierda abertzale la que capitalice el m¨¦rito de la pacificaci¨®n, cuando la derrota de ETA, como el propio L¨®pez o el consejero del Interior, Rodolfo Ares, vienen insistiendo en las ¨²ltimas fechas, es solo un m¨¦rito del conjunto de los dem¨®cratas y de la fortaleza del Estado de derecho.

Juana Bengoechea, una de los cinco ediles del PP en Ir¨²n, afirma que, aunque no conoce al detalle el documento que presentar¨¢ el lehendakari en la C¨¢mara, es esc¨¦ptica sobre su validez desde un punto de vista pr¨¢ctico. "Los protagonistas de la convivencia son los ciudadanos, no los pol¨ªticos", apunta a EL PA?S. Y es que, para Bengoechea, ya se convive en Euskadi. "El problema es la pervivencia del odio", sostiene. "Para que este desaparezca hacen falta nuevas generaciones de mente m¨¢s abierta. En un mundo global, este tipo de odio ir¨¢ languideciendo y acabar¨¢ por disolverse. Con la democracia y la educaci¨®n hay que conseguir que esos odios se relativicen y se conviertan en simples man¨ªas", apostilla la concejal.

[El presidente del PNV de Bizkaia, Andoni Ortuzar, descalifica al lehendakari por no haber tenido la suficiente "valent¨ªa" para liderar el proceso de paz. Ortuzar interpreta en una entrevista difundida ayer por Efe que el plan de paz y convivencia que L¨®pez llevar¨¢ a la C¨¢mara supone solo una manera de engancharse a ese proceso despu¨¦s de haberlo vivido "descolocado y en fuera de juego].

En todo este camino se cruzan los gestos hacia los presos de ETA y sus familiares que han prodigado en fechas recientes dirigentes de Bildu o declaraciones como las ¨²ltimas del diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, quien afirm¨® que los atentados de ETA en Catalu?a eran "m¨¢s que un error", sin hacer referencia a los cometidos en otros lugares de Espa?a y de Francia.

Alberto L¨®pez Basaguren, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional de la UPV, opina que los representantes institucionales de Bildu dan muestras de que, quiz¨¢ por el ¨¦xito electoral que tuvieron el pasado 22 de mayo, "no han asimilado de forma suficiente las decisiones a las que les ha llevado el pragmatismo". "Quienes votaron a Bildu pensando que favorec¨ªan la paz quiz¨¢s han provocado el efecto contrario", asevera.Sin duda, la legalizaci¨®n de Bildu y su ¨¦xito en las urnas de mayo supone la principal novedad pol¨ªtica en este a?o que ma?ana se cumple tras el comunicado etarra. Para Txelui Moreno, uno de los hoy portavoces habituales de izquierda abertzale ilegalizada, la concordia c¨ªvica se halla al alcance de la mano, aunque resalta que no se conseguir¨¢ con las "humillaciones" a los presos etarras o las "amenazas" que asegura que est¨¢n recibiendo ediles de la coalici¨®n soberanista, como Ana Carrere, alcaldesa de Andoain.

Carrere anunci¨® a comienzos de agosto que iba a presentar una denuncia tras recibir cartas con amenazas de muerte en que se calificaba a los miembros de su equipo de gobierno de "alima?as llenas de odio que hay que exterminar". Tanto el PSE como el PP en el municipio condenaron con claridad esos hechos.

En opini¨®n de este catedr¨¢tico, para avanzar en la convivencia debe exigirse a Batasuna su desconexi¨®n absoluta con ETA, y que afronte la "barbarie" que ha cometido junto a la banda: "La izquierda abertzale ha protegido y pretende seguir protegiendo a los asesinos. Esa es una diferencia que no puede taparse tras el discurso de 'todas las violencias", incide.

"Si existe voluntad y se act¨²a con honestidad, la convivencia es posible", mantiene Moreno en declaraciones a este peri¨®dico. El portavoz abertzale aboga por "corregir y aprender" de las experiencias vividas, pero mirar hacia el futuro. Recuerda que los firmantes del Acuerdo de Gernika -la izquierda abertzale heredera de la ilegalizada Batasuna, EA, Alternatiba, Aralar y casi 30 organizaciones sociales- ya recogieron en ese texto la necesidad de "reparar a las v¨ªctimas" y pide sacar este asunto del debate.

Dicho texto se suscribi¨® solo 20 d¨ªas despu¨¦s del comunicado etarra. En ¨¦l se ped¨ªa a la banda un "alto el fuego permanente" y al Gobierno, entre otras cosas, que se implicase en un proceso de di¨¢logo y negociaci¨®n pol¨ªtica. El 10 de enero pasado, por medio de otro v¨ªdeo, ETA comunicaba que el alto el fuego era "permanente, de car¨¢cter general y verificable internacionalmente"¡¤

"?Qu¨¦ ganar¨ªa exigiendo al PSOE que pida perd¨®n por todo el sufrimiento causado a las familias de los presos?", se cuestiona Moreno, quien considera que los pol¨ªticos deben abandonar "posturas maximalistas". Explica esta tesis diciendo que otros procesos de paz desarrollados a lo largo de todo el mundo muestran que la clave se encuentra en generar complicidades entre todos los agentes sociales. "Van a ser necesarias muchas dosis de di¨¢logo para poder llegar a la reconciliaci¨®n. La izquierda abertzale est¨¢ comprometida con la b¨²squeda de la paz", sentencia.

"?Qu¨¦ persigue el Gobierno cuando no quiere verificar algo que todo el mundo est¨¢ verificando? Aqu¨ª nadie duda que el alto el fuego se est¨¢ cumpliendo a rajatabla y que ETA ha adquirido compromisos para la paz", se queja Moreno sobre la actitud del Ejecutivo de Zapatero en este a?o.

Desde la declaraci¨®n etarra del 10 de enero, un total de 52 personas han sido detenidas por su relaci¨®n con ETA en Espa?a, Francia, M¨¦xico, Venezuela y el Reino Unido. Entre ellos figuran, por ejemplo, los miembros de uno de los comandos m¨¢s activos de los ¨²ltimos a?os, autor del asesinato del inspector Eduardo Puelles, ¨²ltima v¨ªctima mortal de la banda en Euskadi, o su jefe militar capturado m¨¢s recientemente, Alejandro Zobar¨¢n, Xarla, arrestado con otros tres etarras en Francia el 10 de marzo, apenas nueve d¨ªas despu¨¦s de la anterioor operaci¨®n.

Adem¨¢s de la paz, las v¨ªctimas de la banda desean que no se pase p¨¢gina como si nada hubiera ocurrido y que el relato de la memoria de d¨¦cadas de terrorismo sea veraz. "Primero, a trav¨¦s de cada persona que sufri¨® las consecuencias de la violencia y el terrorismo. Segundo, mediante el asentamiento de un relato compartido que no admita justificaciones", recalca la directora de la Oficina de Atenci¨®n a las V¨ªctimas, Maixabel Lasa. Y apunta que observa cierto "hast¨ªo" entre las v¨ªctimas con respecto a los homenajes oficiales que se les tributan. Recuerda que la institucionalizaci¨®n del D¨ªa de la Memoria cada 10 de noviembre ten¨ªa, entre otras finalidades, la de reconducir estos actos a un solo d¨ªa.

Para Juana Bengoechea, la reconciliaci¨®n es una actitud individual entre el que ha sufrido y el que ha hecho sufrir. Con arrepentimiento, con el reconocimiento del da?o causado, con la petici¨®n de perd¨®n, expone, una v¨ªctima podr¨ªa reconciliarse con su verdugo. Y a?ade que la reconciliaci¨®n no puede entenderse como un fen¨®meno social: "La democracia no puede reconciliarse con el terror, la inocencia no puede reconciliarse con el crimen. ?Los jud¨ªos, como sociedad, debieran reconciliarse con los nazis?".

Fernando Aramburu aboga por el estudio exhaustivo y por la extracci¨®n de conclusiones pedag¨®gicas para que los ciudadanos no ignoren las consecuencias "atroces" del uso de la violencia. Y concluye: "Nada de condiciones para la convivencia. Gestos, obras, hechos y, sobre todo, humildad. El 7 de diciembre de 1970, el canciller federal Willy Brandt tuvo el coraje de arrodillarse en nombre de Alemania ante el monumento a los h¨¦roes del gueto de Varsovia. El d¨ªa que vea algo semejante en un miembro destacado de la izquierda abertzale empezar¨¦ a creer que todo lo que estamos viviendo ¨²ltimamente no es estrategia ni tejemaneje".