Al Qaeda se ahoga en su propia sangre
Tras la muerte de Bin Laden, la organizaci¨®n ha perdido a sus jefes militares y su futuro es incierto
Al Qaeda se ahoga en su propia sangre, est¨¢ herida, pero nadie sabe si todav¨ªa tiene fuerzas para superar su agon¨ªa y regenerarse. Diez a?os despu¨¦s del 11-S, el mundo es m¨¢s seguro que antes, pero con matices: "M¨¢s seguro quiere decir que sigue siendo posible perpetrar ataques como los del 11-S o incluso otros de mayor envergadura, pero hoy a los terroristas les resulta m¨¢s dif¨ªcil organizar, financiar y cometer sus cr¨ªmenes", asegura un portavoz del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), uno de los servicios que colabora de forma m¨¢s intensa y estrecha con la CIA en la lucha contra la yihad global.
?C¨®mo ser¨¢ el mundo sin Bin Laden y con la mayor¨ªa de sus jefes militares muertos? "Tras la muerte de Osama, el centro de gravedad de la yihad global crecer¨¢ significativamente hacia sus afiliados. Al Qaeda en Yemen y Al Qaeda en la pen¨ªnsula Ar¨¢biga suponen una amenaza mayor para Occidente que Al Qaeda central", asegura Assaf Moghadam, investigador del Instituto Internacional sobre Contraterrorismo Herzliya (ICT) en Israel. "Los ataques espectaculares como el 11-S ser¨¢n m¨¢s improbables porque requieren un prolongado esfuerzo de organizaci¨®n que en las actuales circunstancias es m¨¢s dif¨ªcil de llevar a cabo", aventura. "Seguir¨¢ siendo una organizaci¨®n peque?a y peligrosa", apostilla el cingal¨¦s Rohan Gunaratna, director del ¨¢rea de terrorismo del Instituto de Estudios Estrat¨¦gicos de Singapur.
"La yihad global crecer¨¢ entre sus afiliados. Ser¨¢n mayor amenaza"
"Hay divisiones: atacar a Occidente o a los ap¨®statas de Oriente Pr¨®ximo"
Su gran reto pendiente es el uso de armas qu¨ªmicas y radiol¨®gicas
Zawahiri: "No es tan d¨ªf¨ªcil. Se puede comprar la maleta bomba en Asia"
Al Qaeda atraviesa por la crisis m¨¢s grave de su historia. La aniquilaci¨®n de Osama bin Laden, de 54 a?os, en su c¨®modo refugio paquistan¨ª de Abbottabad acab¨® con su mito de inmortalidad, pero adem¨¢s ha causado una sangr¨ªa en la organizaci¨®n. Los miles de correos electr¨®nicos incautados en el ordenador del emir han conducido hasta el ata¨²d a tres de sus jefes operativos: el tuerto Ilyas Kashmiri y Attiy¨¢ Abd el Rahman v¨ªctimas de los ataques de los Predator, aviones no tripulados, en Wazirist¨¢n (Pakist¨¢n), y Fazul Abdul¨¢ Mohamed, acribillado por las balas cruzadas que recibi¨® en un control militar en Somalia. Es el mayor golpe recibido por Al Qaeda desde que el saud¨ª la constituy¨® en 1988 con solo 15 hermanos.
El egipcio Ayman al Zawahiri, que el pasado mes de junio cumpli¨® 60 a?os, es el nuevo emir, pero pocos creen en su futuro. El analista Assaf Moghadam, de 37 a?os, lo explica as¨ª: "Los miembros de Al Qaeda y sus afiliados le han jurado fidelidad (bayah), pero no es Bin Laden. Carece de su respeto y carisma. Los estadounidenses invertir¨¢n considerables esfuerzos en su localizaci¨®n, pero por razones simb¨®licas. Su neutralizaci¨®n es probablemente menos importante que la reciente muerte de Attiy¨¢ (el jefe de operaciones militares)". Gunaratna, asesor de Naciones Unidas, reconoce esa falta de carisma global del egipcio, pero advierte: "Es muy competente como l¨ªder terrorista y un brillante estratega. No hay que minusvalorarlo".
Guido Steinberg, de 43 a?os, analista del Instituto Alem¨¢n para Asuntos de Seguridad Internacional, asegura que la muerte de Osama es importante a largo plazo, aunque augura problemas de financiaci¨®n. "No hay un sustituto saud¨ª y eso es muy importante porque el dinero se recolecta all¨ª, viene desde Arab¨ªa Saud¨ª. Si no encuentran a un saud¨ª, el dinero se ir¨¢ a Yemen. Los libios ten¨ªan gran influencia, pero todos est¨¢n muertos. No veo qui¨¦n puede liderar la organizaci¨®n en Wazirist¨¢n. Los yihadistas son racistas y no aceptan a cualquiera".
Al Yihad, la organizaci¨®n terrorista que cre¨® Zawahiri para derrocar al Gobierno egipcio, se uni¨® a Al Qaeda el Askariya (la base militar) en junio de 2001, meses antes del 11-S, y su objetivo local se transform¨® en global. Ahora, algunos aseguran que hay divisiones internas y aventuran que sin Bin Laden los ataques del grupo pueden cambiar. Moghadam, el analista de ICT en Israel, apunta en esa direcci¨®n: "El grupo est¨¢ dividido entre los que quieren continuar atacando objetivos occidentales y los que desean focalizar su actuaci¨®n en los reg¨ªmenes ap¨®statas de Oriente Pr¨®ximo. Adem¨¢s, tiene que desmentir a algunos prominentes exmiembros de la organizaci¨®n que la critican". Noman Benotman, de 44 a?os, exjefe del Grupo Isl¨¢mico Combatiente Libio, uno de sus m¨²ltiples asociados, es uno de ellos y pronuncia desde Londres frases tan rotundas como esta: "Al Qaeda ignora el Cor¨¢n".
El monstruo creado por Bin Laden tiene, tambi¨¦n, problemas externos con otros actores del movimiento yihadista global que naci¨® en Peshawar (Pakist¨¢n) en 1998 con la creaci¨®n del Frente Internacional contra los Jud¨ªos y los Cruzados, "una obra del doctor Zawahiri", enfatiza Gunaratna.
Steinberg, el analista alem¨¢n, destaca las diferencias entre Al Qaeda y otros grupos asociados como el Movimiento Isl¨¢mico de Uzbekist¨¢n. "Los vemos como homog¨¦neos, pero no lo son. Veremos una organizaci¨®n diferente en la que grupos como Lashkar e Toiba (LeT) tendr¨¢n m¨¢s poder porque cuenta con el apoyo de militares paquistan¨ªes", dice. El paquistan¨ª LeT, asociado a Al Qaeda, lucha por la independencia de la Cachemira india y protagoniza sangrientos atentados, el ¨²ltimo el pasado julio en Bombay.
La primavera ¨¢rabe ha supuesto un duro golpe pol¨ªtico para Al Qaeda y ha desnudado sus argumentos en favor de la violencia. "Lo que Al Qaeda no ha logrado en dos d¨¦cadas de extrema violencia, una serie de protestas no violentas lo han conseguido en meses", incide Moghadam. Bin Laden atac¨® sin piedad a las dictaduras ¨¢rabes con sus fetuas y sus bombas, pero sin ¨¦xito. "Al Qaeda mantiene una dura competici¨®n con otros actores islamistas no yihadistas como los Hermanos Musulmanes que se ha convertido en el movimiento m¨¢s poderoso en Egipto y T¨²nez", dice el experto del instituto israel¨ª Herzliya. En esta carrera por dirigir a la comunidad isl¨¢mica corren tambi¨¦n el liban¨¦s Hezbol¨¢, Ir¨¢n y Turqu¨ªa.
Todos los expertos consultados coinciden en que la debilidad de Al Qaeda se acent¨²a todav¨ªa m¨¢s porque un gran n¨²mero de las v¨ªctimas de sus ataques son musulmanas, "lo que ha creado un fuerte rechazo contra la organizaci¨®n", se?alan recientes informes de la CIA.
?C¨®mo reaccionar¨¢ Al Qaeda central en esta situaci¨®n de acoso y debilidad? Informes de la CIA y de varios servicios de inteligencia europeos apuntan en la misma direcci¨®n: el gran reto de Al Qaeda, la meta con la que so?aba Bin Laden es la denominada nueva yihad, una met¨¢fora que en realidad significa el uso de armas qu¨ªmicas o radiol¨®gicas, crear una bomba sucia que acabar¨ªa con la vida de miles de personas. Sharif el Masri, un yihadista detenido en Pakist¨¢n y preso en Guant¨¢namo, confes¨® a sus interrogadores que la respuesta a la captura de Bin Laden ser¨ªa el uso "de una bomba [nuclear] que ser¨ªa detonada en Estados Unidos", seg¨²n un informe secreto elaborado en 2008 por el Departamento de Defensa de EE UU. El preso asegur¨® que disponen del artilugio nuclear casero, que lo esconden en Europa y tienen dificultades para su traslado.
?La confidencia de este preso fue un farol? Rohan Gunaratna recuerda desde su oficina en Singapur que Ayman al Zawahiri, el sucesor de Bin Laden, es un experto en guerra biol¨®gica: "?l fue el arquitecto del programa de ¨¢ntrax. Si tiene la oportunidad de usar la bomba sucia lo har¨¢, tanto en Europa como en Estados Unidos".
Assaf Moghadam opina lo mismo, pero duda que la organizaci¨®n terrorista haya conseguido la bomba sucia. "Es m¨¢s probable que Al Qaeda construya y use una bomba sucia (artilugio radiol¨®gico) que una bomba nuclear. Las armas radiol¨®gicas son infinitamente m¨¢s f¨¢ciles de producir y tienen profundos efectos psicol¨®gicos en sus objetivos". Zawahiri se lo confes¨® a Hamid Mir, bi¨®grafo paquistan¨ª de Bin Laden: "No es tan dif¨ªcil. Si uno tiene 30 millones de d¨®lares puede comprar este tipo de maletas bomba en el mercado de Asia Central". Zawahiri es un tipo fr¨ªo y sin escr¨²pulos. Cuando viv¨ªa en Sud¨¢n, en 1994, orden¨® ejecutar a un ni?o de 15 a?os, hijo de uno de sus colaboradores, porque espiaba para el Gobierno egipcio.
El futuro es un misterio, pero Moghadam augura un incremento de atentados ejecutados por seguidores de la ideologia yihad¨ª sin lazos con la organizaci¨®n, "ataques similares al que protagoniz¨® el psiquiatra del Ej¨¦rcito norteamericano Nidal Hassan que asesin¨® a 13 personas en la base de Fort Hood Army (Tejas)" en noviembre de 2009. "El movimiento yihadista global no es hoy m¨¢s peligroso que en la era Bin Laden", afirma. "Tiene capacidad para regenerarse", asegura un agente de la CIA en Europa que pide el anonimato.
Desde el CNI que dirige el general F¨¦lix Sanz Rold¨¢n se destaca c¨®mo ha aumentado la cooperaci¨®n internacional. "La seguridad ha adquirido un car¨¢cter global en lo geogr¨¢fico e integral en cuanto al modo de abordarla. Aspectos como la educaci¨®n, la gobernanza econ¨®mica, el desarrollo sostenible, los movimientos migratorios o la ecolog¨ªa han sido incluidos en la agenda de la seguridad mundial", se?ala un portavoz del centro.
La ¨²ltima baja en Al Qaeda ha sido Yunis el Mauritani, considerado como su ministro de Exteriores. Agentes del cuestionado servicio secreto paquistan¨ª ISI lo detuvieron en la ciudad de Quetta, fronteriza con Afganist¨¢n y feudo yihadista. ?Cu¨¢nto tardar¨¢ EE UU en capturar a Ayman al Zawahiri? "M¨¢s r¨¢pido que a Osama. Ya lo ver¨¢", aventura Gunaratna.
"Haz una bomba en la cocina de tu madre"
"Haz una bomba en la cocina de tu madre", firmaba el denominado Chef de Al Qaeda en una de las miles de p¨¢ginas webs yihadistas que laten en la red. Los servicios de inteligencia brit¨¢nicos corrompieron la p¨¢gina y la neutralizaron en la operaci¨®n Cupcake (magdalena).
La propaganda del mensaje yihadista en Internet es cada vez m¨¢s dif¨ªcil. "Antes del 11-S no ten¨ªan problemas, pero ahora desaparecen en meses. Las webs oficiales son incapaces de sobrevivir y la visibilidad de las que quedan cada vez es menor", afirma Manuel Torres, de 33 a?os, profesor de Ciencia Pol¨ªtica en la Universidad Pablo Olavide de Sevilla y especialista en terrorismo en la Red.
Las medidas de seguridad para participar en los foros, y en especial en los de car¨¢cter islamista, son cada vez m¨¢s esquizofr¨¦nicas. Se exige el pedigr¨ª de los usuarios y la desconfianza hacia todos impide su crecimiento. La p¨¢gina de Shabakat al Nur al Islamiya exig¨ªa hace un a?o 150 comentarios de calidad para ser admitido. El paso del activismo virtual al contacto f¨ªsico con otras personas es tambi¨¦n cada d¨ªa m¨¢s complicado. "Cadenas de televisi¨®n como Al Yazira han perdido protagonismo. Han surgido fricciones con Al Qaeda y los comunicados van ahora directos a Internet", destaca Torres.
Ayman al Zawahiri, el sucesor de Osama bin Laden, respondi¨® en 2007 a una selecci¨®n de preguntas en una convocatoria in¨¦dita que Al Qaeda lanz¨® a la Red. Muchas eran muy cr¨ªticas, se filtraron y seleccionaron. No ha vuelto a repetir la experiencia. Abu Muhammad al Maqdisi, prominente cl¨¦rigo y mentor de la yihad, imit¨® la iniciativa, pero las preguntas solo pod¨ªa leerlas el jeque, no los otros usuarios.
Torres define as¨ª el uso de Internet por Al Qaeda: "Internet ejerce una funci¨®n niveladora. Cada nuevo uso ventajoso para los terroristas es una nueva oportunidad para debilitarlos. Es un territorio neutral y el futuro lo marcan sus actores".
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