Evidencias y derecho a la educaci¨®n

Ante tanto ruido pol¨ªtico y medi¨¢tico sobre el uso de las lenguas en la escuela en Catalu?a es necesario aportar, en clave pedag¨®gica, algunas reflexiones y evidencias. En este sentido vaya por delante mi posici¨®n favorable a la inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica.

Resulta cuanto menos curioso que algunas familias se preocupen m¨¢s por exigir cu¨¢l debe ser la lengua de comunicaci¨®n entre el profesorado y sus hijos, que por el nivel alcanzado en el dominio de las dos lenguas cooficiales en Catalu?a. Estudios internacionales avalan las ventajas de los programas de inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica en pa¨ªses con una lengua mayoritaria y lenguas minoritarias en su territorio; ventajas, tanto desde la perspectiva del aprendizaje de lenguas (la inmersi¨®n no perjudica el aprendizaje de una lengua) como de la cohesi¨®n social en entornos de diversidad cultural. Los datos recientes en competencia lectora (pruebas de diagn¨®stico 2? ESO y PISA-2009), por otro lado, muestran que los resultados en Catalu?a son similares a la media espa?ola. Y tanto unos como otros necesitan mejorar notablemente. Emplear el catal¨¢n como lengua vehicular no supone ni que el entorno de los alumnos catalanes en la escuela sea monoling¨¹e, ni tampoco vulnerar el derecho a la libertad ling¨¹¨ªstica de los alumnos como se observa en las aulas, los patios, el comedor... De hecho, con este abordaje se pretende garantizar el derecho al aprendizaje de dos lenguas al final de la escolarizaci¨®n.

Nada de lo se?alado presupone que no se siga mejorando la aplicaci¨®n del modelo de inmersi¨®n en Catalu?a desde una doble perspectiva. Por una parte, adaptando esta medida a la realidad de algunas escuelas que en un entorno claramente castellanoparlante necesiten un mayor refuerzo de catal¨¢n; o por el contrario, en un entorno m¨¢s catalanoparlante necesiten un mayor refuerzo de castellano. Por otra parte, urge elevar (como en el resto del pa¨ªs) el nivel de competencia ling¨¹¨ªstica de nuestros alumnos. En catal¨¢n, en castellano y en ingl¨¦s. No nos dejemos arrastrar por este falso debate educativo, y las tensiones pol¨ªticas que conlleva; centr¨¦monos en mejorar la calidad de la educaci¨®n en tiempos de crisis.

Ferran Ferrer es catedr¨¢tico de Educaci¨®n Comparada de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona