La casa por el tejado

En los ¨²ltimos meses percibimos un importante deterioro del liderazgo territorial de Feij¨®o. As¨ª, su papel protagonista como bar¨®n del PP y probador oficial de recortes, ha cedido protagonismo a nuevos poderes territoriales que irrumpen con fuerza en el partido como Cospedal desde Castilla-La Mancha o Monago desde Extremadura, sin olvidar a la pol¨¦mica presidenta madrile?a Esperanza Aguirre. Esta p¨¦rdida de protagonismo, m¨¢s all¨¢ de medir el liderazgo en el PP y la confianza de Mariano Rajoy, tiene sin duda que ver con el deterioro de la imagen del presidente gallego que, transcurrida m¨¢s de media legislatura, evidencia que las recetas conservadoras no funcionan.

Feij¨®o, lejos de ser en este momento el aval a la pol¨ªtica econ¨®mica del PP por sus ¨¦xitos en materia de empleo y reactivaci¨®n, es el reflejo de una p¨¦sima gesti¨®n cuya ¨²nica iniciativa pol¨ªtica es el recorte indiscriminado del gasto p¨²blico y la externalizaci¨®n de responsabilidades en el Gobierno de Espa?a. As¨ª, con el 60% de la legislatura consumida, esta Xunta ha transformado el diferencial positivo de la comunidad aut¨®noma en empleo y actividad, en la vuelta a la Galicia de la resignaci¨®n.

Los perjudicados por la crisis son los parados, no los que tienen 700.000 euros de patrimonio

Galicia lidera la destrucci¨®n de la actividad industrial, tiene el mayor incremento de ERE de Espa?a, es la comunidad en la que m¨¢s descendi¨® la afiliaci¨®n a la Seguridad Social, lideramos el recorte del cr¨¦dito a empresas y familias y con 56.900 parados m¨¢s que al inicio de la legislatura somos una de las cinco comunidades con peor resultado en empleo.

D¨ªa a d¨ªa, Feij¨®o abandona sus compromisos electorales y su contrato con Galicia, no solo en materia de empleo y servicios p¨²blicos sino tambi¨¦n sus proclamas de no gastar un euro m¨¢s de lo que tiene. Desde el inicio de esta legislatura, la deuda gallega creci¨® un 75%, es decir, hoy debemos 3.000 millones de euros m¨¢s que hace 30 meses. Una deuda que quintuplica la acumulada en toda la legislatura pasada y que no ha servido para mejorar la econom¨ªa ni los servicios, m¨¢s bien al contrario, Galicia pierde capacidad, protagonismo y posiciones econ¨®micas frente al resto de comunidades a la vez que privatiza servicios p¨²blicos.

Ante el fracaso de la pol¨ªtica econ¨®mica de la Xunta y el consiguiente debilitamiento de la figura de Feij¨®o en el panorama nacional, el presidente de Galicia ha intentado recuperar el protagonismo asumiendo el establecimiento de un limite al crecimiento del gasto y la deuda p¨²blica. De este modo, intentando protegerse de si mismo y del desmesurado ritmo de crecimiento que est¨¢ imponiendo a nuestra deuda, se aprob¨®, con el apoyo de los socialistas gallegos, la ley del techo de gasto para reforzar un compromiso, ciertamente necesario, con la estabilidad presupuestaria y la sostenibilidad de las finanzas p¨²blicas. El problema es que este consenso lo rompe el Gobierno gallego al establecer la cifra de gasto no financiero para el pr¨®ximo ejercicio, que revela la ausencia de una estrategia de pol¨ªtica econ¨®mica para sacar a Galicia de la crisis y la falta de compromiso social.

As¨ª, en lugar de analizar el nivel de servicios, programas y actuaciones imprescindibles para promover una sociedad con mayor bienestar y una econom¨ªa innovadora, con capacidad de crear empleo estable, decidi¨® empezar la casa por el tejado. De este modo, se limit¨® a actualizar los ingresos presentes, tom¨¢ndolos como un dato inalterable a partir del que fij¨® un techo de gasto. Al renunciar a la pol¨ªtica fiscal, la lucha contra el fraude y la reactivaci¨®n econ¨®mica, demuestra ser un Gobierno sin talento ni iniciativa, resignado a que el futuro lo decidan las fuerzas del mercado, sin preocuparse de las consecuencias de este ajuste sobre la sanidad y educaci¨®n p¨²blicas, o sobre la inversi¨®n productiva. M¨¢s a¨²n, ante la posibilidad de generar nuevos ingresos activando el impuesto de patrimonio, se instala en la lucha partidista, olvidando que los m¨¢s perjudicados por esta crisis no son las afortunadas familias con m¨¢s de 700.000 euros de patrimonio sino los 224.582 parados y paradas gallegas.

Feij¨®o, contagiado de la claridad y decisi¨®n que caracterizan a Rajoy, despu¨¦s de calificar la reforma del impuesto de absurda, ha dicho que no tomar¨¢ una decisi¨®n hasta despu¨¦s del 20-N. Su partido tambi¨¦n ha anunciado que el informe de la fundaci¨®n FAES sobre la introducci¨®n del copago sanitario lo har¨¢ p¨²blico pasado el 20-N. Solo Esperanza Aguirre parece dispuesta a desvelar parte del programa de recortes y reformas que propone la derecha, aunque sus palabras estremecen a propios y ajenos. Esperemos que, en la guerra de protagonismo y recortes de los l¨ªderes conservadores, Feij¨®o no crea necesario que Galicia se sit¨²e la primera de la clase.