Claves para una nueva etapa
El proceso se enfrenta a numerosos obst¨¢culos y al recelo suscitado en parte de la opini¨®n p¨²blica. El 'lehendakari' Patxi L¨®pez dar¨¢ el primer paso con una ronda de contactos pol¨ªticos
El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el lehendakari del Ejecutivo vasco, Patxi L¨®pez, han hecho un llamamiento a la calma, a no precipitar las cosas tras el anuncio de ETA de dejar definitivamente la violencia. Ambos est¨¢n sometidos a una fuerte presi¨®n. Adem¨¢s del recelo natural de muchos ciudadanos, Zapatero, ya de salida de la Moncloa, se encuentra con una ofensiva en numerosos medios de comunicaci¨®n de Madrid. Portavoces de asociaciones de v¨ªctimas y sectores de las Fuerzas de Seguridad tampoco se creen que ETA haya abandonado. Y por tanto, rechazar¨ªan cualquier gesto del Gobierno hacia la banda terrorista en este momento.
Si a esa presi¨®n se a?ade que el pr¨®ximo 20 de noviembre se celebran las elecciones generales, en las que todas las encuestas se?alan que ganar¨¢ el PP, el margen de maniobra que le queda es muy estrecho para realizar cualquier movimiento. De hacerlo tendr¨ªa que ser de acuerdo con Mariano Rajoy, que pondr¨ªa muchas trabas antes del 20-N, porque la presi¨®n sobre ¨¦l a¨²n es mayor, ya que la oposici¨®n m¨¢s dura a cualquier gesto procede de ¨¢mbitos radicales de la derecha. Por eso, el candidato socialista y exministro del Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, se?al¨® el jueves por la noche que ser¨¢ el pr¨®ximo Gobierno el que tome la iniciativa.
Para superar la desconfianza de amplios sectores habr¨¢ que comprobar primero la voluntad clara de ETA
A su vez, el lehendakari Patxi L¨®pez est¨¢ sometido a una presi¨®n de signo distinto. Tanto el PNV como Aralar y Bildu, la coalici¨®n de la izquierda abertzale, quieren movimientos r¨¢pidos para responder a la decisi¨®n de ETA de abandonar las armas definitivamente. Pero L¨®pez, en l¨ªnea tambi¨¦n con el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, est¨¢ en una posici¨®n m¨¢s pr¨®xima a la de Zapatero y Rubalcaba. Cree que es necesario que la opini¨®n p¨²blica asimile lo sucedido y que se verifique la decisi¨®n de ETA antes de dar alg¨²n paso.
No obstante, ha sido Patxi L¨®pez, de acuerdo con Zapatero y Rubalcaba, el que ha decidido tomar la iniciativa pol¨ªtica con la convocatoria de una ronda de conversaciones con los partidos vascos, incluido Bildu, para la pr¨®xima semana. Tiene l¨®gica que sea el Gobierno vasco el que lo haga y no el central, dada la proximidad de las elecciones generales y el clima medi¨¢tico y pol¨ªtico que se observa en Madrid. Por m¨¢s que sea el Gobierno central el que tenga las competencias, por ejemplo, en materia penitenciaria.
Pero m¨¢s all¨¢ del corto plazo, la decisi¨®n de ETA de abandonar las armas definitivamente abre una nueva etapa, que ser¨¢ muy larga. Primero habr¨¢ que comprobar la voluntad clara de ETA de abandonar la violencia, necesaria para que sectores reacios a admitir que las cosas han cambiado asimilen la veracidad de la decisi¨®n etarra. Estas son algunas claves del nuevo escenario.
Extorsi¨®n. Era la pieza b¨¢sica de la supervivencia financiera de ETA. La banda terrorista anunci¨® su eliminaci¨®n el pasado enero, cuando declar¨® la tregua permanente y verificable. Las asociaciones empresariales vascas y navarra han confirmado que ETA no env¨ªa cartas de extorsi¨®n. Los dirigentes de la izquierda abertzale lo destacan como prueba de que la banda est¨¢ abocada a su final.
Disoluci¨®n. ETA ha anunciado el cese definitivo de la violencia, pero no su disoluci¨®n. El Pacto de Ajuria Enea y los acuerdos de pol¨ªtica antiterrorista de los partidos democr¨¢ticos apostaban por esa f¨®rmula para dar por bueno el final de la banda. Los l¨ªderes de la izquierda abertzale afirman que ETA se disolver¨¢ cuando sus presos terminen de salir de la c¨¢rcel. Su versi¨®n es que ETA solo se ocupar¨¢ de eso y no mantendr¨¢ ninguna tutela respecto al proceso pol¨ªtico.
Presos. Hay m¨¢s de 700 presos de ETA. De ellos, m¨¢s de 500 est¨¢n repartidos entre diversas c¨¢rceles espa?olas y el resto se encuentran en prisiones francesas. Mercedes Gallizo, responsable de Instituciones Penitenciarias, dispone desde 2006 de un informe con todas las alternativas posibles. Las posibilidades son variadas: acercamientos de presos a las c¨¢rceles vascas; medidas favorables a reclusos preventivos y a enfermos. Tambi¨¦n hay posibilidades judiciales como la revisi¨®n de la aplicaci¨®n de la llamada doctrina Parot, pendiente del Tribunal Constitucional, que dejar¨ªa en la calle a decenas de presos con muchos a?os de c¨¢rcel a la espalda. Todas estas medidas, previstas en la ley, necesitar¨ªan de un acuerdo pol¨ªtico entre los principales partidos y se podr¨ªan aplicar de forma gradual, una vez confirmado el cese definitivo de ETA.
V¨ªctimas del terrorismo. El papel que les asignan el lehendakari del Gobierno vasco y los principales partidos espa?oles y vascos es el de guardianes de la memoria. Ser¨¢n los protagonistas del relato democr¨¢tico de la historia del terrorismo vasco.
Mesa de partidos en Euskadi. Tanto el PSE como el PP la creen innecesaria. Consideran que una vez que la izquierda abertzale tenga representaci¨®n en el Parlamento vasco, como ya la tiene en ayuntamientos y diputaciones, debe ser all¨ª donde canalice sus reivindicaciones sin necesidad de montar foros al margen.
Convivencia y reconciliaci¨®n. El lehendakari del Gobierno vasco present¨® un plan de paz en el debate de pol¨ªtica general en septiembre en el que abog¨® por la convivencia entre los vascos. El lehendakari plantea la convivencia como un objetivo posible. Considera que la reconciliaci¨®n es un objetivo a m¨¢s largo plazo.
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