Otra resurrecci¨®n del DNIe
El Gobierno intenta reanimar el documento electr¨®nico en poder ya de 25 millones de espa?oles, pero con una escasa utilizaci¨®n
El DNI electr¨®nico (DNIe) acaba de cumplir cinco a?os y hay buenas y malas noticias. Lo bueno: la tarjetita ya est¨¢ en el bolsillo de 25 millones de ciudadanos y en tres a?os llegar¨¢ a toda la poblaci¨®n. Lo malo: 25 millones de ciudadanos siguen sin tener ni idea de para qu¨¦ sirve. Lo utilizan exactamente igual que el viejo documento de papel plastificado. Y no es culpa de ellos. Un sinf¨ªn de obst¨¢culos y errores han conseguido que una inversi¨®n de 113 millones de euros se quede, de momento, en pura promesa.
El Ministerio de Industria hace su segundo intento para enderezar el rumbo: un acuerdo con 16 empresas privadas, entre ellas Banco Santander, Vodafone o Iberdrola, para difundir las ventajas del DNIe. La campa?a, con un coste de tres millones de euros, se extender¨¢ hasta diciembre. Est¨¢ por ver qu¨¦ consigue. Pero si es igual que con la primera, realizada el a?o pasado con 12 millones de euros, poco cambiar¨¢.
Solo 30 empresas han creado servicios con el documento virtual
Para el IRPF, el certificado favorito es el de la F¨¢brica de la Moneda
"Hasta ahora el DNIe ha sido un fracaso de difusi¨®n. Esta se ha encomendado en buena parte a la Direcci¨®n General de Polic¨ªa (DGP) y ellos no son precisamente famosos por su capacidad para lanzar productos", ironiza David Blanco, fundador de Tractis, una plataforma online de intercambio de contratos. Esta empresa es casi la ¨²nica en Espa?a que ha surgido al calor del DNIe. El par¨®n del sector les ha obligado a cambiar de planes. "Me voy a Brasil, all¨ª est¨¢n empezando a lanzar su DNIe y espero que haya mercado".
El problema fundamental en la adopci¨®n del DNIe es el escaso tir¨®n entre las empresas privadas. Apenas 30 firmas han creado servicios con el nuevo documento, principalmente entidades financieras, y solo de autentificaci¨®n. Es decir, de acceso a nuestras cuentas online, algo que ya solucionan los sistemas existentes. El verdadero valor del DNIe, el de firmar desde casa y en pijama el alta del ADSL o un dep¨®sito bancario, no se ha explotado.
"El proyecto necesita tiempo, maduraci¨®n. El uso del DNIe est¨¢ mucho m¨¢s extendido en la Administraci¨®n p¨²blica que en el sector privado, pero eso cambiar¨¢", promete Salvador Soriano, subdirector general del Ministerio de Industria, responsable junto con Red.es y la DGP del despliegue del DNIe. Y a?ade que en mayo hubo un mill¨®n de usos. Eso s¨ª, la mayor¨ªa para tr¨¢mites del sector p¨²blico.
En el sector privado, el problema es doble. Por un lado, las empresas est¨¢n obligadas por ley a ofrecer la contrataci¨®n de sus servicios a trav¨¦s del DNIe, pero si no lo hacen no son sancionadas. Dada la situaci¨®n de crisis, alguien pens¨® que era mejor no multar. El resultado es que las compa?¨ªas se han olvidado del DNIe. "Si hubiera un r¨¦gimen sancionador la situaci¨®n probablemente ser¨ªa diferente. Pero no lo puedo criticar, la ley es la que es", dice Soriano.
El otro problema: los ciudadanos no compran lectores de DNIe. Red.es regal¨® 1,3 millones de unidades, pero la mayor¨ªa (un 60%) fue dos a?os despu¨¦s de iniciar el despliegue del documento. Demasiado tarde. Alemania, que comenzar¨¢ su proyecto de DNIe en noviembre, aprob¨® 21 millones de euros para regalar lectores. Y Estonia entreg¨® uno a cada persona cuando recog¨ªa el documento.
Un 4% de los clientes de ING Direct, por ejemplo, acceden a su cuenta online con el DNIe. Poco m¨¢s pueden hacer. "Nosotros ofreceremos a los nuevos clientes la posibilidad de contratar productos con el DNIe", asegura Werner Zippold, directivo de la entidad, quien se?ala otra barrera. "Mucha gente no recuerda el PIN del DNI electr¨®nico y caduca a los dos a?os. Hay obst¨¢culos, pero acabar¨¢ siendo un ¨¦xito".
Quiz¨¢s ocurra si desaparece otro dolor de cabeza: el solapamiento de certificados digitales. Las Administraciones P¨²blicas soportan m¨¢s de 20. Y en uno de los tr¨¢mites m¨¢s comunes, el de la presentaci¨®n electr¨®nica de la Declaraci¨®n de la renta, el certificado m¨¢s popular es el de la F¨¢brica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT) y no el DNIe.
"Si estos inconvenientes no se resuelven pronto, Espa?a perder¨¢ la oportunidad de crear un ecosistema s¨®lido de certificaci¨®n. Alemania, Brasil y otros pa¨ªses vienen pisando fuerte. La ventaja que ten¨ªamos nos va a durar dos telediarios", dice Blanco. Iniciativas como MiFirma.com, que re¨²ne firmas con validez legal para apoyar causas populares, demuestran que el DNIe es un gran invento. Solo falta utilizarlo.
El Instituto Nacional de las Tecnolog¨ªas de la Comunicaci¨®n (Inteco) ha presentado esta semana un "sencillo programa" de instalaci¨®n en ordenadores para facilitar el uso del carn¨¦ electr¨®nico.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.