La JMJ a¨²n debe seis millones por los cheques de comida de los peregrinos
La organizaci¨®n lleva un mes aplazando el pago pactado con los hosteleros
Fernando Rodr¨ªguez es un hombre muy expresivo. Pone cara de pocos amigos cuando alguien levanta mucho la voz en su taberna, La Gloria del Acebo, o lo mismo hace una mueca si un cliente pide un ibuprofeno, como si le estuvieran confundiendo con un farmac¨¦utico. Por eso, cuando le sacan el tema de lo que le adeuda la JMJ en concepto de las comidas que sirvi¨® en agosto a los peregrinos, se echa las manos al cuello simulando una soga que aprieta. "A los sitios peque?os nos ahogan cuando tardan tanto en pagar. ?Tenemos que hacer frente a los proveedores!", se?ala mientras maneja la cafetera. Los parroquianos del lugar asienten para darle la raz¨®n.
La Federaci¨®n Espa?ola de Cadenas de Restauraci¨®n Moderna (Fehrcarem) fue la encargada de crear una red de establecimientos en la que los peregrinos pudiesen almorzar y cenar durante la Jornada Mundial de la Juventud, una semana de actividades religiosas que culmin¨® con la visita del Papa. Se adhirieron desde grandes cadenas como McDonald's a restaurantes de barrio como el de Rodr¨ªguez, donde se sirve una exquisita comida casera en el coraz¨®n de la La Latina. Los peregrinos pagaron con cheques-comida y la organizaci¨®n se comprometi¨® a reembolsar ese dinero en dos plazos, el 19 de septiembre y el 3 de octubre.
La cifra adeudada supone un 20% de lo facturado durante el evento
"Todo va a quedar pagado en una semana", aseguran en la organizaci¨®n
Pasado ese tiempo, la JMJ adeuda a¨²n seis millones de euros a los restauradores madrile?os, lo que supone un 20% de lo que se factur¨® durante toda esa semana. Casi un mes de retraso. Los empresarios se quejan de la demora y de que nadie les haya dado una nueva fecha, seg¨²n fuentes del sector.
La Vi?a, una asociaci¨®n de hosteleros, est¨¢ recogiendo las quejas de sus asociados, que est¨¢n agobiados. "Hay empresarios que han cobrado todo, otros una parte y otros nada. Hay un poco de confusi¨®n con el asunto. El volumen de ventas fue muy grande y para algunos se ha convertido en una preocupaci¨®n", explica una portavoz.
La organizaci¨®n achaca los retrasos a "una mala lectura de los cheques gourmet". "No coincid¨ªa la numeraci¨®n que aparec¨ªa en los cheques con los del registro. Eso ha provocado que todo se retrase un poco", justifica por tel¨¦fono un miembro del Fehrcarem. La federaci¨®n cree que saldar¨¢ todo lo adeudado a principios del mes que viene. "Se est¨¢ trabajando ya en ese asunto y todo va a quedar pagado en una semana", a?ade un portavoz con seguridad.
La realidad es que la visita de miles de peregrinos a la ciudad supuso un gran impulso para los hosteleros madrile?os, sobre todo en un mes tan bajo en ventas como suele ser el de agosto. "Tengo plena confianza en que vamos a cobrar. Es cierto que supone un imprevisto en los presupuestos que calculas cada mes, pero si cobramos se justifica todo. Es un dinero que nos cay¨® del cielo, nunca mejor dicho", dice Javier V¨¢zquez, propietario de dos restaurantes gallegos en la ciudad, O pazo de Lugo y Portomar¨ªn, y un establecimiento de Cruz Blanca en Marqu¨¦s de Vadillo. A¨²n no ha cobrado ni uno de los 30.000 euros que recibi¨® en cheques de los peregrinos (m¨¢s de 4.000 comidas servidas, todo un r¨¦cord), pero no duda en se?alar que el negocio, de concretarse, "va a ser redondo".
Un total de 2.500 establecimientos se adhirieron a la red de negocios que aceptaban los cheques del m¨¢s de un mill¨®n de peregrinos que abarrotaron la ciudad con sus llamativas camisetas. La Vi?a calcula que se gastaron otros 10 millones m¨¢s en bebida y comida al margen de los cheques. Los hosteleros fueron los grandes beneficiados de unas jornadas que dejaron menos beneficios en otros sectores. Rodr¨ªguez se lo pas¨® en grande esa semana, rodeado de j¨®venes entusiastas que en agradecimiento a su buen hacer como camarero le regalaron estampitas y rosarios. A veces tocaban la guitarra. El problema es que a d¨ªa de hoy a¨²n no ha cobrado por esas comidas. El p¨¢rroco del barrio se ha interesado por la demora y le ha dicho que est¨¢ dispuesto a mediar con el Arzobispado si fuese necesario. Aliviado, el camarero respira: cobrar¨¢ por la v¨ªa humana o la divina.
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