La marina del Port Vell se topa con el rechazo de oposici¨®n y vecinos
El Ayuntamiento agradece que haya "inversores que se fijen en Barcelona" - El Puerto tolera que el proyecto de lujo se anuncie pese a carecer de licencia
El proyecto de la inglesa Salamanca Investment de convertir el Port Vell de Barcelona en una marina de lujo para yates de hasta 180 metros no gusta ni a la oposici¨®n -PP incluido- ni a los vecinos de la Barceloneta. El plan fue presentado en el Sal¨®n N¨¢utico de M¨®naco, donde se asegur¨® que estar¨¢ listo el pr¨®ximo oto?o, y la Autoridad Portuaria de Barcelona (APB) lo ve con "buenos ojos". No obstante, el proyecto deber¨¢ superar un largo tr¨¢mite: que el Departamento de Territorio y Sostenibilidad lo autorice, que el Ayuntamiento est¨¦ de acuerdo y que se someta a exposici¨®n p¨²blica, y finalmente, la aprobaci¨®n del Consejo de Administraci¨®n de la APB. Una portavoz de la APB explic¨® ayer que conoc¨ªan el plan, pero que la documentaci¨®n la tuvieron hace una semana.
"La seguridad de los yates de la realeza saud¨ª colapsa Ibiza", dicen los navegantes
El Consistorio evit¨® comentar ayer el sorprendente hecho de que los promotores den ya por segura la marina de lujo y sea exhibida en el pr¨®ximo Sal¨®n N¨¢utico de Barcelona. Sin querer pronunciarse sobre la transformaci¨®n urban¨ªstica que supondr¨ªa en el frente mar¨ªtimo, el gobierno de Xavier Trias "agradece que los inversores se fijen en Barcelona".
Para la oposici¨®n en el Consistorio, el PP y el PSC, Iniciativa per Catalunya (ICV-EUiA) y la Federaci¨®n de Asociaciones de Vecinos, la reconversi¨®n del puerto deportivo en una base de grandes yates de lujo no es de recibo. "Hay muchas prioridades antes que transformar el Port Vell. Y adem¨¢s, una operaci¨®n de este tipo necesita estudios de movilidad, de seguridad y de impacto que no se han hecho", apuntaba el edil popular Eduardo Bola?os, que de paso recordaba que CiU est¨¢ en minor¨ªa y que para sacar adelante el proyecto necesita apoyos. Y hasta la fecha, esa muleta es la del PP.
El socialista Jordi Mart¨ª rechaza el plan porque supone convertir esa parte del frente mar¨ªtimo en "un espacio exclusivo que condicionar¨ªa el futuro del barrio". Sostiene que algo as¨ª "ir¨ªa en contra del inter¨¦s general" de los barceloneses, que hace 25 a?os recuperaron el frente mar¨ªtimo de la ciudad.ICV cree que ser¨ªa "impensable" que la ciudad tolerase el cambiazo por un puerto de lujo. Jordi Bonet, presidente de la FAVB, no duda en que algo as¨ª significa dar prioridad a los intereses privados y del puerto frente "al modelo urbano y mixto de peque?as embarcaciones".
Los vecinos de la Barceloneta y los usuarios de las plazas de amarre tambi¨¦n mostraron ayer su descontento por el proyecto de la marina cinco estrellas en el Port Vell y alertaron de las consecuencias nefastas que, a su juicio, podr¨ªa implicar su ejecuci¨®n. "Esto es una pieza m¨¢s de la idea de ciudad de escaparate que se est¨¢ impulsando en la Barceloneta, de la que forman parte el hotel W, la reforma de Moll de Pescadors y el otro puerto de lujo en la nueva bocana", asegur¨® Gal¡¤la Pin, de la asociaci¨®n de vecinos de L'?stia. "El Ayuntamiento siempre ha dado carta blanca al Puerto", se quej¨® Pin.
La asociaci¨®n de vecinos enumera las posibles consecuencias de la remodelaci¨®n del atracadero. "Al crearse estos circuitos tur¨ªsticos de lujo, cambia la din¨¢mica del barrio. Habr¨¢ m¨¢s apartamentos tur¨ªsticos que desplazar¨¢n al vecino, se encarecer¨¢n los productos b¨¢sicos y los alquileres de los locales [las rentas antiguas expiran en 2014], y llegar¨¢n nuevas tiendas con productos que satisfagan el nuevo perfil". Pin apostill¨®: "No estamos en contra del turismo, estamos en contra del uso que el turista le da al espacio p¨²blico y de que se dise?e pensando en ¨¦l, en detrimento de los vecinos".
La llegada de los yates, con sus consecuentes sistemas de vigilancia privada, tambi¨¦n genera preocupaci¨®n en el barrio. La temen porque ya la conocen. Seg¨²n explica un conocedor del puerto, cada vez que las grandes embarcaciones -propiedad de fortunas rusas- se instalan en la marina para ser reparadas, el despliegue de agentes de seguridad convierten esos pantalanes en un fort¨ªn. Un usuario de la marina pone de ejemplo lo que sucede en Ibiza cuando llegan las grandes embarcaciones de la familia real saud¨ª. "Ellos traen su propia seguridad y decenas de coches. La isla se colapsa cuando los pr¨ªncipes deciden dar un paseo y los vigilantes constantemente irritan a las personas que est¨¢n en las terrazas".
El navegante, que pide que se omita su nombre por temor a quedarse sin plaza en el caso de que se apruebe el plan, pues la marina ya les inform¨® de que no habr¨¢ para todos, cree que la iniciativa terminar¨¢ en "un aparcamiento para grandes barcos". "En verano nadie se queda en Barcelona, los due?os de yates veranean en Grecia, Francia o Italia. La marina se queda vac¨ªa".
Los responsables del Sal¨®n N¨¢utico (evento anual de Fira de Barcelona que este a?o celebrar¨¢ su 50? edici¨®n entre el 5 y el 13 de noviembre) no ven con malos ojos la reconversi¨®n hacia el lujo. Seg¨²n su presidente, Luis Conde, tiene sentido enfocar la Marina del Port Vell hacia los grandes yates, porque "una cosa es la afici¨®n y otra es el negocio". Barcelona, se?al¨® ayer, es una ciudad que puede ofrecer a las grandes embarcaciones calidad y la posibilidad de hacer un mantenimiento adecuado. "Los rusos han comprado el Port Vell. Los de Qatar, el de Barcelona. Y en el hotel Vela tambi¨¦n podr¨¢n atracar los grandes yates", resumi¨® Conde, informa Cristina Delgado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.